Casi

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11/12/16

No puedo detenerme, por alguna extraña razón no puedo dejar de escribirte. ¿Sabes que descubrí? es cierto. El primer amor te deja tan marcada que dejas de pensar en ti misma o mismo. Dejas de lado cualquier pensamiento racional o lógico y lo haces para luego sustituirlo con una comparación. O con algo en relación a esa persona. Todo lo que había leído en libros es cierto, duele. Cuando esa persona se decide a ir, duele. Duele como una profunda perforación al rincón vacío y llano que alberga en nuestros corazones, cuando esa persona llega ese lugar se inunda, y cuando se va, lo perfora para que el líquido salga... para que otra persona distinta llegue y lo vuelva a llenar. Es una mierda. Es una total y miserable mierda.

Hace semanas que tuve un episodio de crisis, ese que me descubriste tú mismo acerca de tu odio hacia ti mismo. Llore hasta que no pude respirar, hasta que mi rostro enrojeció y sentí mi cuerpo caliente, hasta que pude congelarme completamente. Me iba a quedar así, pero sabía que no podía hacerlo. No era justo para mí, y aunque deseaba quedarme en esa posición de tristeza autodestructiva, no lo hice.

Ya no estoy tan feliz. Ya no soy tan feliz. Ya no deseo tener todo lo que antes deseaba tener. Ya casi no te extraño.

Casi.


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