Desperté de la misma forma en la que dormí, con su
aroma llenando mi mente y sus brazos pegándome a él. Me sentí sumamente apenada, pero al mismo tiempo no quería que me soltara. Tenía sentimientos encontrados. Quería correr lejos, pero también quedarme ahí para siempre. No sabía que me pasaba. Tal vez era ese contacto físico que hacia mucho que no tenía, o simplemente porque quería estar ahí y punto. Lo olí un poco, tratado de reconocer el olor. Era algo dulce y suave, pero también muy masculino. Como una colonia desconocida que no podía dejar de disfrutar. Estaba perdida en mis pensamientos, cuando sentí su mano acariciando mi cabello. Alsé la vista a su rostro, el cual sonreía ligeramente.- Buenos días- Me alejé un poco de él, apenada de mis pensamientos.- Te asusté?
- N-no... solo... no esperaba que despertaras hasta más tarde...
- Pues ya es bastante tarde, mira- Voltee a ver el reloj detrás de mi. 12:56.
- Rayos! Se va a preocupar Matt...
- Hmm...- Me veía con una cara algo disgustado.
- Qué?... Oh, cierto, te pones celoso jejeje
- Solo no me agrada que te preocupes tanto por él.
- En realidad no deberías de ponerte celoso.
- Por?
- Ya te había dicho que el sólo es un amigo... además, tu y yo no somos nada.
- Aún...
- Qu...- Me interrumpió antes de poder terminar la palabra siquiera, dandome un beso. Me quede quieta, pues sentía que era lo mejor del mundo. Luego él se separó.
- Ya no estás confundida?
- A-aún lo estoy... más que antes diría yo...
- Entonces te propongo algo. Sal conmigo.
- Eh?
- Sal conmigo un tiempo. Si es verdad que te gusto, podríamos tal vez...- se sonrojó, haciendo que se viera tierno.- ser novios o algo así... y si se aclara y decides que no... te dejaré ir. Sin amenazas, sin peligros. Podrás vivir tu vida normalmente, o quizás entregarme a la policía para que te sientas segura...
- Eso no pasará.- Me vio sorprendido, como si no lo esperara de mi.- Puede que seas un asesino, pero una mala persona no. Además, en todo caso de que te deje, creo que vendría de vez en cuando a saludar...
- En serio?
- Si... Digo, Zero y Puppet son divertidos, y contigo me siento tranquila, así que no me alejaría mucho- Espera, que dije?- Además, quiero saber como es que seria el bebé de esos dos.
- En verdad te encariñaste con asesinos, eh?
- N-no son completamente malos...
- Eso crees?- Me tomó de las muñecas y se puso sobre mí.- Sabes que en cualquier momento podría hacer lo que yo quiera. Violarte, apuñalarte, degollarte, ahorcarte, cualquier tipo de muerte que se te ocurra, sea rápida o como la peor tortura. Podría hacerlo sin siquiera cambiar de expresión en lo más mínimo.- Puso una expresión sería, viendo directamente mis ojos, tratando de infundirme miedo.- Dime, aún crees que no somos tan malos?- Me quedé un momento en silencio. No sabia que contestar. Sabía que no era malo, pero tenía un punto a su razón.- Lo sabía.- Se levantó y de dirigió a la puerta.- Prepararé el desayuno. Tu cámbiate, que supongo quieres ir con tu amigo.
- S-sí, solo para...- el salió antes de dejarme mínimo terminar.- Avisar...Me quedé un rato en la cama, recapitulando lo que hacía unos momentos pasó. Primero, dormir abrazada por él. Segundo, me pidió que saliéramos. Tercero, me dijo los peligros de estar con él. Era como si quisiera que me quedara a su lado, pero también que me alejara por mi propio bien. Sacudí de mi cabeza ese pensamiento, me levanté y me vestí con rapidez. Para cuando salí del cuarto, el ya había preparado unos huevos y café. Lo ayude a cocinar un par de salchichas, servimos un poco de jugo y nos sentamos a desayunar, viendo el uno al otro. Al terminar, ambos recogimos los trastes, el los lavó y yo limpié la cocina (que por alguna razón estaba sucia), para cuando terminamos eran casi las 2. Salimos algo apresurados, pero llegamos con Matt no tan tarde como esperaba. Antes de separarme, Bloody me tomó de la cintura para besarme. Era simple e increíblemente tierno. Toqué la puerta y rápidamente me abrieron, jalandome dentro de la casa.
- Janette!- Me abrazó algo demasiado fuerte.- Estas bien...
- Matt! Me aplastas...- Me soltó por fin, dejándome respirar.- Gracias...
- Qué paso? Me asusté con tu nota...
- Solo fui con Bloody... nada del otro mundo...
- Nada del otro mundo? Te fuiste con un asesino!
- Ssshhh!!! Te pueden oír!
- Sabes que mi papá está trabajando y que mi mamá está en su "clase de danza", así que nadie me escucha... y así te puedo regañar
- Regañarme? Por qué me regañarías? No me pasó nada y no me pasará nada!
- Entonces por qué no regresaste anoche?
- Me quede a dormir con Bloody.
- Dormiste con él?!
- No de la manera que piensas! Solo dormimos, de dormir!- Sentía mi cara arder.- Además, sabes bien que jamás he hecho eso! No voy a ir y acostarme con quien sea!
- Pero es una mala persona! Podría violarte!
- No crees que si quisiera violarme lo habría hecho ya?
- Ah...- Parecía que iba a repelar, pero se detuvo.- Buen punto... Pero aún así me preocupas!
- No entiendo porqué te preocupas tanto...
- Porque... Porque... Argh!- Se dio la vuelta agarrando su cabello desesperado.
- Sigo esperando una respuesta...
- Es que... No puedo decirte...
- Bien, cuando quieras decirme, estaré en el cuarto de invitados...- Comencé a caminar a las escaleras, pero me detuvo del brazo.
- Espera!
- Ahora qué?...- Me jaló hacia él, tomándome de ambos brazos y dándome un beso algo forzado. Me quede quieta del asombro, pero tampoco quería quedarme ahí. Por alguna razón, era muy distinto que con Bloody. Con Bloody sentía que no quería que me dejara, tenía mariposas en el estado, se me subía el color a las mejillas. Con Matt no sentía nada de eso, nada en lo absoluto. Se separó cuando notó que me sentía incómoda.
- Se que es ridículo. Somos amigos después de todo. Pero no podía dejar que la chica que quiero se aleje de mí... y menos si es con ese maldito de Bloody...
- No hables así de él si no lo conoces! Él es muy amable y respetuoso!
- Amable y respetuoso? Joder, Janette, ÉL MATA SOLO PARA PINTAR UN POCO!!
- Y qué? Eso no quiere decir que mate a todo el que esté frente a él! No quiere decir que sea malo!
- Ya veo... estás enamorada de ese monstruo...
- Que no es un monstruo! También es un humano como nosotros! Y no estoy enamorada de él!
- Por Dios Janette! Te conozco desde que tengo uso de razón! Se que es lo que te pasa, y tu estas enamorada de ese estúpido que, además de todo, fue el que mató a tu madre, o que ya se te olvidó?!
- No, no lo he olvidado, pero eso tampoco significa que no lo pueda perdonar.- Matt me miraba entre decepcionado, furioso e incrédulo, mientras asentía lento.
- Así que a eso has llegado, Janette...
- Matt, yo...
- Esta bien... esta perfecto...- se dio medía vuelta, directo a las escaleras.
- Qué? Ahora te encerrarás en tu cuarto?
- Así es...- Dio vuelta al pasillo y azotó la puerta.Me quede en la entrada durante unos segundos, para luego ir al cuarto también, azotar la puerta y gritar contra una almohada lo más fuerte que podía. Una vez calmada, me recosté sobre la cama viendo al infinito, pensando en si aceptar la propuesta de Bloody o no. Tendría razón Matt? Estaba enamorada de aquél que mató a mi madre, me secuestró, me hizo matar niños y pintaba con la sangre de inocentes? Y si no es así, por qué pensaba en sus ojos azules cual zafiro? Por qué no podía olvidar esa sonrisa que pocas veces mostraba? Por qué no puedo olvidar ese aroma que lo caracteriza y me fascina? Escuché la ventana abrirse, pero no me asusté en lo absoluto, pues esperaba que fuera alguno de mis recientes amigos.
- Puppet? Zero? Bloody? Son ustedes?
- Fallaste.- Me cubrió la boca para que evitara gritar, pero sentía que las manos de ese extraño eran curiosamente callosas. Con dificultad pude ver que eran grises, grandes y algo toscas.- Ahora, si no te importa, seras mi cena...--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
TIPICO, TE PELEAS CON TU AMIGO, TE VAS A TU CUARTO Y TE QUIEREN COMER xD POS BUENO, MI ESTUPIDEZ YA SE NOTA :v PERO AUN ASI, ESTA HISTORIA NO TERMINA HASTA QUE... MEJOR NO DIGO QUE ES SPOILER xD
BYE, BYE, LOVE YA!!
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La ayudante del artista sangriento
RandomHojas en blanco de una libreta. Lienzo. Una pared lisa. No importa en donde se plasme el arte, pero para el tiene solo una regla: debe de tener su materia prima y color principal; la sangre derramada por sus propias manos. Pero claro, no puede haber...