El principio del fin

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Es tan cómodo y cálido aquí, Omar es un poco más alto que yo, perfecto para cubrirme del frío.
Pero la verdad es que se está haciendo tarde.
No quiero ir a mi departamento, ahí estará el, aún no estoy lista.
-tenemos que irnos- estoy acurrucada entre sus brazos y planeo quedarme aquí.
-no quiero-
-está haciendo mucho frío, nos vamos a congelar-
-yo estoy cómoda-
-nena, tenemos que irnos-
-mmmmm-
Entonces me levanta entre sus brazos y me lleva a la camioneta de jesus. No había notado lo cansada que estaba. Toda esa adrenalina de la competencia me dejo molida. Además tuve una caída, fue algo leve, solo calculé mal una vuelta y perdí el equilibrio, pero me levante y seguí.
-no quiero ir a mi casa- le digo al odio.
-¿quieres ir a la mía ? -
No, el también sabe la dirección de Omar, no quiero que me encuentre.
-no, quiero ir a otra parte, lejos, solo tú y yo-
Pasan unos segundos y casi llegamos a la camioneta.
O soy muy ligera o el más fuerte de lo que parece, por qué me carga con un brazo y con el otro abre la puerta. Me sienta, pero sigo aferrada a su cuello.
-tengo una idea-
Me suelto un poco para verlo a los ojos.
Tiene unos bellos ojos cafés. Pero la verdad es que, no podrían superar a los hermosos ojos verdes de Darren. Maldito idiota con ojos de niña.
-pero tendrás que confiar en mí- y sonríe, si, la sonrisa de Omar es mucho mejor que unos bellos ojos que nunca sonríen.
-confió en ti- y nos besamos.
Al principio lento, sensual, después un poco más duro, con desesperación.
El se separa y yo trato de recuperar el aliento.
-voy por las llaves-
Y se va a buscar a José.
Mi amigo podrá regresar a la ciudad en la grúa que transporta a mi niña, no se por qué siempre carga con tantas camionetas. Hombre prevenido vale por dos, es lo que dice. Pues qué bueno, por que hoy nos viene bien un trasporte de más.
Demonios, deje mi celular en la casa. Si al idiota de Darren se le ocurre marcarle a mi padre y contarle que me escape, no tengo como comunicarle que estoy bien. Es capaz de reportarme como desaparecida.
Omar regresa.
-ok, todo está listo-
-¿Me prestas tu celular? Olvide el mío en casa-
-claro, toma-
Qué suerte que me sé el teléfono de mi madre de memoria.
Marco
-Buenas noches-
-hola mama, soy yo, liza-
-hija, ¿qué haces? ¿Por que me llamas de un teléfono que no tengo registrado?-
- es el teléfono de un amigo, olvide el mío en casa, solo te marco para avisarte que no estaré en casa esta noche y no se preocupen-
-hija eres adulta y tú sabes lo qué haces, pero ¿está Darren contigo ? -
-no mama, no está el guardaespaldas conmigo, le di el fin de semana libre-
-hija, sabes que Darren está para cuidarte, además, bueno, él te quiere-
Puedo imaginar a mi madre jugando con su cabello.
A ella le gusta Darren, siempre ha sentido que haríamos una gran pareja. ¿Como ser pareja de alguien que ni siquiera me ve a los ojos?
Pero es mi madre, se que aceptara lo que yo elija.
-mami, no te imagines cosas, no hay nada entre el guardaespaldas y yo-
Volteo a ver a Omar y veo cómo frunce el ceño mientras enciende la camioneta. Levantó mi mano y le acarició la nuca.
-yo estoy saliendo con alguien y es algo importante-
Relaja su rostro.
-¡valla! Eso es nuevo, cuéntame sobre el-
Río un poco.
-te cuento el lunes en la mañana madre, hoy ya estoy cansada-
-está bien hija, solo cuídate y avísame cuando llegues a tu casa-
-buenas noches madre-
Y cuelgo.
Volteo a ver a Omar y está sonriendo.
-¿"algo importante "?
-Es más fácil que decirle a mi madre "soy-la-chica-más-suertuda-del-mundo-por-que-este-lindo-chico-me-deja-besarlo-de-vez-en-cuando" ¿no crees? - y lo beso.
-mucho más fácil y corto-
Me acerco a él, hace frío y necesito su calor.
-¿así que el guardaespaldas ?-
Río por su intento de decirlo casual.
-A mi madre le gustan las novelas románticas ¿y que más romántico que el guardaespaldas y la chica rica?-
Me besa la cabeza
-Es mucho más romántico que la chica de mis sueños entrara a mi negocio por asares del destino y que por pura suerte se fijara justo en mi-
Mmm ¿cómo reaccionó a eso?
Ok, se casual.
-soy de la misma idea-
Y me acomodo más cerca de el.
Pasa un tiempo y empiezo a cabecear.
-¿a donde vamos?- me tallo los ojos.
El ríe, podría escucharlo reír el resto de mi vida.
-ya vamos a llegar ¿ y apenas preguntas?, con razón necesitas un guardaespaldas, eres demasiado confiada-
El rie, pero yo no puedo dejar de pensar en Darren, tal vez ya se fue a casa. Tal vez, tiene a alguien que lo espera en casa, todo lo que yo misma tejí en mi cabeza era absurdo y tonto.
-solo quiero estar contigo-
Para la camioneta y eso me confunde.
Volteo a mi alrededor y no veo nada, sólo bosque.
Pero Omar me abraza y me besa.
Si, necesito esto, todo lo qué pasó con Darren me tiene muy mal, necesito La Paz que solo Omar tiene.
Y doy todo de mí en ese beso.
-bueno-
Nos separamos cuando la ropa empezó a estorbar.
-estamos cerca, hay que llegar rápido-
Y volvimos al viaje, solo que esta vez un poco más rápido. Nos urgía llegar.

