Sin Miedo A Nada

Capítulo 144

CAPÍTULO 144:

Un mes había pasado desde el nacimiento de la pequeña Rufina. Euge por suerte ya estaba perfecta, a los cuatro días ya estaba dada de alta. Pero Rufi no tuvo tanta suerte. Al ser tan prematura sus pulmones no estaban totalmente desarrollados ni tenia todas las capacidades como para poder vivir por si sola. Asi que ella todavía seguía internada en neonatología. Euge y Nico pasaban horas y horas todos los días metidos allí viendo a su hija, dándole de comer, cambiándole los pañales y hablándole. Lo único que faltaba para que le dieran de alta era que pasara los 3.300Kg, porque el resto estaba todo en orden.

Euge y yo pasábamos mucho tiempo juntas, ya que mientras Peter y Nico estaban en la practica ella venia a casa, esperaba a que nico después de la practica la pasara a buscar y se iban a ver a su hija. Ya era como una rutina. 

De vez en cuando con Peter también íbamos a acompañarlos porque queríamos ver a nuesta sobrinita, pero se nos complicaba un poco por Alle, no queríamos llevarla a hospitales de tan chiquita.

Nuestra hermosa bebe tenia casi dos meses. Es un angel. Es un poco llorona, pero es porque es muy mimosa de sus papas y yo AMABA que fuera asi!

Me mataba de amor ver a Peter tan papa, tan grande y maduro. Era cosa de ver como se levantaba a la madrugada a hacerla calmar o simplemente a hacerme un poco de compañía mientras que yo le daba la teta, en esos momentos lo amaba cada vez un poco mas.

Por ahora nuestra vida giraba en torno a Alle. Todo el mundo nos hacia visitas, y con cada visita MAS juguetes para Alle, MAS ropita, MAS TODO! Era impresionante todo ya, teníamos un cuarto como de deposito para todo lo que nos regalaban pero aun no era útil sea por la edad o por el tamaño.

 

Como el tiempo estaba lindo y me lo permitia, había llegado a un acuerdo con Peter y mi padre. TRES días a la semana iba al club a trabajar. En realidad mi trabajo se basaba en: O ayudar a papa con los papeles, o quedarme cuidando la oficina de el, que era lo que mas me gustaba hacer! Pero no por mi, sino por Alle, que la llevaba conmigo porque NI LOCA me separaba de ella.

Hace un par de semanas que iba al club con Alle, el cochecito, el bolso de alle y un bolsito MIO. Porque había encontrado un horario GENIAL donde Peter no hacia NADA y donde el gimnasio estaba vacio. Entonces dejaba a Alle con su papa y yo aprovechaba para empezar a bajar los kilitos de mas que me quedaron.

 

Mi relación con Peter era lo mejor. Estabamos en nuestro mejor momento. Super enamorados, no solo entre nosotros sino que enamorados de nuestra porotita. Todos los días descubríamos algo nuevo, o una risita, un gesto, cualquier cosa. Todavia me acuerdo cuando la semana pasada estabamos tirados los tres en la cama y peter le vio en el bracito como un lunar (que en realidad no era un lunar, porque los bebes no tienen lunares. Era una manchita diminuta) y se puso como loco diciendo que le iba a salir el mismo lunar que el y no se que mas, un boludo total! Pero lo amaba.

 

 

Ahora estabamos en casa tranquilos. Alle dormía y nosotros nos preparábamos el almuerzo.

 

 

Lali: gordo la milanesa la queres con pure o con arroz?

Peter: lo que haya!

Lali: hay los dos, quedaron de ayer

Peter: pure entonces

Lali: toma –dandole el plato- apurate que tenes que aprontar todo asi vamos al club medio temprano

Peter: que tengo que aprontar?