El primer beso ©

Capítulo 30.- Inconcluso.

Al llegar al hospital Kieran entro rápidamente, mientras yo pagaba el taxi. Mi madre aún seguía durmiendo cuando había pasado todo esto, así que la mejor opción fue enviarle un mensaje de texto para que entienda todo.

Kieran pregunto por su amigo en el mesón y nos derivaron aun séptimo piso, obviamente tomamos el ascensor. Se notaba de lejos la preocupación por su amigo y lo angustiado que estaba.

Cuando abrimos la puerta nos topamos con una sala de espera en la cual rápidamente pasamos, había muy poca gente. Ya al final del pasillo vimos a Dylan, Tom y Chad. Tom estaba con su rostro tapado mientras Dylan miraba por la ventana y Chad sentado al otro lado de Tom mirando a la nada.

—¿Cómo esta él? —pregunta Kieran inmediatamente.

Los chicos al notarnos alzan la mirada mientras Dylan seguía en la ventana. Nadie dijo nada y tuve el peor de los presentimientos.

—¿Qué pasa? ¿Por qué no me responden? —Kieran se acerca a ellos.

Tom se levanta del asiento, veo sus ojos hinchados y enrojecido.

—Hermano, falleció —le dice a Kieran.

Inmediatamente quedo en shock. Kieran no se mueve.

—Falleció en la moto —le dice Tom mientras sus lágrimas estaba cayendo.

Kieran lleva sus manos hasta su frente para taparse el rostro.

—¿Sus padre dónde están? —pregunta en seguida Kieran.

—Están adentro con él —responde Tom mirándolo—. Supimos hace unos instantes atrás. Falleció casi cerca de las una de la mañana.

Llevo mis dedos hasta mi boca para cubrirla, en seguida pensé en Valeria y en su bebe.

—¿Esta Valeria? —le pregunto preocupada.

Tom niega con su cabeza.

—¿No... lo sabe? —Siento como mi voz se va quebrando y Tom lo niega.

Trago en seco y veo como Kieran empieza a llorar rápidamente.

De pronto salen de una sala dos personas y deduje que eran los padres de Devon.

—¡Kieran mi niño! —la mujer suspira en llanto llamando a Kieran.

La madre de Devon abraza Kieran inmediatamente y él la acepta. Mientras el padre de Devon nos miraba con mucha pena. Yo me hago a un lado para sentarme en los sillones. Chad seguía en la misma posición al igual que Dylan podía ver sus lágrimas al igual que Tom, quien se había quedado parado.

Todos estaban llorando incluso yo, no era fácil lidiar con la muerte de alguien, menos de alguien que tenía toda una vida por delante. No sabía que pensar ahora más que en la situación que se encontraba mi mejor amiga, estaba prácticamente viuda, el padre su hijo había muerto.

Fue justo a las cinco de la mañana cuando trasladaron a Devon al servicio médico legal, para ver si había algún suceso que habría complicado la muerte de Devon. Los padres de Devon habían llamado a los padres de Valeria y habían llegado, pero mi amiga no sabía de la situación. Los padres de Valeria se sorprendieron al verme en el hospital.

—Audrey no puedes decirle nada a Valeria —me dice la madre de mi amiga.

—Valeria se va enterar de alguna forma —le dice su esposo.

—Yo.. yo no diré nada.—le dije nerviosa.

La madre de Valeria pasa sus manos por su cabeza tras la noticia.