No quería alzar la cara para verlo. Me puse algo tensa desde el momento que se escuchó la puerta, pero afortunadamente lo primero que dijo en cuanto puerta fue:
- Joder, ni porque estoy enfrente de ellos se pueden calmar?...- Se sento a un lado mio.- Así que volviste...- De nuevo la tensión.
- Si... y tu les dijiste que no me mataran...- Vi sus mejillas enrojecer.
- Si... solo en caso de que volvieras...
- Pues lo hice. Aún no entiendo por qué, pero regresé...
- No será que me extrañabas?
- No. Con Matt estaba muy comoda...
- Mmm...- volteó al lado contrario a mi dirección.
- Qué? Estás celoso?- Lo miré irónica.
- Celoso... y que si tal vez lo estoy?...
- Eh?
- En serio eres tan distraída?!- Me agarró de las muñecas y se puso encima mío, más rojo de lo que nunca lo había visto.- Me gustas. Ya, lo dije!
- Eh! Creí que solo era una broma de Puppet y tuya...
- Yo no bromeo. Me gustas, desde hace un tiempo.
- D-desde cuando?...
- Al rededor de un mes, pero un poco antes ya me había estado fijando en ti.
- Dices... desde que Jeff me secuestró?
- Maso menos... cuando me abrazaste, no se que pasó que sentía que debía protegerte. Por eso me di cuenta.- Se paró y se quedo viendo el suelo.- Pero no te culparía si me dejas de nuevo. De todos modos soy un asesino. Además, tu tienes a tu "mejor amigo"...
- Que tienen ustedes con Matt y yo? No somos más allá que mejores amigos! Lo veo como un hermano para mí! Jamás andaría con él!
- De verdad?- Me vio algo esperanzado.
- Si!
- Entonces esta bien si hago esto.Se acercó a mi y me besó un poco brusco, pero tierno al mismo tiempo. En mi mente estaba pensando en mil maneras de alejarme, pero mis labios simplemente se movían a la par de los suyos. Cuando se separó, era porque ambos habíamos olvidado respirar, y nuestros pulmones pedían aire desesperadamente. Cuando recuperé el aliento, lo vi directo a los ojos. No se que me hizo hacerlo, pero pude notar sus dos safiros brillantes, como si les hubiera devuelto la vida con ese simple beso. Por un momento pasó por mi mente el volver a besarlo, pero rechacé esa idea. No quería darle la satisfacción de que supiera lo confundida que me hallaba, así que solo bajé la cabeza, pero su mano alzó mi barbilla de nuevo.
- Qué pasa?
- Y-yo...- Lo vi de nuevo a los ojos, y como si fuera una clase de hechizo le dije la verdad.- No se si me gustas o no...
- Dices que en parte te gusto... pero en parte no?
- Algo así... e-estoy muy confundida, no se lo que me pasa...
- Y si...- Por desgracia, no terminó la frase.
- EH! PICASSO! YA NOS VAMOS! VEN A DESPEDIRTE DE LOS 3!
- Ahora hablaras de tres?- Bloody abrió la puerta con una sonrisa sarcástica.
- Por supuesto! No puedes ignorar a la pequeña Doll...
- Muñeco, aún no sabemos que es...
- Lo se, pero yo quiero que sea una linda niña.
- Y si resulta ser un niño?
- Mmm... Será el pequeño Timmy jajaja
- Creo que debes de dejar las drogas amigo, es por tu bien.- Bloody se cruzó de brazos, aún sonriente.
- El que debe dejarlas eres tú... desde cuando estás tan sonriente?- Solo alzó los hombros.
- Eso no te incumbe...
- Ajajá! Creo que mejor los dejamos so-li-tos~
- N-no es eso!- Sentía como me ponía roja del comentario de Zero.
- De todos modos nos vamos. Tenemos mucho por hacer. Bye!- Nos quedamos viendo como se alejaban, jugueteando entre ellos.
- No se como van a poder cuidar de un bebé cuando ambos parecen niños pequeños...
- Simple, terminarán pidiendo nuestra ayuda.
- Nuestra?
- Si... No te piensas quedar?
- Amm... no quiero causar problemas con Matt...- En mi mente había una batalla enorme. Por un lado el quedarme con Bloody y terminar de entender por que estoy así de confundida, mientras por el otro quería irme, escapar de todo lo que pasó y jamás volver.
- Si quieres quedarte esta noche he irte en la mañana, está bien. No te haré nada después de irte...
- Mmm... está bien. Me quedaré en la noche y por la mañana... veré que hago.
- Bien...
Entramos a la casa, recogimos unas botellas de cerveza vacías (que esperaba que solo Bloody y Puppet se hubieran tomado) y nos acostamos en la cama como siempre: dandonos la espalda, aunque eso no duró mucho. Temblaba de frío, pues la madrugada hizo que bajara la temperatura drásticamente. Obviamente, el lo notó.- Estás bien?
- Si, solo tengo un poco de frío... no tienes más cobijas?
- No. Solo tengo estas dos. Ya se...- Jaló mi cobija, dejandome al crudo frío.
- Eh!
- Espera...- Me rodeó con sus brazos, nos cubrió con las dos cobijas y me acurrucó en si pecho, haciendo mi cara arder.
- Q-qué haces?...
- Yo también tengo frío... Espero no te incomode...
- O-ok...- Tenia la nariz pegada a su pecho, y al inhalar noté un dulce aroma.- Hueles bien...- Tenia demasiado sueño como para saber lo que decía.
- S-supongo a de ser que me calló café en la mañana...- Lo notaba nervioso, pero no le presté atención.
- No es eso... Es un olor distinto... Muy... Dulce... y masculino...- Poco a poco perdía la conciencia por el sueño. El solo se rió un poco.
- Creo que es mejor que duermas.- me dio un beso en la cabeza.- Descansa Jany...- Me quedé completamente dormida, acobijada por sus brazos y embriagada de su olor.--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
OMFG!!! LO DIJO AL FIN!!! YEEEEEEEEEEEEEEEEEEIIIIIIII!!! *CORRE DANDO VUELTAS COMO LOCA*
BLOODY: CALMATE, NO? SOLO LE DIJE QUE ME GUSTA...
PERO SI ESO ES HER-MO-SO~
BLOODY: LO QUE SEA ¬///¬
Y BUEEENO, ESO ES TODO POR HOY (HABRA MÁS PRONTO ;3)
BYE,BYE, LOVE YA!
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La ayudante del artista sangriento
RandomHojas en blanco de una libreta. Lienzo. Una pared lisa. No importa en donde se plasme el arte, pero para el tiene solo una regla: debe de tener su materia prima y color principal; la sangre derramada por sus propias manos. Pero claro, no puede haber...