Verdugo ( Problemáticos II )

Una conversación más, dos peleas adicionales

La relación con Alexa no duró mucho. Por durar, no duró nada, porque ni ella ni AJ necesitaban el uno del otro, sólo se veían para un propósito. Bliss no quería novio y él había pasado una etapa salvaje en la que se había desfogado con todo lo que tenía tetas. Volvió a retomar contactos con sus compañeros de trabajo y siguió quedando con su mejor amiga, Bayley. Una espinita le seguía recordando la breve petición de Charlotte en el gimnasio, pero se obligaba a olvidarlo, prefería no repetir experiencia con alguien tan tóxico.

Backstage (algunas escenas son de Problemáticos)

Cuando Charlotte vio a Bayley hablando con Zayn sintió que se le revolvían las tripas. Si había alguna posibilidad de acercamiento con ella volvieron a esfumarse, no soportaba ver a nadie cerca de él y el no tenerle para ella estaba costándole la paciencia. Cada vez tenía menos debido a los anabolizantes.

Tras pelearse con todo el mundo y requerir la aparición de Triple H para separarlos a los tres, se dio la pelea de Charlotte contra Rusev, una idea absurda de Vince por superar las ventas al ponerla frente al búlgaro. Evidentemente, Flair perdió. Y cuando salió al exterior para buscar más "medicamentos", se notó el cuerpo extraño. Tenía aún la ropa del combate puesta y una sudadera que AJ le había regalado por su cumpleaños. Cuando retomó el camino al "estanco", caminó más rápido y volvió a notar una fuerte punzada en el cuerpo. Era un dolor que ya había tenido en el hígado, extremadamente insoportable. Pero esta vez la fulminó con mucha más rapidez. Su organismo entero empezó a funcionar mal y la puso pálida en mitad de la calle, haciéndola acercarse a tientas a una farola para agarrarse. Sentía como si una enorme bola de grasa le fuera a salir por la garganta y la sensación, aparte de asquerosa, dolía.

Ya veía la tienda a lo lejos, sólo tenía que andar unos cuantos pasos más. Al sentirse algo mejor se dio prisa y aceleró el ritmo, no iba a privarse de su dependencia, tenía que ser la mejor, tenía que destacar, lo llevaba en la sangre. Pero no podía negar la realidad: tenía miedo a otra lesión hepática y sabía que la estaba teniendo en ese mismo momento. De repente volvió a pararse en seco y se tocó la barriga... su cuerpo la avisaba de que algo seguía yendo mal. Cayó al suelo de rodillas y se sujetó en la acera, respirando roncamente. Cerró los ojos con fuerza y se contrajo para que no doliera tanto, pero de repente le empezaron a dar convulsiones y solo le dio tiempo a girarse. No había nadie cerca para ayudarla. Empezó a toser y tuvo la primera arcada, boca arriba, que la atragantó por completo. Pudo elevarse un poco y comenzó a vomitar; cada vez que lo hacía sentía como si echara puro ácido, era el mismo vómito de cuando la tuvieron que internar la primera vez por el abuso de esteroides.

Charlotte: ¡Ah! —gritó y se retorció en el suelo. Al caer empezó a notar una segunda convulsión mucho más fuerte, y esta vez sentía que la apuñalaban por dentro. Tosía como podía al estar ahogada, y algunos espumarajos salían disparados de su boca. 

Dejó de reaccionar de un momento a otro, tenía vómito en la sudadera y ya no se movía.

Por suerte, el luchador llevaba tiempo buscándola, sabía adónde se dirigía.

Styles: CHARLOTTE. NO, MIERDA. TE DIJE QUE DEJARAS ESAS MIERDAS. —La levantó llegando al poco rato, y se dio cuenta de la atrocidad que se estaba haciendo a sí misma. Sintió lástima al verla incapaz de moverse ni para evitar vomitarse encima. La agarró en sus brazos y la llevó al hospital.

Hospital (escena un poco más detallada de lo que no se vio)