Capítulo 6

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Continué tomando notas de lo que la maestra estaba explicando, la verdad es que química se me daba bastante bien. Estábamos apunto de hacer una práctica por lo que estábamos en el laboratorio, Avril era mi compañera por lo que se encontraba sentada junto a mí en este pequeño escritorio.

Seguí escribiendo cuándo el teléfono de la maestra comenzó a sonar porque lo que por algunos segundos salió del aula para poder tomar la llamada, cuándo la maestra salió, permanecí en silencio algo que Avril notó, me observó unos segundos y continúo escribiendo.

—Si no te conociera no te cuestionaría nada, pero la verdad es que te conozco muy bien para darme cuenta que has estado rara de hace días —Me dijo, ni siquiera levantó la vista, sólo siguió con lo suyo.

Fruncí el ceño.

—No sé de que hablas, estoy igual que siempre — Respondí pero eso no pareció no convencerla. Ésta vez dejó de escribir y levantó su vista hacia mí.

—¿De verdad que lo estás? —Preguntó, rápidamente asentí algo que la hizo hacer una mueca —Te lo creería, si no te hubiera visto muy cerca de Dylan estos últimos días. Me han dicho lo qué pasó en mi fiesta, parece que no son buenos ocultándose.

Me tensé de inmediato, Josh había cumplido su palabra con no abrir la boca y es algo que agradecía mucho. Lo que menos quería es que todos se enteraran que he tenido algunos roces con Dylan, no planeaba que me relacionen con él y mucho menos cuando era sólo algo pasajero, tenía planeado ponerle fin a esto.

—¿Qué? —Joder, tragué fuerte. De pronto recordé lo que había pasado que hasta el día de hoy no sabía cómo me había permitido llegar a eso —Pues te contaron mal, nada sucedió.

Ella sonrío ligeramente.

—¿Crees que puedes engañarme? No soy tonta —Dijo tratando de aguantar la risa, me sentía tan tonta tratando de ocultarlo y negarlo —No puedo creerlo, ni siquiera puedo imaginarlos juntos. ¿De verdad? ¿Con Dylan?

Me cuestionó sin poder creerlo. Apreté mis labios.

—He dicho que no ha pasado nada.

—Eso explica por que Chase y tú parecen detestarlo más que nunca —Afirmó. Maldición, no quería que esto pasará más allá, quería mantener distancia con Dylan, tenerlo tan lejos para evitar que siguiera tambaleando mi mundo.

—Basta, si tuvimos un momento en tu fiesta pero no fue nada cómo te lo contaron, nada de eso pasó. Nos dijimos algunas cosas y discutimos —Expliqué, por supuesto que mentía, ciertamente no podía decirle el exquisito momento que tuve con él, cómo nos besamos al día siguiente, no podía confesar que cuán afectada me encontraba por el deseo que Dylan mostraba hacia mí y quizás también yo hacia él —¿De verdad me crees capaz de tener algo con Dylan? Sólo mira de quién estamos hablando. Jamás me liaría con alguien como él.

—Quizás eso me convence un poco porque sé cuanto lo odias, sé que no estarías con él. Mucho menos cuando sabes que Dylan Miller podría arruinar tu vida ¿Lo sabes, cierto?

Alzó una ceja hacia mí.

—Así es, no tengo absolutamente nada con Dylan y jamás lo tendré, tener algo con él suena como un mal chiste —Dije haciéndola reír.

—Está bien, te creo —Asintió —Además, sé que si tuvieras algo con él, me lo contarías.

La miré unos segundos y asentí lentamente. La maestra regresó al aula y cómo si la vida realmente me odiara, haciéndome saber que tiene lo peor para mí, me envió una señal.

Tan Guapo Como El InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora