Ariadna

Capítulo 5 -Padre-

Subí a mi departamento y me lleve una sorpresa no muy grata.

-Padre,

-Ariadna hija, como estas, que tal tus clases.

- Que haces acá papá, desde cuando te preocupas por mi, tu solo piensas en ti.

-Cariño escuchame por favor

-No papá creo que no tenemos nada de que hablar, tu me alejaste de lo que era importante para mi, de ti, de mi casa, del recuerdo de mamá.

- Hija esto lo hago por la memoria de tu madre

-Mientes, ella siempre quiso que yo fuera feliz.

-Ariadna solo escucha y ya después tomas tu decisión.

-Esta bien, te escuchó

-Mira hija, tu madre antes de morir me pidió que ayudara a las personas que pasan por esa misma enfermedad y no tienen los recursos para costear el tratamiento, por esa razón quiero colocar un hospital y tu seras quien lo lleve a cargo, por eso te inscribi en medicina y en esta la mejor facultad, por que se que tienes un corazón muy grande y vas a ayudarme a cumplir la voluntad de tu madre, quiero que decidas seguir o dejar la medicina ahí y seguir tus propias metas, no te voy a obligar mas.

-Pa..pá por que no me dijo eso. Siento un nudo en mi garganta casi no puedo articular bien las palabras, me siento desbastada, porque mamá nunca me lo dijo. Esta bien papá seguiré en la facultad.

-Hija hay algo mas, mientras tu terminas tus estudios, yo hable con una amiga de tu madre de hace muchos años atrás que es medico, de los mejores médicos del país junto a su esposo, nos invitaron esta noche una cena en su casa.

-Bueno papá yo iré a la dichosa cena.

-Hija a las 8:00 pm pasa Jerry a recogerte, cuidate y no olvides que te quiero.

- Mire el reloj eran las 5:30, tome una relajante ducha, estaba sorprendida de los motivos que tenia mi padre y por que mi madre nunca llego a decirme nada. Me seque el cabello me puse unos pantys rosa,  busque en mi guarda ropa me decidí por un vestido blanco largo sin mangas y con una abertura en una pierna (ver imagen en multimedia) me recogí el cabello y lo adorne con la corona de flores que me regalo mi nana, me maquille un poco. Mire el reloj las 7:45 ya estaría por llegar Jerry, salí de mi departamento tome el ascensor cuando salí me di cuenta que Jerry ya estaba esperandome, me abrió la puerta del auto.

-Buenas noche Jerry le dije con una sonrisa.

-Señorita Ariadna buenas noches permitame decirle que esta usted muy bella esta noche.

-Gracias Jerry me sonroje, subí al auto y nos pusimos en marcha.

- El camino me era muy conocido, era hacia la casa de mis padres en New York, los recuerdos vinieron a mi mente y una lágrima amenazaba con salir, fui tan feliz en esa época.

-Llegamos señorita dijo Jerry sacandome de mis pensamientos.