Capítulo 35: prisionera.

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  « Me di cuenta de que te pertenezco, siento la oscuridad cuando estoy lejos de ti

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  « Me di cuenta de que te pertenezco, siento la oscuridad cuando estoy lejos de ti. No  dejes de amarme, no te detengas por nada, aprenderé a amarte de la manera que necesitas, porque sé lo que es el dolor y esto no es lo mismo...» 

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Comienza a despertar.

Muy lentamente va abriendo sus párpados, al principio las imagines que le muestra su entorno se distorsionan, no haciéndolo ver claramente. Mira a un punto fijo en el techo, para luego reaccionar y darse cuenta de que era un lugar desconocido para ella.

Se para de golpe, sentándose y dándose cuenta de lo incomoda que realmente es aquella cama donde postrada yacía. Miró a su alrededor confundida al ver ese pequeño cuarto sin color y siendo únicamente iluminado por un foco.

—¿Qué es todo esto? —se dijo a sí misma, tocó ligeramente su cabeza que palpitaba. Fue cuando hizo movimientos con sus pies que un sonido metálico la sobresaltó ligeramente, se dio cuenta de que llevaba un grillete ajustado en su tobillo, del cual una larga cadena descendía y terminaba en una pata de la cama.

Tomó la cadena en sus manos, tratando de recordar qué había pasado, mas luego las soltó con brusquedad al ver que nada llegaba a su mente. Fue hasta que miró al piso y vio gotas de sangre seca que volvió a la realidad.

Ruki la había mordido.

Ruki había probado su sangre.

Ruki la había encarcelado allí.

Ruki se volvió una bestia.

Pero, ¿a caso Ruki la había descubierto? ¿Él ya sabía que ella era Luna? Mierda, estaba tan malditamente confundida y nerviosa por todo lo que pasaba. Lo peor es que ni siquiera podía salir de ese terrorífico cuarto.

Miró de nueva cuenta la cadena y la tomó en sus manos. Enarcó una ceja y una sonrisa burlesca le apareció en el rostro.

—Ya puedo controlar mis poderes, ¿cierto? —se sonrió con orgullo.

En cuestión de segundos, Luna estaba congelando una parte de la cadena y ya finalmente con un simple movimiento la rompió en dos partes.

—A huevo —se dijo.

Aunque la verdad no sabía ni qué vergas haría. Es decir, no quería escapar de los Mukami, sabía que Ruki estaba pasando por una situación nerviosa, él estaba bastante alterado por todo lo que pasaba y lo alteraría más si sabía que se escapaba. ¿Entonces qué haría?

"Beast" ||Diabolik Lovers||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora