Against love

The biggest mistake

Maggie se quería apartar pero el suave sabor de sus labios y la dulce textura que tenía no le permitían separarse de él. Cuando Travis se apartó, ella deseaba haber continuado ese intenso beso.

Ella le miró, le comenzó a sentir mucho más cercano que un amigo, no pudo evitar volver a besarle, era un sabor adictivo. Poco a poco fue subiendo el calor de sus cuerpos, la temperatura e intensidad de aquel beso hasta que instantes después, Maggie se vio tumbada en la cama con Travis encima intentando quitarle la camiseta. Ella se sintió nerviosa y apartó a Travis. Lo que le sorprendió a Maggie fue que no hizo falta palabras para que él entendiera que que no había estado con ningún chico respecto a ese tema, le sorprendió que se lo tomara tan bien:

-Ya entiendo... tranquila... no pasa nada... dos no hacen si uno no quiere, no voy a obligarte o sino sería violación-dijo un poco en broma- dime cuando estés preparada

Travis bajó y se marchó. Maggie se sintió extraña, le daba vergüenza lo que había pasado, sentía pena por Travis y se sentía como la rara...

Para despejarse salió a dar una vuelta mientras escuchaba música en sus cascos. De pronto, le llegó una mensaje de Charlie invitándole a una fiesta en su casa ¿Por qué no ir? ¿qué iba a ocurrir? aceptó.

Horas más tarde, la noche cayó y ella se presentó a la fiesta sin acompañante. Allí le esperaba Travis, quien había olvidado lo sucedido en su casa:

-Vaya... estás guapísima -dijo él.

-Gracias...

-Bueno... veo que ya os conocéis -dijo Charlie contento.

-Sí ¿y de qué os conocéis vosotros? -preguntó Travis.

En ese preciso instante, Jared se abrió paso entre la multitud y saludó a Charlie:

-Ya veo... -dijo Travis un poco furioso por la presencia de Jared.

-N-no te esperaba aquí -dijo Maggie nerviosa.

-Hola Maggie, que sorpresa verte -dijo Jared alegre de verla- Veo que vienes con tu amigo -dijo mirando a Travis con asco.

-No, le he invitado yo -dijo Charlie- es un amigo mío de la infancia y cuando supe que estaba aquí... debía invitarlo.

Las miradas entre Travis y Jared no eran muy amigables, la tensión se podía cortar en el aire y Maggie sabía que aquella noche iba a haber problemas.

La fiesta iba avanzando, Jared se distanció un poco de ella en lo que Travis aprovechó para camelarle. Decidió llevarle un poco lejos de aquel ambiente, la música no permitía hablar:

-¿Te lo estás pasando bien? -preguntó él.

-Sí, está muy bien la fiesta y estar contigo la hace mejor.

-Oye... sobre lo de esta mañana... lo siento -dijo Travis.

Al parecer no lo había olvidado:

-Estuvo mal lanzarme de esa manera...

-No, tranquilo... no te preocupes.

-Y siento mucho haberte besado... si tú no querías...

-¿Por qué?

-¿Qué? -preguntó extrañado.

-¿Por qué sientes haberme besado? A mi me gustó.

-¿Enserio? -dijo sorprendido.

-Pues claro, nunca nadie me había hecho sentir esas mariposas.

Travis, impulsado por las palabras de Maggie, volvió a besarle, pero para la mala suerte de los dos, había un espectador poco deseado, Jared.

Cuando Jared vio aquel besó, el corazón se le partió en dos, pensó que estaba consiguiendo volver a enamorarla y al presenciar esa escena... todo se vino a bajo.

Maggie se dio cuenta de que les miraba y que se había ido decepcionado, le dolía verle así, se sentía mal. Se apartó de Travis y salió al jardín a despejarse las ideas junto a una copa de alcohol.

Se sentó frente a la piscina y ahogaba sus pensamientos en la bebida

Ya tenía claro que le gustaban los dos chicos pero también tenía claro que el estar con uno le dolería al otro y que debía escoger uno lo antes posible. Era complicada la decisión, quería a los dos. Por un lado, Travis le hacía sentir las mariposas que nunca Jared le causó pero por otro lado Jared le hacía sentirse única, como si el tiempo se parara. Eran sensaciones complicadas de expresar y que amaba sentir pero debía elegir cual sentir cada día de su vida.

Maggie bebía copa tras copa, como si bebiera agua pero los efectos llegaron y terminó borracha. Apareció una desconocida que estaba invitada en la fiesta y se sentó en aquel jardín vacío. Maggie, sin pensar en lo que hacía, comenzó a contarle el problema que tenía y la chica, sorprendida y extrañada le escuchaba:

-Chica... pues regresa con ese tal Jared, si fue tu primera elección, tu primer gran amor... vuelve con él -le aconsejó la chica.

-Tienes toda la razón... allá voy Jared -dijo Maggie levantándose.

Entró en la fiesta aún pudiendo andar recto, buscaba entre la gente a ese gran primer amor. Lo encontró apoyado en las escaleras:

-Jared...

-Maggie... -dijo Jared decepcionado recordando el beso con Travis.

-Jared... yo te quiero.. .tienes toda la razón, yo aún no lo sabía pero ahora ya sé que eres la persona con la que debo pasar toda mi vida.

-¿De verdad lo piensas? -dijo sorprendido.

-Por supuesto... me fue duro dejarte y fue un enorme error, pero hemos pasado por mucho alti-bajos y ya es hora de llevar esto a lo más alto

Jared, eufórico, la besó con deseo. Aquel besó había merecido la pena lucharlo.

A Maggie se le fue las cosas de las manos y se vio despertando desnuda en una cama junto a Jared.

No recordaba nada de lo sucedido pero por lo que podía deducir había estado la noche anterior con Jared.

Se levantó rápidamente y se vistió, asustada salió de la casa y corrió a la suya mientras miraba todos los mensajes que le había dejado Travis:

      -Maggie, dnd estás?

-No te encuentro

-Te has ido?

-Estás bien?

-Maggie...

-Ya me voy de la fiesta

-Contéstame.

Maggie se echó las manos a la cabeza ¿qué demonios había hecho? Lo había mandado todo al infierno acostándose con su ex.