Mi Uke Rebelde

Trato...

-Soy...humano...- confirmo Bill tocando su herida.

Me reí, fue una carcajada algo forzada que se apagó rápido.

-Venga ya Bill, desaparece de una vez, esta broma no hace gracia- Bill tenía las manos en la cabeza y temblaba un poco.

Cuando levantó la mirada y le ví os ojos cristalinos entendí que no se trataba de una broma. Estaba realmente cabreado. Me fui de allí hecho un autentico basilisco.

-Espera ¿no iras a dejarme aquí?- me reí

-Oh, claro que sí- conteste andando con velocidad a través del bosque.

-¿tengo que recordarte que tu eres el culpable de que yo sea humano?- cerré los puños me acerque a él fingiendo estar risueño, lo agarre de la chaqueta y fingí que iba a besarle para así darle un puñetazo.

-Esto por intentar violarme- retome el camino.

-Vale, vale Dippi, lo siento, pero tienes que entender que teniendo ese culito cualquiera pierde la cabeza- lo ignoré cuando la poco escuche un quejido de dolor del chico.

-Esta vez no caeré Bill...- él estaba en el suelo agarrando su pierna ensangrentada. Corrí hacia él me agache

-¿Que te ha pasado?- dije apartándole los brazos de la pierna mostrando una profunda herida llena de tierra.

-Me he tropezado- suspire, no podía dejarlo ahí solo.

-Ahg venga vamos- le pase se brazo por la cintura y el a mí el brazo por detrás del cuello.

Llegamos a la cabaña del misterio, abrí la puerta y lo ayudé a entrar pero Mabel salió de la nada colocándole una papelera en la cabeza

-Muere demonio- y mi tío Stan apareció con un rodillo de cocina, por suerte los detuve a tiempo.

-¡¿Que narices hacéis?!- dije apartándolos de Bill que tras quitarse la papelera de la cabeza los miraba asustados.

-¡Es Bill!- gritaron al unísono

-Lo sé, pero por accidente lo volví humano y ahora está herido- Mabel me agarró de la muñeca y tiró de mi hasta la cocina.

-¿Como has podido traer a Bill aquí?-

-No podía dejarlo solo en el bosque- expliqué quitándome la gorra y rascandome la cabeza de los nervios.

-Dipper, estas loco, pero yo tampoco lo habría dejado solo- habló por fin Mabel.

-¡DIPPER ESTA HERIDA ESTÁ SANGRANDO MUCHO!- grito mi tio Stan que estaba sólo con Bill. ¡Mierda me había olvidado completamente de la herida de Bill! Corrí al salón con el botiquín, me fijé que Bill tenía una expresión extraña en la cara.

-¿Ocurre algo?- pregunté mirando primero a mi tío y luego a Bill. El rubio miró primero a mi tío, luego bajo la mirada y negó. ¿Porque tenia esa sensación de que me había perdido algo?

-No ocurre nada, ¿te encargas tu?- preguntó mi tío. Yo asentí

-Bien, Mabel y yo nos vamos a dormir, buenas noches- Stan y Mabel se acostaron en sus respectivas camas mientras yo me quedaba en el salón limpiando la herida del demonio ahora humano.

-Auch, Dippi, te cuidado- protestó una vez más el chico rubio.

-Deja de protestar, tengo que limpiar la herida- él se mordía el labio inferior aguantando el dolor. Entonces note que había un trozo de cristal clavado en la herida, probablemente fue así como se hizo la herida.

-Oh no- dije mirando como brillaba.

-¿Que pasa?- pregunto preocupado él.

-Tienes un cristal clavado, voy a tener que sacarlo- le di un trozo de esparadrapo para que mordiera y saque unas pinzas del botiquín.

-Esto va doler un poco-

No puedo describir los gritos que dio Bill, solo puedo deciros que conseguí sacar el cristal y le vende la pierna.

-Eres una gran enfermera- comento con gallardía

-pero serias mejor si llevaras un traje sexi- recogí las cosas del botiquín. Y fui a salir del salón cuando me detuvo

-Espera Dip, esto... Yo... Gracias- ¿me lo estaba agradeciendo? Increíble.

-No hay de que Bill, y buenas noches- le contesté con una sonrisa casi imperceptible

-Buenas noches Dippi- respondió recostándose en el sofá.

Había sido un día agotador, me tiré en la cama pero me levante rápidamente, y escondí los diarios, a lo mejor Bill ahora era humano pero mejor prevenir que curar.

Al día siguiente desperté con un increíble cansancio. Me arrastre hasta la cocina donde Mabel desayunaba.

-Buenos días- los salude.

-¿Y Bill?- pregunté sentándome en una silla.

-El tío Stan está cambiándole las vendas- contestó Mabel tratando que Bamboleos se comiera una cucharada de cereales.

-Oye Mabel, has notado algo entre el tío Stan y Bill-

-Nop ¿porque?- me quedé pensativo antes e contestarle que no era nada importante. Me levante de la mesa sin haber desayunado.

Avance por el corredor que daba al estudio de Stan. Y oí voces.

-Más te vale no ponerle una mano encima Bill, porque si no...- me asome a la puerta y ví como Stan le agarraba por la herida con fuerza lastimando al chico rubio que soltó un quejido de dolor

-Te mataré, ahora eres humano Bill, así que andate con cuidado- concluyó mi tío a la vez que irrumpía en el lugar.

-¿Ocurre algo?- pregunté perfectamente consciente de la amenaza de mi tío hacia el rubio.

-No ocurre nada- contestó severo mi tío saliendo del lugar.

-¿Que tal la pierna?- le pregunte sentándome a su lado.

-Bien...- respondió con tristeza. Se hizo un silencio de incomodidad y falta de confianza realmente notable. ¿Acaso Bill no se fiaba de mi?

- ¿Que acaba de pasar entre mi tío y tu?- pregunté

-¿De que hablas?- vaya, si que disimulaba bien, pero no lo suficiente para confundirme.

-Habló de lo que acaba de pasar, ¿porque te a amenazado mi tío?- ví como volvía la mirada, ¿estaba asustado? ¿Confundido tal vez?

-Es... Una larga historia-

-Tengo todo el tiempo del mundo- Bill me miró a los ojos, de ellos caían pequeñas lágrimas.

-Necesito volver a ser un demonio Dipper, yo no pertenezco a este mundo- me entristecía verlo así, aunque estaba enfadado por sus intentos de hacer de las suyas, pero esta vez era mi culpa y no quería verlo así.

-¿me prometes que no me harás daño si te ayudo?- el se secó las lágrimas y extendí mi mano.

-¿eres consciente de que estas haciendo un trato con un demonio?- preguntó él.

-lo sé, pero me cuesta hacerme a la idea que tendré que cargar contigo...

-------------------------------------------------------------Y... Esto fue todo, se que no ocurre nada interesante, pero esto es lo que hay, en el siguiente capitulo ya habrá más emoción, si tienen algo que decir dejenlo en los comentarios. Con esto me despido, chao, chao.