Solo te muestro las consecuencias de tus actos

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Laureana estaba durmiendo muy tranquila en su recamara junto a su marido quien llego agotado después de pasar casi todo el día buscando a la viuda negra y al resto de los desaparecidos cuando se despertó adormilada al escuchar una especia de susurro en su oído diciéndole "Despierte mi señora necesito que venga afuera es urgente", ella medio confundida se agarro la cabeza y sin hacer caso de su sentido común salio de la cama, se puso sus zapatos bajos y se cubrió con una manta, salio de la recamara sin despertar a Manuel quien solo se dio la vuelta cuando Laureana abrió la puerta.

Al salir ya por fin de su casa una fría brisa golpeo su rostro haciendo que su cabello le molestara los ojos, algo encogida por el frió de la noche se quito los mechones de la cara y vio con claridad que una mujer vestida de negro le esperaba en las escaleras con una bolsa en la mano, la mujer se dio la vuelta y vio a Laureana bajar en dirección hacia ella así que rápidamente se acerco sin inmutarse por el viento que hacia que sus mechones negros taparan sus ojos, Laureana supo desde lejos quien era esa mujer sus dudas eran: que hacia aquí tan tarde? O mejor aun porque la visitaba a ella si poco se conocen?:

-Florencia. Que hace usted aquí a estas horas? Y frente a mi casa?. -Le interrogo algo asustada, jamas a creído en esas cosas de que las brujas existieran pero esa señora no le traía buena espina, con lo que vio hace 14 años ya no esta tan segura de si creer o no creer-.

-Siento molestarla a estas horas mi señora. -Hizo reverencia a la que Laureana incapaz de responder decidio solo asentir por cortesía-. Pero he venido a entregarle esto que estoy segura de que os servirán a sus hijos. -De la bolsa saco una caja, era color café de seguro estaba hecha por madera de árbol-. 

-Señora nose si pueda aceptarlo, no acostumbro a recibir cosas de personas como usted sin ofender claro, yo creo que no soy merecedora de tal regalo. -Dio la única excusa que se le ocurrió, le daba miedo lo que podría contener esa caja-.

-Por favor sus hijos van a necesitar lo que hay dentro para mañana, hágame caso mis predicciones jamas se equivocan y puede que se arrepienta si no acepta mi regalo. -Le advirtió viendo para todos lados por si alguien les veía-.

Laureana se lo pensó mientras veía como Florencia alzaba la caja para que ella la cogiera sin inmutarse, ni pestañear siquiera, parecía muy segura de lo que decía, las brujas no mentirían si no les convenía pensó Laureana y deseando no arrepentirse ademas de que quería entrar pronto ya que estaba congelándose allí levanto los brazos y tomo la caja, Florencia sintiéndose aliviada movió sus manos hacia su vestido para irse lo mas deprisa posible, aunque antes de dar la vuelta le dijo a Laureana:

-Escúcheme quiero que mañana le entregue esas esferas a cualquiera de sus hijos en caso de que ellos deseen salir a algún lado solos, solo en caso de emergencia si no es así oculte las en donde nadie las encuentre jamas lo que hay allí es algo muy preciado que puede ser peligroso en manos equivocadas, quedo claro. 

-Si entendí perfectamente. -Dijo nerviosa mirando la caja-. Muchas gracias.

Cuando levanto la vista Florencia ya se estaba alejando de la casa y Laureana ya sin nada que hacer fuera entro y volvió a su recamara, abrió la caja con curiosidad y encontró dos esferas, estas tenían una especia de diamante purpura dentro, tomo una y la miro con atención, tenían un aspecto muy inofensivo pero si fueron hechas por una bruja quien sabe lo que serian capaces de hacer si se utilizaran, como sea ya estaba cansada de meterse en líos como en su juventud así que guardo las esferas y oculto la caja bajo la cama, a Manuel nunca se le ocurriría mirar bajo la cama a menos que estuviera buscando algo y ya se ocuparía de que la servidumbre no limpiara en ese sitio así que con inquietud se metió en su cama y abrazo a Manuel por la cintura mientras apoyaba su cabeza en el pecho de este quien dormido la rodeo con sus brazos y la apretó a el con cariño.

Los Hijos De La Viuda NegraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora