UnKlassic

Doce.

Al final, no habíamos podido hacer la fila. Lo intentamos, pero Tom salió personalmente y nos arrastró dentro. Las fans se habían lanzado sobre él apenas asomó la cabeza por la puerta. Afuera del lugar de la presentación era un caos.

— ¡Íbamos a hacer fila!— Karin se quejó, haciendo un mohín enojado.

— Bueno... ¡Ya no!— Tom exclamó, burlándose.

Tom nos llevó al Backstage y nos sobornó con presentarnos a los chicos de Lawson, lo que funcionó totalmente (especialmente con Karin, y logró que se le pasara el enojo).

— Eso es soborno— resoplé.

— Shhh— Layla me tapó la boca, y entonces recordé que ella era una gran fan de Lawson. Cielo Santo.

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Resulta que el escenario tenía una “ZONA VIP”, una especie de palco elevado unos diez metros por encima del público, de modo que los chicos pudieran ver cuando Lawson estaba haciendo su presentación y viceversa.

En este momento, Lawson estaba en el escenario interpretando Brokenhearted y nosotras estábamos junto con The Wanted viendo la presentación.

— ¿Cómo estás?—Nathan dijo a mi lado, apoyándose en la baranda del toldo de la misma forma que yo, nuestros codos se rozaban y ese simple contacto había puesto una sonrisa en mi rostro.

— Bastante entretenida—contesté, sin quitar la vista del escenario.

— Siento haberle dicho a los chicos que venían, se me escapó

— ¿Mmm?— lo volví a ver. — No, no importa

Se movió y paso un brazo por detrás de mi cintura. Un sonrojo se instaló en mis mejillas, pero mi cabello suelto lo ocultó de su vista.

— ¿Importa si hago esto, entonces?

— A mí no me importa...—le sonreí—pero... ¿Crees que a tus fans les guste que abraces a una chica frente a ellas?

— Oh— dijo Nathan, pero no quitó el brazo. — ¿Te importa lo que ellas piensan?

— Bueno...supongo que si yo estuviera en el lugar de ellas, me pondría muy celosa de ver a mi ídolo con una chica extraña

— Tú no eres una chica extraña...y yo no soy ningún ídolo

— Pero son tus fans, son importantes, asi que...por supuesto que me importa lo que piensan

Nathan frunció el ceño. Y entonces, Nano llegó y les avisó que era su turno de bajar y prepararse para salir al escenario.

Nathan comenzó a irse, pero yo me moví hacia él y le susurré en el oído:

— ¿Si sabes que tú me gustas, verdad? Y que tus fans no van a cambiar eso

Pude ver una sonrisa extendiéndose en su rostro, pero Tom llegó y se lo arrastró con él antes de que Nathan dijese algo. Agitó su mano despidiéndose antes de desaparecer en las escaleras. En el escenario, Lawson se despidió, y bajaron del escenario, dejándolo vacío.

— Ese chico está loco por ti— informó Layla, con una sonrisa orgullosa.

— ¿Eh? ¿Qué te hace pensar eso?

— ¿Qué le dijiste? Porque llevaba una sonrisa de idiota pegada en la cara

— ¿Crees que está mal que le haya dicho que me gusta?— pregunté, rascándome la nuca. Mis mejillas volviéndose rojas mientras recordaba la forma en la que se lo había dicho. —Aunque le dije que me importaba lo que pensaran sus fans y que no...