The day will come when you won't be

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Maggie entró en su casa, los platos vacíos sobre la mesa, las velas encendidas se iban consumiendo poco a poco. Subió a la habitación de Ellis, allí dormía plácidamente. Sonrió ligeramente y volvió a bajar. Recogió los platos y los echó al fregadero. Sopló sobre las velas para apagar sus llamas y se tumbó en el sofá, así quedándose dormida.

Ellis se despertó unas horas más tarde y tapó con una fina manta a Maggie.

Ella se levantó a la hora de comer, para su sorpresa, Ellis había preparado la comida:

-¿Ellis? -lo llamó asombrada.

Él se asomó desde la puerta de la cocina:

-¿Dónde estuviste anoche?

-Con Jared -contestó ella sentándose en una silla para comenzar a comer.

Ellis salió corriendo y se acercó a Maggie, poniendo sus manos sobre sus hombros:

-¿Y qué pasó? -preguntó curioso.

-Me llevó a ver las estrellas a la colina de la ciudad.

-Y... -dijo Ellis esperando algo más.

-Y me llevó a casa.

-¡¿Lo hicisteis en casa?! -exclamó asqueado.

-¡¿Qué?! ¡no! ¡no he hecho nada con él! ¡¿tú qué te has creído! -gritó ella levantándose de la silla.

-Hombre... tienes 18 años.

-¿Y? ¡¿a ti qué te importa mi vida íntima?! ¡yo decidiré el momento! -dijo encerrándose  en su habitación.

Estaba sorprendida de aquellas conversación, le enfurecía que la gente se metiera en su vida.

Comenzaron a llegarle mensajes de Jared, tumbada en la cama los miró:

                        _ Buenos días mi estrella ¿has podido dormir? _

                        _ Algo _

                        _ ¿Te lo pasaste bien? _

                        _ Me encantaron las vistas _

                        _ Estate preparada a las 10, iré a recogerte _

                       _ ¿Dónde vas a llevarme hoy? _

                       _ Si te lo digo perdería toda la magia _

Ella sonrió y dejó el móvil sobre la mesa de noche. Se quedó mirando el techo y se le pasaron muchos pensamientos sobre todo tipo de temas, sobre dónde la iba a llevar, que habrían hecho Kaylee y Ellis, que tal se lo estaría pasando Rachell y sus tíos en Washington... de repente, se le pasó la idea de volver a sus clases de piano. Le apetecía componer alguna canción para Jared pero toda la práctica se le había perdido.

Bajó al salón y vio a Ellis recoger los platos entristecido:

-¡Para! no los recojas, estaba muy bueno y tengo hambre -dijo Maggie desde las escaleras.

Él se sentó alegre y comenzaron a comer:

-Oye... siento haberte preguntado por tu vida íntima.

-No pasa nada... por cierto ¿qué tal ayer con Kaylee?

-Pues bien, fue muy amable, al final no vimos ninguna película, estuvimos hablando y es muy agradable.

Maggie tosió mintiendo, a ella no le parecía igual:

Against loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora