Tras tantos meses atrás, había anhelado tener este momento de paz y felicidad por fin, estas aquí Jake, me estas escribiendo en este mismo momento, ya no me estas apartando como solías hacer en un pasado... y aunque soy consciente de que después de algunos minutos volverás a hacerlo no me importa, por lo menos sabré que sigues siendo tú, que tu centro de multi-diversidad sigue intacto y que sigues avanzando.
Eres un tremendo tonto.
Sé que te iras nuevamente a lugares donde mi presencia no es permitida ni interesada, pero ahora mismo no me interesa eso. Lo importante es que te sienta en contacto durante por lo menos segundos, y ahora mismo me pregunto... ¿Valió realmente la pena engañarte con él?...
Las lágrimas salen desconocidas por mis lagrimales, se esparcen por mis mejillas y me torturan en una respuesta corta y muy sencilla.
No. No valió la pena.
Parpadeo un par de veces, pero no se van, al igual que mi culpabilidad.
¡Tonta! ¡Tonta! ¡Tonta!
¡Soy una estúpida! ¡Soy una estúpida! Arruine todo lo bueno que tenía en mi miserable vida... ¡Te hice algo que nunca debí hacer! ¡Te hice daño! Te rompí cuando prometí nunca hacerlo...
Soy una estúpida... ¡No supe como detenerlo! ¡No supe detenerme!... y poco a poco... nos rompí.
No quiero que me veas a los ojos y después de tanto me digas que ya no puedes continuar, esto no es nada a como me lo imagine.
No puedo controlar esto, se me sale de las manos y me siente débil por dentro, me rompe, me carcome, me sigue por mis pasillos interiores... solamente me oscurece.
Soy, lo soy, soy definitivamente lo peor que pudiste haber conocido, quería intente no saber nada, intente con todas mis fuerzas no perder eso... todos me dicen que esto es totalmente inútil, que no estarás nunca, pero yo sé que sí, yo sé que en algún punto estarás aquí... no importa lo que pase...
Ya no, ya no quiero seguir con la misma farsa, te necesito aquí... porque tú sabes lo que es, tu sabes esto... Y no me quiero volver.
Te mentí, te traicione, pero ante todo fingí no hacerlo... sin duda el peor de los errores que pude haber cometido. No hay palabras que sangren lo suficiente para compadecerte a ti de mi miseria, no hay bien, no hay mal... solo está la neutralidad a la que estamos acostumbrados, aplastándonos lentamente con una fuerza brutal y espontánea.
Tenía razón... ya te has ido de nuevo. Y yo solo permanezco en este lugar. Llorando como una estúpida ante la idea de perderte por mis acciones.
Ahora supongo que se lo que yo hacía.
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Ambar
RomanceOcultos, así estamos desde hace tiempo; sin hablar, sin escribirnos, sin escucharnos... ¿Dónde demonios estas?... ¿Por qué siquiera te fuiste?... Seguí escuchando el eco de mi corazón dentro de mi cuerpo. Era un eco encerrado, Doloroso.