En cuanto desperte, note que no estaba en mi casa. Tenia una cama, pero era vieja he incomoda, lo mismo que las cobijas y la almohada. Parecía estar en algún tipo de cabaña, y por alguna razón estaba uno de mis tobillos atado a la cama, impidiéndome siquiera pararme, solo estar sentada ahí esperando lo peor. Sentía como sudaba frío, mientras que escuchaba un andar lento hacia mi posición. Abrió la puerta lento, como si no quisiera despertarme, pero al ver que era innecesario la abrió por completo, haciéndola chirriar un poco.
-Así que has despertado. Creí que tardarías un rato más...- Su voz era fría y serena, como si todo sentimiento se hubiera ido hace años.
- Donde estoy?...- no pude evitar una nota de pánico en mi voz. Sabia que me miraba al otro lado de la mascara, y eso me helaba la piel.
- En mi cabaña, a unos 20 kilómetros de la ciudad. Y déjame adivinar tu siguiente pregunta: Quién eres?
- No... Eso lo se... Eres Bloody Painter...
- Muy bien. Eso me ahorra las presentaciones sin sentido, Janette Colins...
- Me estuviste espiando.
- Normalmente me lo preguntan, pero si. Eres lista... aunque no tanto si te atrapé.
- Supongo que ahora me torturaras y eventualmente me matarás, como a la chica anterior.
- Si, haré lo mismo contigo, pero no la torture hasta la muerte, ella no quiso seguir con su trabajo...
- Qué clase de trabajo?...
- Era mi asistente personal... Pero ahora tu eres la que la suplirá.
-Ja! Y que te dice que lo voy a hacer?
- Simple...- saco su cuchillo y jugueteaba con él.- Siempre lo hacen, no importa lo valientes que se crean. En cuanto sienten el primer corte, no tardan en aceptar, aunque hoy me siento bondadoso, así que no te rebanare... Por ahora... Aceptas el trato?
- Cómo se que no me matarás cuando ya no te sirva?...
- No puedo asegurarte que no te matare si eres inútil, pero puedo hacer que se alargue tu miserable vida ahora que me pertenece...
- Mi vida no te pertenece... Y no seré tu esclava, entiendes?
- Si, entiendo...- me tomó de la barbilla y puso el cuchillo cerca de mi cara- Entiendo que quieres morir...- Rosó el cuchillo contra mi cachete, haciendo un ligero corte, pero del cual salia sangre. No pude contener mi miedo más y tuve que aceptar.
- De acuerdo... Tu ganas...- Soltó mi cara y la deje caer, viendo hacia el colchón hundido y amarillento.
- Siempre es igual...- Se alejo y luego soltó mi pierna- Es hora de comer, así que vas a cocinar...
- Esta bien...- Me paré y salí, guiada por aquel chico atemorizante con mascara sonriente.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
HOLIP!!! HE AQUI EL SEGUNDO CAPITULO, POR LO QUE HARE QUE CADA SEMANA TENGAN UNO NUEVO (REGULARMENTE LO SUBIRE EL LUNES O MARTES) Y ASI NO ME ODIARAN COMO CON MIS OTRAS HISTORIAS, YEI!! :3TAMBIEN QUERIA MANDARLES UN SALUDO A DarkPao, AlanTagleCaballero Y Rose_Black375, QUE SON UNOS LOQUILLOS ADORABLES :3
BYE, BYE!! LOVE YA!!
ESTÁS LEYENDO
La ayudante del artista sangriento
RastgeleHojas en blanco de una libreta. Lienzo. Una pared lisa. No importa en donde se plasme el arte, pero para el tiene solo una regla: debe de tener su materia prima y color principal; la sangre derramada por sus propias manos. Pero claro, no puede haber...