capitulo 24...

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POV LAUREN

-¿Es que acaso no me escucha lo que le digo? ¡Ese hombre esta vivo y tiene a camila!-Golpee las palmas de mis manos en el escritorio del oficial Cárter.

-Le recomiendo que baje el tono señorita jauregui, si no quiere pasar otra noche en la cárcel.-Le amenazo y tenia claro que en mis ojos se podía ver la furia del mismísimo infierno.

-Son unos inútiles... Si encuentro a mi novia muerta en manos de ese psicópata juro que ustedes tendrán la culpa de todo y los haré pagar cada lagrima que ella haya derramado.-Fueron mis ultimas palabras antes de salir de aquella estación de policía.

Este había sido ya mi ultimo intento de razonar con ellos, lo demás iría por mi cuenta. No quiero involucrar a las chicas por que tal vez las podría poner en peligro así que estoy sola... "Solo somos tu y yo Lauren..." solo yo y mi conciencia...

Volví a mi departamento, banana me saludó como siempre y yo le di caricias en su pequeña cabeza antes de ir a mi habitación. Rabia puesto una pizarra donde tenia pegadas mis notas de hace unas noches y había imprimido la imagen la grabación donde salia el auto que se llevó a Camila.

Caminaba de un lado a otro analizando todo en mi mente, "Piensa Lauren, piensa..." ¡Claro! maldición ¿como fui tan idiota?, ¿como no lo pensé antes? La casa de camila, ese mal parido debe tenerla ahí.

No lo pensé mas tiempo y tome mi chaqueta de cuero, las llaves del departamento y salí a toda prisa. Pensé en llamar a normani para que me llevara en su auto pero me arrepentí, tomé un taxi y di la dirección de la antigua casa de camila.

En menos de 20 minutos ya estaba ahí y pague lo que correspondía al conductor. Caminé hacia la puerta rápidamente, no me molesté en golpear y solo la empuje poniendo todo mi peso sobre ella para lograr abrirla.  La puerta se abrió y todo se veía exactamente igual desde que camila dejo este lugar, después de la muerte de sofi.

Caminé lentamente y en silencio, parecía estar vació y eso me inquietaba.

-¿¡camz!?-pregunté en voz alta,  seguí caminando y oí un ruido venir del sótano, me voltee rápidamente y oí pisadas subir con rapidez por las escaleras, mire hacia la puerta que daba al sótano de la casa y de ahí salio el.- Alejandro... sabia que eras tu maldito hijo de puta, ¿¡donde la tienes!?

-no es problema tuyo...-me dijo el acercándose lentamente

-claro que lo es, ¡es mi novia y un sádico como tu solo va a matarla!

-¿¡y que con eso!? es mi maldita hija ¡le hago lo que se me da la gana! 

-eres un...-di un paso hacia el pero de inmediato saco un arma de su bolsillo trasero apuntándome logrando que me detuviera. 

-un paso mas... y estas muerta.-lo miré seriamente, sabia exactamente que era capaz de disparar pero, es camila, es MI camz.. y nadie la hace daño a mi camz...

Intente hacer una finta fingiendo que iba a la derecha para luego cambiar rápidamente de dirección a la izquierda. grave error. El fue mas rápido y de un momento a otro su grande y gruesa mano estaba apretando mi cuello estampando mi cuerpo contra  la pared, me quejé y sentí como me levantaba del piso ahorcandome contra el muro. Sus ojos estaban muy abiertos mirándome fijamente, casi parecía que se saldrían de sus cuencas, su mirada era la de un verdadero maniático. Empezó a reír de la nada y yo pataleaba mientras intentaba liberarme, sentía que me desmayaría en cualquier segundo pero debía resistir, debía salvarla.

-¿quieres ver a camila?...-podía sentir su pútrido aliento chocar contra mi cara.-vas a ver a camila... voy a divertirme mucho con ustedes dos...

Vi como levanto el arma y me dio un fuerte golpe en la cabeza logrando que todo mi entorno se transformara en una pantalla negra. No se cuanto paso exactamente pero al despertar no podía ver nada, todo estaba oscuro y mis manos estaban atadas, el suelo estaba mojado y olía a sangre.

-¿que demonios...?

-¿Lau...Lauren? ¿eres tu?...

-¿camila? dios mio, camz ¿donde estas?

-no lo se... no puedo verte lolo...

-todo va a estar bien camila... tranquila.

Las luces se encendieron y mis ojos ardieron por el repentino cambio de iluminación. parpadee un par de veces y vi mi alrededor, mi vista paseo por todo el lugar de izquierda a derecha hasta que la vi. camila estaba a mi lado, totalmente ensangrentada, desnuda y atada con cuerdas que parecían encarnarse en sus muñecas y tobillos. Su rostro estaba tan golpeado y magullado que era casi irreconocible, el solo verla en ese estado hizo que mis ojos se llenaran de lagrimas y empecé a llorar sin control.

-camz... mi amor mira lo que este desgraciado te ha hecho... voy a matarlo... juro que voy a matarlo.-dije entre llanto y lagrimas.

-¿vas a matarme?... y ¿si te mato yo primero?-dijo el mal parido mientras se acercaba con una expresión divertida en el rostro, era realmente macabra la sonrisa que tenia.-¿sabes? sera divertido ver como imploras piedad para que acabe con tu miserable y asquerosa vida... pero mas divertido sera que veas con tus propios ojos morir a tu amada Camilita.

-no te atrevas a tocarle un pelo mas ¿me oíste maldito? voy a hacerte pedazos con mis propias manos.-le dije con total furia.

Observe como se rió en mi propia cara y se giró a buscar una caja que parecía ser de herramientas detrás de el. El idiota se acercó con aquella caja en las manos y la abrió dejando ver que, efectivamente era una caja llena de herramientas.

-de tin, marin, de do, pingüe...-dijo mirando las herramientas, este hombre estaba realmente mal de la cabeza.- ¿que usaré primero?... podría empezar cortando tus dedos...

-déjala ir...-se oyó la voz débil de camila.- por favor... mátame, torturame, hazme lo que quieras pero déjala ir...

-¡cállate perra!-el se acercó a camila y le dio un puñetazo  dejándola tirada en el suelo apenas respirando, camila se estaba muriendo frente a mis ojos y yo estaba atada.

"La caja idiota..." la caja de herramientas estaba a mi lado, la miré y como pude intente sacar algo para liberar mis manos, logré tomar un alicate y miré rápidamente a aquel monstruo, estaba golpeando a camila y yo intentaba apresurarme para liberarme...

....

....

"¡Bingo!" solté mis manos, lo logré. rápidamente solté mis pies y sin esperar mas salte sobre aquel hombre, lo agarré por la espalda y lo jalé hacia atrás, ambos caímos al suelo y el sobre mi pero aun asi no lo solté, mis brazos se aferraron con fuerza a su cuello asfixiandolo mientras que con mis piernas intentaba sostener sus brazos para que no pudiera liberarse.

Sus movimientos eran cada vez mas débiles pero no conté con que el aun tenia el arma. la saco de su bolsillo y disparó.

Flores de papel //Camren fanfic//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora