Me odias, Me amas [JiCheol]

Capítulo 24: A un paso de la oscuridad

Bajo corriendo las escaleras, con la mochila al hombro, entro a la cocina apresurado para coger un pan y salir nuevamente corriendo.

—¡Hyung! Espérame —gritó Hansol corriendo tras él.

—Rápido, Hansol, quiero llegar temprano a la escuela.

Seungcheol trotaba en su sitio mientras esperaba a su primo, quien a pesar de ser deportista era muy flojo para hacer ejercicio.

—Lo sé, estás emocionado por ver a Jihoon hyung —empezó a trotar a su lado.

—Sí, es lo que más deseo. Pero también debemos ir a entrenar para el siguiente partido —Seungcheol paró de trotar cuando estuvieron delante de un semáforo—. Ya debes saber a qué equipo nos han asignado para el siguiente partido, ¿no?

—Los murciélagos de Infinite ¿Cómo olvidarlo? Lo que dijo líder de Got7 ¿Será cierto?

El semáforo cambio a luz verde y ambos continuaron trotando, aunque Seungcheol se adelantó un poco a Hansol antes de parar trotar dándole la espalda a su primo y aprentando los puños.

—Sí, es cierto —la mirada de Seungcheol se torno sombría—. Yo lo vi.

—¿De qué hablas?¿Qué viste? —Hansol se detuvo al lado de su primo.

—Yo lo vi, el día que le quebraron la pierna a ese chico llamado BamBam —Seungcheol hablo dándole la espalda a su primo— o bueno, en realidad, yo lo encontré cuando casi todo había acabado.

Flash back

Seungcheol estaba más que feliz, había logrado obtener el dinero suficiente para comprar un pasaje e ir a ver el partido de la semifinal del campeonato del interescolar, que se realizaba en Busan.

—Hoy es el partido de Infinite contra Got7. Grabaré el partido y luego armaremos estrategias con los chicos —sonreía mientras pensaba en que algún día competiría contra esos equipos.

Había estado caminando un buen tramo de calles, después de todo no tenía más dinero pues ya habia comprado un pasaje de ida y vuelta, cuando miro algo extraño en uno de los callejones.
Por curiosidad se fijo en la escena y miro un grupo de chicos golpeando a otro, a él le molestaba de sobremanera esas cosas, por ello con paso firme se acercó al grupo.

—¡Hey, ustedes! —todos ellos giraron y apenas se le veían los rostros— ¡Déjenlo en paz!

Esos chicos al verlo salieron corriendo, Seungcheol sabía que no era por miedo a él pero agradeció que no tuvo que enfrentarse con todo ese grupo. Pero ahora eso no era importante, el muchacho sangrando en el suelo se había convertido en su prioridad, con paso rápido se acercó a él con la esperanza que aún estuviera consciente.

—Ayú..da..me —dijo con un hilo de voz el chico de cabello rojo con la cara ensangrentada.

—Sí, sí, te ayudare —Seungcheol agradeció que el chico hablará pero su estado era deplorable, tomo con delicadeza sus hombros y lo elevó ligeramente del suelo—. No te duermas ¿Sí? —el muchacho asintió— ¡Ayuda! ¡Alguien que nos ayude!

Estaba desesperado, su teléfono no tenía saldo, no conocía los números de emergencia, él chico sangraba por todos lado y el juraba que sus huesos estaban totalmente rotos. Así que lo único que le quedó fue gritar por auxilio y felizmente un señor que pasaba por el lugar, al oírlo gritar, se acercó apara ayudarlos. El señor llamo a una ambulancia que llegó a los minutos, y él con el chico de nombre desconocido, que para ese momento había perdido el conocimiento, subieron a ella.