Alejandro.
La perdí era lo único que pensaba en ese momento, ver la cara de dolor de Ariadna, fue lo peor.
Después que se llevaron en una ambulancia a Ariadna ya que no reaccionaba de su desmayo y mi padre despidiera a los invitados, solo quedo mi familia y Paola.
Mi madre lloraba desconsolada, no por Ariadna ella nunca la quiso, si no que por el embarazo de Paola yo había incumplido el contrato nos quedaríamos en la calle.
- Lorenzo podemos hacer algo dime no nos podemos quedar en la calle.
- Calmate Miranda necesito pensar y tu con tus berrinches no me dejas.
- ¿Que quieres Paola dinero?
Pregunto Lorenzo.- Claro que no, mi papi tiene más dinero que ustedes. Quiero a Alejandro. Quiero que se case conmigo.
- Estas loca Paola, yo me hare responsable del bebe pero no me casare contigo. Respondió Alejandro con asco.
- Lo siento Alejandro si no estas conmigo, no veo por que razón tener a este mocoso, perderé mi figura.
- Seria buena idea, sonrió Miranda.
- Callate mamá, no puedes hacer eso Paola es mi hijo y tuyo también.
- Paola haremos un trato si mi hijo se casa contigo tu nos sacaras de la banca rota.
- Trato hecho, pero solo lo haré cuando Alejandro este casado conmigo y tendré el mocoso. Que dices mi Alejo aceptas.
Me sentía confundido, yo amo a Ariadna y no me importa el dinero, pero no quiero perder a mi hijo.
- Esta bien Paola acepto el trato pero si tu atentas contra la vida de mi hijo me separó de ti te quedo claro.
- Claro que si mi Alejo. Chillo Paola.
....
Ariadna.
Mis párpados pesaban, el olor a desinfectante inundaba mis fosas nasales, abrí lentamente mis ojos, no sabia donde estaba, había un hombre reposando sobre el mueble, pude reconocer que era mi padre.
- Pa...pá donde estoy, mi voz sonó ronca.
- Ariadna mi niña que susto me diste, estamos en el hospital te desmayaste.
Los recuerdos empezaron a golpearme, Alejandro seria papá, mis lágrimas empezaron a salir.
- Mi niña no llores por favor todo esto es mi culpa, le falle a tu madre olvide tanto que me pidió que te apoyara en las decisiones que tomaras y vea te obligue y ahora estas sufriendo perdoname hija, pero él pagará esto quedara en la calle por incumplir el contrato.
- Papá no tengo nada que perdonarte, pero por favor no le quites nada a esa familia solo quedate con el hospital de mamá y ya. Te lo pido por favor.
- Esta bien hija eso haremos, tienes ese corazón tan noble como tu madre. De ahora en adelante te apoyaré en todo y juntos saldremos adelante.
- Papá, quiero pedirte algo yo amo el arte y tu lo sabes, quiero que me apoyes para estudiar en Paris prometo que seguiré la medicina y también estudiare arte pero en Italia, hagamos la voluntad de mamá allá por favor papá.
- Claro que si hija te apoyaré y pero me prometes que no te esforzaras mucho, estudiar dos carreras al mismo tiempo no es nada fácil. En unas horas te darán de alta hija y quería saber si quieres ir a España.
- Si papá extraño a mi nana y a Salomé.
- Hija no se si antes quieras hablar con Alejandro.
Un punzada de dolor atravesó mi pecho, lo amaba demasiado pero no podría alejarlo de su hijo, que forme su hogar con Paola.
- No papá no tengo nada que hablar con él.
- Como tu quieres mi niña llamare a Henry para que recoja algunas de tus cosas en el departamento y las lleve al aeropuerto.
Me dieron de alta mucho mas antes de lo esperado, Henry había pasado por nosotros al hospital para dirigirnos al aeropuerto donde nos esperaba el jet de mi padre. Iba perdida en mis pensamientos no podia negar el dolor que sentia, pero el amor hace sacrificios para que la persona amada sea feliz y era lo que haría renunciaría al amor de Alejandro para que fuera feliz con su hijo.
Dejaba el país y a su paso quería arrancarse el corazón y dejarlo allí con Alejandro y no sentir mas dolor.
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Ariadna
RomanceAriadna es una chica de 21 años que es obligada por su padre a dejar su sueños y familia obligándola a estudiar medicina, su vida dará un giro de 180° cuando conozca a Alejandro