Capítulo 23.

2.8K 159 156
                                    

A D V E R T E N C I A: el siguiente contenido puede tener horrores de ortografía, favor de señalarlos. Además que puede causar unos cuantos derrames nasales, se recomienda discreción.

Dime cómo no perderme en tu mirada, cómo pretender que siento nada, cómo hacerle caso a la razón. Sólo dime, ¡cómo anestesio al corazón!

Narrador.

Descansaba profundamente sobre esa cama suave encontrada en ese cuarto, que hacía un rato le habían asignado los Mukami. Se sentía muy muy cansada, como si hubiera corrido un maratón hace poco, pero la verdad era que estaba sentimentalmente agotada. Sólo quería dormir siglos hasta olvidarse de lo ocurrido. Pero claro, siempre tiene que haber un abusivo que no te deja dormir.

—Luna... —le susurró moviéndola quedito.

Dio un gruñido. —Cállate... —murmuró aún dormida.

—Luna, sorella es importante, despierta —le dijo un poco más pegado a su oído.

—Déjame.... dormir... —habló con pesadez abrazándose más a su almohada.

—Vamos, Luna. Si no te despiertas, te voy a violar —le dijo. Al momento de decir eso, fue como si en el cerebro de Luna, algo hiciera clic, lo que le hizo abrir los ojos de golpe.

Se sentó en la cama y prendió la luz con el interruptor a lado de su cama.

—Dylan —murmuró sorprendida al verlo —... pero ¿qué te pasó? —lo observó más a detalle.

Tenía sangre brotando se su boca y nariz, tenía el típico ojo morado, así como unos más hematomas, ¿cómo pudo haberle pasado algo así a su hermano? Mataría al desgraciado que le hizo eso. Dylan se sentó en un sillón frente a su cama, Luna observó su ropa, estaba toda desgarrada y llena de sangre, ¿era su sangre? Quién sabe.

—Tuve una pelea —dijo simple

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Tuve una pelea —dijo simple.

—Pero, ¿por qué? —estaba muerta de preocupación.

Él por su parte dejó un poco de lado la pregunta de Luna, sacó un cigarrillo junto a un encendedor para seguidamente prender el primero con el segundo. Lo acercó a su boca y dio una calada, sus nudillos estaban completamente destrozados y llenos de sangre. ¿Qué le pasaba a Dylan? Él casi nunca fumaba porque sabía lo mucho que a Luna le molestaba, además estaba más serio de lo normal, no le había dado ni una mirada a los ojos o una sonrisa a Luna.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Beast" ||Diabolik Lovers||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora