—¿Qué quieres decir con "nada adecuada para mi"?
—Nada —miento. Es obvio que lo dije sarcásticamente. Se cree el ombligo del mundo—. ¿Por qué?
Mira mi cara por unos segundos. Yo le regalo el rostro más inocente que alguna vez pude hacer.
—Está bien, te creo —se acerca y toma mi mentón—. Estos últimos días fueron sensacionales.
—Estoy totalmente de acuerdo contigo —Aunque la cagaste cuando no pudiste decir lo que yo era para ti, obviamente omito esa última parte. Si él no se dio cuenta el porqué del cambio en mi conducta, fue porque no quiso hacerlo. En este momento queda como anillo al dedo el dicho "no hay peor ciego, que el que no quiere ver"
—Veré si puedo volver el próximo fin de semana y por fin terminaremos lo que comenzamos esta mañana —su voz se vuelve dulce y seductora. Me derrito por completo. Su cercanía hace a mis hormonas danzar. Las odio. Lo odio a él por tener tanto poder sobre mí. Sé que debo alejarme, que no es bueno para mí.
Todo pensamiento racional huye de mi cabeza cuando sus labios alcanzan los míos. Te amo y te odio por las cosas que me haces sentir con un solo toque de tu cuerpo, Lev Hedeon.
Desesperada agarro sus pectorales dejando caer la sabana, en un charco a mis pies, profundizando el beso. Su lengua ataca a la mía buscando dominarla, intento hacerle frente, pero sé que es en vano, él siempre gana. E internamente me alegro por ello. Su fuerza y su poder me hacen desearlo más, mucho más. Su poder atrae a mi pobre e indefensa alma a sus pies.
Con su mano aprieta mis nalgas y me levanta en voladas, al instante rodeo con mis piernas su cintura. Lo último que quedaba de mi cordura la pierdo al sentir como mi espalda choca con la pared más cercana.
Conoce mi debilidad. Anoche le conté uno de mis secretos. Ser follada contra una pared es una de mis fantasías. Me aparto en busca de aire. Llevo mi mano a su cabello y tiro fuerte de este.
—¿Vas a cumplir mi fantasía? —jadeo pensando en cómo será si su respuesta es afirmativa.
—Lo hare —besa mi clavícula y mi corazón se detiene— algún día lo hare. Pero ese día no es hoy.
—¿Qué? —pregunto desconcertada. Estaba segura de que si lo haría.
No me contesta y vuelve a tomar posesividad sobre mi boca. Mientras que a la vez presiona su erección sobre mi centro. Cierro mis ojos y gimo en su boca. Esto es el cielo, de eso no hay duda alguna.
—Es tan difícil —susurra sobre mis labios segundos después. Yo respiro pesadamente— solo me detiene una pequeña prenda para follarte. Con un pequeño movimiento de mi mano puedo sacarla y serás mía completamente, Marie.
—¡Hazlo! —lo aliento. Decidida tomo su mano y la coloco sobre mi braga— ¡Rómpela! —me mira suplicante.
—¡No puedo! ¡Quiero que nuestra primera vez sea especial! —responde con impotencia.
—Pero...
—Sin peros. Solo disfruta, Marie. Hazlo por los dos —la presión de sus embestidas aumenta sobre mi centro.
Mi vientre se contrae. Mi clítoris palpita anhelante. Siento como la humedad mancha mis bragas. Y todo se intensifica cuando me muerde en el cuello. Succiona, pasa su lengua, sopla y vuelve a morder pero esta vez es en mi pezón derecho. Lo hace tres veces más intercalando mis pechos y soy llevada al cielo. Un arrollador orgasmo me alcanza. Me besa para acallar mi gemido. Tiemblo por unos segundos en sus brazos. Siento como siguen las réplicas del organismo por unos segundos.
![](https://img.wattpad.com/cover/61471360-288-k292055.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Lev Hedeon. (+16) S.D.A #1
RomanceAmar a Lev Hedeon no es nada bueno. Y mucho menos si tú tienes veinte años (estando él en sus maravillosos cincuenta años) solo te vería como a una niña, mucho más pequeña que alguna de sus hijas. Nunca tendrías la oportunidad de estar con él. Sin...