Ariadna

Capitulo 8

There's a fire starting in my heart
Reaching a fever pitch and it's bringing me out the dark
Finally, I can see you crystal clear
Go ahead and sell me out and I'll lay your shit bare

See how I'll leave with every piece of you
Don't underestimate the things that I will do

There's a fire starting in my heart
Reaching a fever pitch and its bringing me out the dark..

Sonaba una y otra vez quería que parara ya de sonar, era mi tono de llamada, era mi padre quien se cree para despertarme a las 7:00 am un sábado con todo lo que sucedió anoche.

Conteste de muy mal humor.

-Cariño buenos días lamento mucho lo de anoche entiende que es por tu bien.

- Claro eres el mejor padre obliga a su hija a casarse con un desconocido. Te lo agradezco papá y si no te importa seguiré durmiendo dejame tranquila por lo menos hoy, adios.

Colgué no me sentía de humor, y creo que después de lo de anoche cogí un resfriado, tome el termómetro lo puse debajo de la lengua y espere el sonido y si es correcto 39° de temperatura, que mas me puede suceder.

There's a fire starting in my heart
Reaching a fever pitch and it's bringing me out the dark
Finally, I can see you crystal clear
Go ahead and sell me out and I'll lay your shit bare

See how I'll leave with every piece of you
Don't underestimate the things that I will do

There's a fire starting in my heart
Reaching a fever pitch and its bringing me out the dark.

Nuevamente mi padre no se cansa, descolgue el celular, ya te dije que no quiero hablar contigo dejame en paz de una maldita vez.

-Lo siento Ariadna no sabia que no querias saber de mi, solo quería saber como estabas hoy.

-Alejandro lo siento, pensé que era otra persona de verdad disculpa.

-Ariadna estas bien te escucho la voz un poco ronca.

-Si solo es un pequeño resfriado por la lluvia de anoche no te preocupes.

-Eso no sueno a un pequeño resfriado, debes cuidarte.

-Tranquilo no es nada grave, con un té ya se me pasará.

-Ariadna te aceptare la disculpa solo con una condición.

-Dime.

-Que me dejes cuidarte por el día de hoy y si es como dices tu un pequeño resfriado te dejo tranquila.

-Alejandro por favor no es necesario de verdad estoy bien.

-Por favor Ariadna dejame ayudarte.

-Esta bien tu ganas, ya sabes donde queda mi departamento. Es el 507.

Me levante de mi cama debía darme una ducha no puedo recibir a Alejandro asi.

Estaba terminando de arreglarme cuando sonó el timbre. Me mire en el espejo por lo menos estaba presentable.

Abrí la puerta y me lleve una sorpresa Alejandro usaba una bata azul de doctor se veía muy guapo (ver imagen en multimedia)

-Doctor a domicilio, puedo seguir.

- oh lo siento, si claro pasa.

-Ariadna no parece un solo resfriado dejame tomarte la temperatura por favor, abre y dejarlo debajo de tu lengua, tienes 40° de temperatura.

-Subió un grado hace rato estaba en 39°.

-Ariadna por que no me lo dijiste cuando te llame, soy doctor bueno me falta un año para terminar, pero puedo ayudarte. Tomare prestada tu cocina para prepararte un té mientras tu vas para tu habitación y descansas.

-No Alejandro no hagas esto no es necesario.

-Deja la terquedad y hazme caso por favor.

-Esta bien. Me fui hacia la habitación desde que mi madre murió nadie se preocupaba tanto por mi, como la extraño todo seria diferente si estuviera viva, mi padre no me obligaría a nada, las lágrimas empezaron a salir.

-Hermosa que tienes por favor no llores no me gusta verte asi.

Paso su pulgar por mi mejilla para limpiar mis lagrimas.

-Te prepare un delicioso té, y te tomaras este medicamento y veras como te alivias de inmediato y si no te daré uno de mis besos curativos.

No pude evitar sonrojarme, tome el medicamento y su té. Y me arrecoste nuevamente.

-Alejandro puedo pedirte un favor

-Claro hermosa.

-Me puedes acompañar un rato, por favor.

-Es un honor, preciosa. Que tal unas películas y palomitas.

Prendí la tele y están dando Bajo la misma estrella, Alejandro fue a preparar palomitas.

Pasamos un día agradable entre palomitas y peliculas.

-Preciosa aunque no quiero es hora de irme, fue un día estupendo gracias por permitirme cuidarte el día de hoy.

-No Alejandro gracias a ti por venir fue un gran día ya estoy mejor.

Lo acompañe a la puerta y me dio un beso en la mejilla, sentí algo indescriptible en mi estomago.

-Hasta mañana Alejandro, que tengas una linda noche cuidate.

Cerré la puerta y me fui para mi habitación sentía una extraña alegría.

Me dormi pensando en él, en lo especial que fue conmigo.