*************

Uno de mis tíos tiene una cabaña a media hora de donde fue la carrera, solo tuve que marcarle y explicarle que tenía a la futura madre de mis hijos con frío y sin querer ir a casa. Y me explico donde estaban las llaves ocultas.
Aveces la familia es una virtud .
Tal vez exagere un poco nuestra situación, pero tenía que escucharme necesitado.
Además, ¡que lindos niños haríamos juntos!, espero que tengan sus enormes ojos de caricatura. Mmm y si es niña mi cuerpo, ¿te imaginas a una hija mía con esas curvas? . También necesito un arma.

Por un momento pienso en el guardaespaldas, ¿ como se llama?, no recuerdo, siempre está viéndola, lo supe desde la primera vez que lo vi, el la quiere, pero liza lo trata con frialdad, de la misma forma como trata a todos los demás, menos a mi, no, conmigo es cálida y tierna. ¡En tu cara gorilon!
Aún así, esto no me gusta.
A mi futura suegra le gusta el gorilon, me lleva algo de ventaja, tendré que ganarme a la esposa del gobernador.
Llegamos.
Todo está muy obscuro, pero se puede ver la fachada de la cabaña.
Bajo y corro para ayudar a la reina a bajar.
Ella prende la lámpara de mi celular, para ver al rededor.
-hemos llegado-
-es lindo, pero entremos ya, hace frío-
-ilumíname por aquí -
Y voy a los arbustos de la derecha y encuentro la piedra tallada rápidamente, debajo están las llaves. Listo .
Entramos y prendemos las luces.
No es una cabaña lujosa, pero está limpia. Por un momento me preocupe, mi tío es soltero y muy desordenado.
Al parecer se preocupa por está propiedad, tiene todas las comodidades. Incluso tiene alarma, así que corro a digitár el número que me dio mi tío.
Hace frío aquí adentro, se qué hay chimenea, pero me pregunto si hay otro tipo de calefacción.
Volteo a ver a la reina.
Ella está en medio de la sala, empieza a quitarse la ropa, poco a poco.
Como esa vez en mi casa, busca que observe bien cada cm de su cuerpo. Verla desnudarse es lo más cercano a la poesía que he visto.
Es simplemente hermosa.
Ahora solo me importa que la cabaña tenga cama.

EstigmatofiliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora