DROPPED 3 - AGAIN

Capítulo 44

Jared

Está embarazada. ¿Es una broma? No, no bromearía con eso.

No sé qué decirle, ni que hacer. Mis amigos me miran sorprendidos, felices por la noticia que Madison acaba de emitir, y yo estoy aquí como un gilipollas con la boca abierta.

Madison me mira preocupada por mi reacción, y yo quiero transmitirle lo feliz que estoy de que por fin hayamos conseguido lo que tanto tiempo llevábamos intentando. Vamos a ser padres.

Me levanto entonces de mi silla y me acerco a ella. Cuando ve que me acerco se levanta también, y entonces la envuelvo entre mis brazos.

-No sabes lo feliz que me haces. -le digo.-

Acerco mis labios a los suyos y la beso como si fuese nuestro último beso. Sus brazos se enredan en mi cuello y corresponde mi beso. Ojalá las cosas empiecen a salir bien a partir de ahora.

Las semanas van pasando y, poco a poco, nuestro bebé se va haciendo de notar.

Me siento nostálgico. Me da rabia que James no esté aquí para poder vivir esto, incluso pienso en Hugo, ojalá él también estuviese aquí para recibir a su hermanito o hermanita.

Durante esos días vamos a la casa del padre de Madison, y le damos la noticia a Kate y su padre, quienes se muestran sorprendidos y contentos. Le envío un mensaje de texto a mi madre, ya que he decidido dejar el pasado atrás y empezar a mirar la vida con otra cara.

April, la amiga de Madison, también recibe la noticia, y promete venir a vernos cuando el parto se aproxime.

Esa tarde me encuentro yendo al supermercado a comprar algunos recursos necesarios, ya que Madison come como una jodida vaca.

Paso al pasillo de las carnes, y diviso a Walter al final de este. No me acerco a él, no tengo por qué hacerlo, simplemente hecho lo necesario a la cesta.

-Hey, Jared. -escucho entonces su voz a mi lado.-

Le miro un tanto sorprendido.

-Hey. -digo.-

-¿Cómo va todo? -me pregunta entonces.-

-Bien, Madison está embarazada. -le digo.-

Supongo que Walter era la única persona que quedaba por saberlo, y estoy deseando que la noticia llegue a oídos de Elsa y se pudra en el infierno.

Parpadea varias veces, sorprendido por la noticia que le acabo de soltar como si estuviésemos hablando del tiempo.

-Guau, eso es increíble, ¿no?

-Sí, lo es.

-Me alegro mucho por ti, Jared. -me dice con una mirada honesta, poniendo una de sus manos sobre uno de mis hombros.- Me alegro por los dos.

-Gracias. -hago una mueca.-

Me da varios golpes con la palma de su mano sobre el hombro y entonces la aparta.

-Bueno, tengo que irme. Ya nos veremos. -dice y se da media vuelta para marcharse.-

-Adiós. -le digo.-

Me sorprende la actitud de Walter. Si yo fuera él, ni siquiera me hubiese acerco a saludarme.

Termino de hacer la compra y paso por la caja para pagar. Subo al ascensor y bajo a los garajes para meter la compra en el maletero de mi coche, que está aparcado justo en la primera columna, en la letra A.

Tres meses después sabemos el sexo del bebé, un niño. La situación hace que nos acordemos todavía más de Hugo.

-Steven. -digo.-