Capítulo 30: verdades

2K 165 70
                                    

A D V E R T E N C I A:

El siguiente contenido puede tener horrores de ortografía, favor de señalarlos. Además que puede causar unos cuantos derrames nasales, se recomienda discreción.


«En la vida todos tenemos un secreto inconfesable, un arrepentimiento irreversible, un sueño inalcanzable y un amor inolvidable...»


POV_____LUNA_____

Me encontraba sentada en una cama. Al llegar aquí, Shin simplemente me tumbó en la cama y salió por la puerta, intenté varias veces abrirla, pero era más que obvio que la cerró con seguro. No puedo creer lo que está pasando, en un momento me encuentro feliz porque los Mukaki y Sakamaki harían las pases y vivirían juntos por mí y en otro ya estoy siendo tratada como una cosa y siendo cargada como un vil costal de papas.

Suspiré. Había roto de nuevo mi promesa, los volví a dejar solos. Pero... no vi ni una mirada de angustia o preocupación en su rostro cuando me fui, sólo enojo. Me pregunto si ellos de verdad me vieron como una persona que estaban perdiendo o sólo sentían coraje porque alguien les estaba robando a su presa. Me encantaría que fuera la primera, pero por lo que vi, me voy más por la segunda. ¿De verdad me van a extrañar? ¿De verdad me necesitan?

Me di una pequeña cachetada. Joder, cómo podía estar pensado tonterías: ¡era obvio que ellos me querían! Sino cómo explico cómo me han cuidado todo este tiempo, desde el momento en que los Mukami me dieron un lugar dónde vivir cuando los Sakamaki me echaron, hasta esta vez que estuve en coma y los Sakamaki me cuidaron. No creo que lo hayan hecho sólo por diversión o porque soy su presa, no, no haces todo eso por una simple persona. Sé que ellos sienten algo por mí, pero no estoy tan segura de sea algo como lo que una vez sintieron por Luna.

—Me siento tan sola aquí —dije mirando el cuarto.

No voy a mentir. Me siento sola. Es decir los chicos ya no están, los lobos ya no están y... Dylan ya no está. Aún no puedo creer que papá me esté dejando sola, es decir, él nunca me había dejado sin ninguno de sus hombres a su cuidado o sin un guardián como en el caso de Dylan o los Beltrán. Ni si quiera siento la presencia de alguno de los hombres de papá. ¿Acaso papá estaba enojado? ¿Acaso por fin me estaba dando libertad? O ¿acaso me estaba castigando? No lo sé, papá es tan raro. No es que necesite de alguno de sus gorilas para sentirme segura, es sólo que como ya lo dije, me siento sola y se me hace raro toda esta situación.

—Así que eres sumisa —Shin apareció en la habitación, no sé ni cómo, Chama.

—¿Perdona?

—Antes de salir te dije que no te movieras de allí, pero no creí que te lo tomarías tan a pecho. De verdad no te has movido del lugar donde te aventé —dijo —. Te han entrenado bien.

—Entrenado cagas. No soy un animal

—Retiro lo dicho. Si te hubieran entrenado bien, no tendrías ese vocabulario —Shin hizo una mueca.

—Ash —rodé los ojos en señal de frustración.

Shin se quedó mirándome durante varios minutos, no sé qué es lo que quiera.

—¿Qué es? —soltó de la nada, lo miré confundida.

—¿Qué es qué? —dije.

—Ellos olvidaron a Luna por ti —dijo —. ¿Qué es lo que tienes de especial para causar tal efecto en esos diez vampiros?

"Beast" ||Diabolik Lovers||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora