Capítulo 23

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Logro abrir el sobre y me limito a leer...

Mi cuerpo se llena de alivio, el resultado dió negativo, una tranquilidad enorme llena mi alma, ya necesitaba sentir un poco de paz después de tantos problemas, dios muchas gracias, esto, ¿qué haré con esto? No puedo tirarlo en la basura porque mi padre lo puede ver, lo tendré que guardar al cabo que mi padre no me revisa mis cosas pero por si acaso lo guardaré en un lugar donde nadie pueda meter mano, mi cajita de recuerdos, claro Natalie, eso nadie lo puede abrir más que tú, busco entre mis cosas esa cajita hasta que la encuentro, la abro y meto el sobre dentro, vuelvo a cerrarla insertándole la contraseña de seguridad que esta contiene. La guardo entre mi ropa en el armario para que esté más seguro. Miles de pensamientos se me vienen a la mente, será correcto hacerle saber a Ben sobre el resultado? No, Natalie, él no tiene derecho a saberlo. Estás equivocada, Natalie, él lo tiene que saber, aunque no lo quieras ver él te ayudo en esto. Se te ha olvidado que él fue quien arruinó tu vida? Por supuesto que no, pero no puedo dejarlo con la duda. Es mejor que no mantengas contacto con él, pueda volver hacerte lo mismo, recuerda que no puedes confiar en alguien como él...

Después de lidiar tanto con mi cabeza decido que es mejor no decirle nada a Ben, ya no quiero mantener ningún tipo de contacto con él, quiero reiniciar mi vida y será mejor olvidarme de todo lo que sucedió, sé que no va a ser posible pero al menos tengo que intentarlo, tengo que alejarme de la gente que me hizo mucho daño en especial de Ben Cox.

No me pude despedir de las dos personas que más quiero en el mundo, Ali y Anthony, aunque Anthony sabía que me iba a ir de la ciudad no me despedí de él, no quise llamarlo por como estan las cosas ahorita entre él y yo, sin embargo de Ali no me despedí ni siquiera le pude hacer saber que me iba, ya no volvió a hablar conmigo en los últimos días creó que se enfocaba más en espiar a Ben, me hubiera gustado despedirme de ella. Tal vez me odie de no haberlo hecho.

-¡Hija tienes una llamada de Thony!- parece que mi padre se encariño mucho con Anthony al llamarlo así. Salgo de la habitación y bajo hasta llegar a la sala en la cual se encuentra mi padre desempacando y con el celular en el oído riendo sin saber por qué, me detengo frente a él esperando a que se despida para que yo hable con él, tarda 10 segundos en hacerlo y al fin me da el aparato, lo coloco en mi oído y salgo al aire libre alejada lo suficientemente de mi padre para así hablar seriamente, es un asunto delicado.

-¿Bueno?- habla nervioso.

-Pensé que no querrías volver a hablarme- respondo triste pero del otro lado de la línea escucho su risa corta.

-¿Por qué creíste eso? Jamás dejaré de hablarte, por más que te vayas lo más lejos posible no te librarás de mí- río.

-Será porque me dejaste sola el día en que te necesitaba- susurré.

-Ayer, lo lamento, en verdad no supe reaccionar de forma adecuada, quisiera disculparme contigo en persona, ahora es muy tarde, me hubiera gustado que te despidieras de mí- me quiebra escucharlo así, su voz se entrecortado y habla con dificultad.

-Discúlpame tú a mi, tuve miedo a que no contestaras.

-No, no, eso no fue tan grave en cambio yo te di la espalda, es que estaba muy molesto fue un golpe duro para mí- sorbe su nariz -Lo siento.

-Ya no importa.

-Por supuesto que importa, no quiero que pienses que fui malo contigo, al contrario yo siempre estaré contigo- una sonrisa se extiende en mis labios, ese es el Anthony al que conocí.

-Me gusta escucharte decir eso. Te aprecio tanto y no quiero perderte- muerdo mi labio.

-Jamás me perderás, Nat, yo te quiero demasiado, me dolería mucho perderte- murmura.

Amor por un ErrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora