Dylan.
Luego de haber dejado a Ashley durmiendo en mi piso, me dirijo a la parte subterránea de mi hotel.
Soy un terrible hermano mayor
Mi hotel se llama, Saia. Es una de los más prestigiosos del mundo. En especial de Argentina.
Saia, tiene cincuenta pisos. En el primer piso, está el vestíbulo. En el segundo piso, está el casino. En el tercer piso, está la discoteca. Luego desde el piso número cuatro, hasta el número cuarenta y ocho, están las habitaciones para los huéspedes del hotel.
Subterráneamente, hay un bar de streppers y una bodega donde guardo todo tipo de cosas.Ahora mismo, me dirijo a el bar de streppers. Hoy, hay audiciones y yo soy uno de los jueces.
Miró hacia arriba de la puerta de mi ascensor privado, recién va por el piso cuarenta y cinco.
Entonces me pongo a pensar en lo que pasó con Evelyn. Esa chica me hizo perder el control de una manera única. Sus movimientos, su cuerpo, sus labios, sus manos, su actitud descarada, su voz.
Empiezo a notar que mis pantalones están demasiado ajustados. Ahora me puse duro de solo pensar en ella.
Odio perder el control. Y esta noche lo perdí.
¿Que va a pasar cuando ella esté secuestrada?
Vuelvo a prestar atención a la cantidad de pisos por los que voy y solo faltan cinco.
Al llegar al bar todos me miran. Debe de ser por qué camino medio rengo. No es fácil caminar con una erección.
Mi bar tiene una barra de cuatro metros a la derecha. Las mesas redondas en el centro del lugar y el escenario con forma de T al fondo.
Esta noche, el lugar está cerrado al público. Así que solo está el personal. Camino hasta la barra, me siento en uno de los taburetes de cuero negro y le hago una seña a Vicky para que me sirva lo de siempre. Ella entiende y me sirve un vaso con Jack Daniels.
Los empleados transitan por el bar despreocupadamente.
Voy por mi segundo vaso, cuando se apagan las luces del bar. Todo queda en silencio. De repente, se prende un reflector color azul en el centro del escenario. Puedo ver la silueta de una mujer en el centro del escenario.
Una sensual canción comienza a sonar en todo el bar. Es Feeling Goog de Michael Bublé.
La luz azul del reflector, cambia a blanca y ahora puedo ver que la mujer esta de espaldas. La mujer mueve las caderas al ritmo de la canción, cuando Michael, canta: "Y me siento bien", la mujer se da la vuelta quedando de frente al escenario, pero con la cabeza agachada y el pelo rubio en la cara como una cortina. La imagen de su cuerpo en lenceria, me golpea con fuerza.
ESTÁS LEYENDO
Me perteneces. [Sin Editar]
RomanceÉl tenia todo planeado. La tenía que secuestrar si quería ser el nuevo dueño del imperio narco de su padre. Después de que eso pasara, la dejaría ir y todo volvería a la normalidad. Ella tenía todo planeado. Conocer los puntos débiles del lugar y...