capitulo 20...

3.6K 198 35
                                    

maratón 2/3

POV LAUREN:

-vamos lauren, por favor, estoy nerviosa...-decía camila, la tenia con los ojos tapados ya que le tenia una sorpresa.

-¿estas lisa?

-sii, estoy lista lauren.-dijo ella casi desesperada cosa que me hizo reír. quite mis manos de sus ojos lentamente y ella parpadeo un par de veces hasta que se fijo en lo que había frente a ella. sus cosas, su ropa y todo lo suyo, lo que ella necesitaba estaba aquí, su ropa ordenada en su propia cajonera, un cuadro de una foto de ella y sofi, sus zapatos, todo estaba perfectamente organizado.

si, aun que parezca raro, verónica termino yéndose a vivir con su ahora novio, llamado jonathan, el departamento era muy grande para mi sola y sabia que vivían apretados en casa de dinah así que decidí darle la sorpresa a camila y traerla a vivir conmigo, quizás fue un poco apresurado pero al ver el brillo en su mirada y su gran sonrisa fue suficiente para saber que había hecho lo correcto.

-lauren... esto es...-dijo mirándome sonriendo y me abrazo del cuello, yo rodee su cintura con mis brazos y la sentí besarme.- esto es genial ¡viviremos juntas! es como un sueño hecho realidad, te veré despertar todas las mañanas, y te daré muchos mimos, y te haré de comer y seremos felices y.. y... nos bañaremos juntas y...-la calle con un beso, se veía realmente adorable cuando divagaba de esa manera, ella rió en mis labios y yo la alce en el aire dándole vueltas sin dejar de besarla.- y... te amo.-susurro finalmente en mis labios logrando que mi sonrisa fuera aun mas grande.

-y yo te amo a ti camzi...

después de todo lo que había pasado, después de los años oscuros y el sufrimiento que parecía no tener fin para camila, por fin parecía que la vida le sonreía a esa hermosa chica latina, su sonrisa era realmente única y me encantaba verla sonreír así. camila estaba viviendo lo que siempre había merecido vivir y yo daría hasta mi vida solo por mantenerla así de feliz el resto de su vida. la amaba con locura.

camila y yo decidimos pasar el día en nuestro departamento, pedimos pizza para el almuerzo y sushi para la cena, no dejábamos de besarnos en todo momento entre risas y mas tarde nos acurrucamos en el sofá para ver una película en netflix.

mientras la película ya llegaba a su fin yo mire de reojo a camila que hace un rato se había apoyado en mi hombro y de ahí no se había movido, logre ver que se había quedado profundamente dormida y sonreí con ternura, con cuidado me puse de pie y la cargue en mis brazos, ella de inmediato rodeo mi cuello con sus brazos como si fuera un acto involuntario y se acurruco en mi cuello. camine con cuidado hasta llegar a la habitación y la recosté en la cama, quite sus zapatos y pantalones para que estuviera mas cómoda y la arrope para que no sintiera frió, luego volví a la sala para apagar la televisión y volví a la habitación. me senté al borde de la cama para quitar mis zapatos y desvestirme cuando empecé a oír que se quejaba, la mire preocupada y efectivamente camila tenia el ceño fruncido y se removía de un lado a otro en la cama, pronto empezó a patalear y a agitarse, corrí hacia ella y la tome de los hombros.

-camz.. camila soy yo, despierta, camzi.-intente despertarla.

-no... no ¡suéltame! déjame ir... déjame ir...-decía ella con terror y no sabia que hacer, ella no despertaba, no me escuchaba, la abrace con fuerza y acaricie su cabello susurrando en su oído.

-todo esta bien... no es real camila, todo esta bien... yo estoy contigo...-ella sollozaba y de repente la sentí saltar en mis brazos, note sus manos temblorosas y entonces me abrazó aferrándose a mi, se había despertado.

-lauren... lauren...-ella lloraba en mi hombro y yo solo intentaba consolarla, no sabia que decir...

quizás podía hacerla sonreír, quizás podía lograr que no pensara en el pasado durante el día, quizás podía intentar darle felicidad... pero no podía meterme en su mente... no podía borrar la maldita marca que ese monstruo había dejado grabada  en ella... 

****

ya eran dos semanas desde que camila vivía conmigo, las pesadillas seguían pero intentaba que no le afectaran tanto, aun que tenia un mal presentimiento. en fin, hoy camila había amanecido algo desanimada ya que no había podido dormir bien anoche así que decidí alegrarle el día.

-ya lauren, dime donde vamos.-dijo camila por quinta vez, yo solo caminaba sin decirle nada, camila y yo habíamos acostumbrado a ir a todos lados caminando, si quedaba muy lejos tomábamos un taxi pero usualmente preferíamos caminar para disfrutar mas el paseo.

-ya te dije que es una sorpresa.-dije sonriendo y ella hizo un puchero inflando las mejillas.

-me pones nerviosa, eso no se vale.-yo solté una risa y bese su mejilla tomando su mano para entrelazar nuestros dedos.

-ya falta poco camzi, aguanta un poco mas.

seguimos caminando por un rato mas hasta que llegamos a ese edificio que buscaba, camila aun no entendía así que entre junto con ella y una chica joven de mirada dulce nos recibió.

-hola, soy lauren jauregui.-le dije ya que había llamado antes de venir sin que camila supiera.

-oh, hola lauren, soy cecilia.-me dijo con una sonrisa.- las jaulas están atrás, ¿quieren pasar?-yo asentí y guié a camila al interior, al entrar sus ojos brillaron al ver diferentes jaulas con varias razas de cachorros, perros que habían sido salvados de las calles o simplemente los habían dejado aquí y no habían vuelto por ellos.

-¡perritos! lauren ¡son perritos!-dijo camila emocionada saltando y corriendo como una niña mirando todas las jaulas.- son preciosos ¡me encantan todos! 

-solo puedes elegir uno.-le dije riendo y ella me miro con su gran sonrisa.

-¿nos llevaremos uno?-yo asentí y ella chillo emocionada mirando todas las jaulas, la mayoría de los perros se acercaban a ella y le meneaban la cola esperando a ser elegidos por camila. después de casi 20 minutos intentando decidir entre todos los perros camila quedo mirando uno fijamente con una gran sonrisa.- este... este es... quiero este lauren.-me miro con un brillo hermoso en sus ojos de chocolate. me acerque a ver al afortunado cachorro elegido por camila, no era uno de raza, ni mucho menos un perro caro, de hecho era un pequeño perro mestizo común y corriente de color marrón, pero camila lo había amado y si quería ese perro, ese seria su perro.

 me acerque a ver al afortunado cachorro elegido por camila, no era uno de raza, ni mucho menos un perro caro, de hecho era un pequeño perro mestizo común y corriente de color marrón, pero camila lo había amado y si quería ese perro, ese seria su ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

después de elegir al pequeño mestizo camila firmo los papeles necesarios para que fuera legalmente suyo, pagamos lo que debíamos pagar por el cachorro y nos lo llevamos, banana había sido el nombre que camila le había dado al perro, cosas de camila.

llegamos a casa y el pequeño perro camino tímidamente por el lugar, de hecho me recordaba mucho a camila y eso me daba gracia, solo basto un par de horas para que el cachorro se acostumbrara y ya andaba saltando y jugueteando por todos lados con su dueña, o con su madre como decía camila, según ella era nuestro primer hijo juntas, "joder, ¿donde te has metido jauregui?" no lo se, pero soy feliz así.

Flores de papel //Camren fanfic//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora