VEINTITRÉS

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       Caminaron hasta el jardín donde se encontraba Summer sentada sobre el césped jugando con el perro de Dave. Al ver que Tom y Sophia habían llegado ella se levantó sonriente y saludó a ambos con un cálido abrazo. Dave salió al jardín con latas de cervezas en sus manos y le entregó una a cada uno, acomodándose luego en el césped.

—   Así es Dave, si todo sale bien tocaríamos cada sábado en el bar —. Sonrió Tom.

—   ¡Eso es excelente, chicos! —. Asintió Summer con una gran sonrisa en su rostro. Dave la miró sonriendo y la abrazó para luego darle un pequeño beso en su mejilla.

—   Entonces… ¡Porque todo salga bien! —. Sophia alzó la lata de cerveza, seguido por sus tres amigos, para así hacer un brindis.

Luego de la llegada de Tom y Sophia el timbre se escuchó nuevamente. Harold, Devon y Mary habían llegado.

—   ¡Hola! —. Saludó animadamente Danny, tal como siempre solía hacerlo. Los demás lo saludaron y Dougie le lanzó una lata de cerveza.

Los tres se incorporaron enseguida y se sentaron junto a sus otros amigos. Tom volvió a dar la noticia sobre lo del bar y todos celebraron nuevamente.

—   ¿Y Kate? —. Preguntó Harold mirando a su amigo Dave— ¿Vendrá?

—   Uuuh, ¿Y Kate? — repitió Sophia con una burlona risa y Harold la miró con el ceño fruncido, sacándole la lengua — Harold y Kate sentados en un árbol, quitándose la ropa —. Cantó riendo.

—   ¿No era besándose? —. Preguntó Tom riendo antes de beber su cerveza.

—   Es mi propia versión de la canción.

—   Y la versión pervertida —. Harold rodó los ojos riendo dándole un sorbo a la cerveza.

Sophia sacó un poco de césped y se lo lanzó a Harold, para luego enseñarle el dedo del medio mientras reía.

—   Parecen dos niños —comentó Devon.

—   Lo son —asintió Dave.

La noche pasó así, entre risas y bromas, y entre pequeñas discusiones de Sophia con Harold. A eso de la media noche se escuchó el timbre. Dave se levantó como pudo y caminó a la entrada para abrir.

—   ¿Kate? —. Preguntó Dave.

—   Hola, David—. Kate carcajeó al ver al chico en ese estado — Siento llegar tan tarde.

—Harold se pondrá feliz —asintió Dave y rápidamente tapó su boca con su mano. — No debí haber dicho eso —. Soltó una carcajada con el ceño fruncido y ambos caminaron al jardín, donde los demás chicos se encontraban haciendo ridiculeces bajo los efectos del alcohol. — ¡Miren quien llegó! —. Anunció Dave señalando a Kate, quien saludó tímidamente con su mano. El primero en acercarse a la chica fue Harold, quien la recibió con un gran abrazo.

Sophia corrió donde su mejor amiga y la abrazó, al pasar cerca de Harold comenzó a tararear la canción con la que hace un rato lo había molestado. Él la miró de mala forma y luego comenzó a reír.

—   Cállate —. Le murmuró Harold mirándola.

—   No, no quiero —. Sonrió amplio Sophia para luego seguir cantando la canción.

—   ¿Qué es eso? —. Rió Kate enarcando su ceja al escuchar lo que Sophia cantaba.

—   ¿No la conoces? Es la nueva versión de la típica canción del ‘ Besándose en un árbol ’

—   ¿Ah sí? Cántala —. Pidió Kate mirando a su mejor amiga.

—   Bueno… — Sophia aclaró su garganta y comenzó a cantar —. Harold y… —. Harold se apresuró y le tapó la boca a Sophia con ambas mano antes de que ella pudiese seguir la canción.

—   Es muy tonta, muy tonta —. Dijo Harold fulminando a Sophia con su mirada.

—   Pero quería escucharla… ¿Harold y quién? —. Kate alzó ambas cejas mirando de forma divertida al chico que aún tapaba la boca de Sophia.

—   Nada, ya sabes cómo es Sophia… Cantaba Harold y David —. Harold rodó los ojos ante lo que acababa de decir y sin duda su comentario hizo reír a todos los presentes.

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