Antes de que ella pudiera responder, la puerta sonó estrepitosament haciéndonos saltar por la impresión. Estábamos tan inmersos el uno con el otro que se nos había olvidado que nos encontrábamos en un lugar público.
—Mierda, ¿por qué los baños siempre están cerrados?—se escucho una voz de afuera.
Ambos nos miramos y nos reímos.
—Quizás deberíamos salir antes de que se vuelvan locos allí afuera—propuso.
—Probablemente.
Selena se bajó del lavamanos y se arregló el vestido. Se veía hermosamente desaliñada y una parte de mí quiso mandar al demonio todo y hacerla mía ahí mismo. Pero antes de que lo hiciera, ella tomó mi mano y nos guió fuera del baño.
—¿A dónde iremos?—preguntó, parándose.
—A mi casa—respondí.
Asintió. Hizo el amago de seguir caminando pero en ese momento alguien la agarro bruscamente del brazo.
—¿Qué mierda...?
—¿Tú?
—¿Yo? Más bien tú. ¿Qué haces con mi chica?—pregunto Austin.
—¿Tu chica?—se burló Selena.
—Mi amor, debes escucharme.
—¿Y por qué debería escucharte?
—Porque te quiero a mi lado y quiero explicar las cosas
—Pues fíjate que no hay nada que explicar. Supéralo, Austin. Lo de nosotros ya pasó—dijo Selena mientras me agarraba por el brazo, movimiento que él no pasó desapercibido.
—¿Me estás cambiando por este imbécil?—hizo un amago de acercarse pero lo aparte rápidamente.
—No te vas a acercar a ella.
—¿Y quien eres para impedirlo?
—¿Y a ti que te importa?—dije.
—Selena... por favor, escúchame. Este tipo-
—Este tipo—lo interrumpió Selena—, es mucho mejor que tú. Piérdete.
Sin darle oportunidad de decir nada más, Selena apretó el agarre a mi brazo y me guió fuera del local. Al salir, un viento frío nos golpeó así que le coloque mi chaqueta por los hombros.
—Gracias.
—De nada—le sonreí.
—Entonces, ¿qué hacemos?
—Podríamos ir a mi casa, si es que quieres.
—Eso estaría bien.
Me encogí de hombros— ¿En qué viniste?
—En taxi.
—Entonces no hay que preocuparse por ningún otro auto que el mío.
Agarrando su mano, nos encamine a mi auto y, una vez dentro, prendí el motor. Durante el trayecto, la miré de reojo y supe que su animo había bajado considerablemente. Tenía las manos en sus piernas y se mordía el labio. La conocía y sabía que algo la molestaba, pero no se lo iba a preguntar.
¿Habrá sido por Austin?
Apagando el motor, salí del auto y lo rodeé para abrirle la puerta. Ella tomó mi mano y me sonrió.
—Linda casa—murmuro una vez dentro.
—No es gran cosa, pero algo es algo. ¿Quieres tomar algo?
—La verdad es que no. Estoy cansada.
—Bien—la levante en brazos y ella rodeó mi cadera con sus piernas—. Vamos a la cama, pequeña.
Ella se río—. Tú no cambias más.
Quedé confundido ante su comentario, pero no dispuesto a cortar el buen rollo entre nosotros le seguí la corriente y me reí. Ya habría tiempo para preguntas luego. Al depositarla en mi cama ella acarició mi nuca con sus dedos y gemí ante esa sensación. Me alejé unos centímetros para mirarla y mi corazón aleteó. A pesar del tiempo que ha pasado ella seguía provocando miles de sensaciones en mi cuerpo que ninguna había podido.
—¿Por qué me miras así?—susurró de pronto.
—No te miro de ninguna forma.
—Lo que tú digas—se rió—. ¿Me prestarías una camiseta?
—Claro—abrí mi cómoda y le pasé una.
Aproveché que ella se encerró en el baño para cambiarme y acomodarme en la cama. Al salir, un silbido salió de mis labios—. ¡Wow! Te ves taaaaan caliente con mi camiseta. Ven aquí.
Abrí mis brazos, ella se rió y se acomodó en ellos, acercándome lo más posible.
—Justin, ¿no estas arrepentido por lo del bar?—preguntó de pronto.
La miré confundido—. No, ¿por qué debería estarlo? Al fin y al cabo fue algo que ambos queríamos.
—No sé... sólo preguntaba.
—Debo admitir que sí estoy sorprendido de que pasara. Creí que me odiabas y que no querías nada conmigo.
—Mira, fuiste un idiota en el instituto y quizás hasta lo sigas haciendo ahora, pero eso no te quita lo caliente que estas.
—¿He escuchado bien? ¿Selena Gomez dijo que soy caliente?
—Oh, cállate.
—Bien, aburrida—me reí y le bese la frente—. Ah, también espero mi recompensa por esta noche.
—¿Es que tú solo piensas en sexo?
—No. Pero si nos ponemos a pensar me dejaste más cachondo que el infierno y esperaba llegar a casa para una sesión caliente, no a descansar.
—La tendrás cuando menos te lo esperes, eso te lo aseguro.
—Eso estaría bien.
—Ahora duérmete.
Se acomodó más entre mi brazos y cerró los ojos. Sonreí, no podía creer que estaba con ella. Pero de pronto un sentimiento de culpabilidad me atravesó, aquello era un error. Yo no debería estar con ella y aprovecharme de esa manera.
Negué con la cabeza y cerré los ojos, no podía permitirme pensar aquello y más de esa forma. Antes de caer dormido, escuche vagamente a Selena susurrarme algo que no pude entender y caí en los brazos de morfeo.
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Ok, esto será corto, lo prometo. Primero que nada ¡GRACIAS POR 1K de leidossss! Es impresionante y ustedes, las mejores. Segundo, tengo que pedirles perdón pronto actualizar tanto como debería. Pero mi teléfono está medio malo y me dificulta a la hora de escribir y cosas así. Además de que cuando ya tenía el capítulo armado y todo, listo para publicar, Wattpad me lo borra y tuve que volver hacerlo (muchas gracias xd)
Bueno, intentaré actualizar hoy día o posiblemente mañana nuevamente. Oh, y además pásense por mi otra historia "All for love." Nuevamente muchísimas gracias por leer y estén atentas a los siguientes capítulos, que se vienen buenos 😏
PD: el capítulo es una Mierda, perdónenme por ello:(
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«Remember» |2ª Temporada Wonderland|
Novela JuvenilDespués de ocho años, Justin se encuentra con Selena de la manera más inesperada, en el peor momento de su vida cuando descubre que Marie lo había estado engañando todo este tiempo. Las emociones enterradas por parte de ambos empezaran a surgir, al...