Veinticuatro (editado).

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Íbamos en el taxi de vuelta al Crowne Plaza, cuando revisé mi teléfono, y noté que Calum me había respondido hace un par de horas. No me culpen, había estado demasiado concentrada en el concierto, y 30000 personas chillando al mismo tiempo no ayudaba mucho a que yo escuchase mi teléfono.
NUEVO MENSAJE DE: CALUM
8:45p.m
A toda la canción obviamente, pero me refiero particularmente a... ¿Can I ask you on a date?

¿Te puedo pedir una cita? Oh, vaya. ¿Estaba lista para eso?
Demonios que lo estás, déjate de tonterías, mi cabeza me reprochó. Vive el momento, y a la mierda con lo demás.
Sabios consejos allí.
PARA: CALUM.
11:20p.m.
Dime cuando y donde y tomaré tu palabra, Cal ;)
Mientras esperaba por la respuesta de Calum, entré a twitter con la intención de publicar una de las fotos con los chicos, pero la cuenta oficial de 5SOS, y todo el mundo en general, ya se me había adelantado.
---@5SOS: “Band power! *Emoji de un brazo musculoso*  @OneDirection @UnKlassic” —Por dios. Estos chicos estaban locos.
---@Ashton5SOS: “No puedo creer que tenga tantas personas a las que llamar hermanos”—La foto grupal era una de mis favoritas, así que la retwiteé.
---@OneDirection: “@Unklassic fue parte del público esta noche. Una de nuestras presentaciones favoritas de lejos. Los amamos x” —La foto la habíamos tomado al final, con los chicos en el escenario, nosotras en el espacio donde debería de estar la seguridad, y el público de fondo.
Respondí:
@HaileyUnKlassic: “@OneDirection fue una de las mejores experiencias de mi vida. Increíble.”
Y seguí leyendo las menciones de los chicos:
---@Luke5SOS: “Con los chicos y @HaileyUnKlassic en backstage en Adelaide. Gran show.”—Era la foto en la que yo estaba encima de él, Calum, Mike y Ashton nos miraban divertidos. Genial, de todas las fotos había escogido esa.
@HaileyUnKlassic: “@Luke5SOS ya te lo dije antes, te odio tanto Hemmings. Recuérdame mi patética estatura al lado de un gigante.”
---@Calum5SOS: “RT @CaseyStyles: ‘Momento inmortal #HalumIsReal’ Acaba de darme cuenta de que esto es TT lol” —Una foto del beso en el escenario tomada desde la primera fila con un buen ángulo acompañaba el comentario. Mi rostro lucía sorprendido, y el de Calum feliz, sus ojos cerrados y los míos fijos en él. Una de mis manos estaba en el micrófono, la otra colgaba a mi lado; las de él sostenían su bajo mientras se inclinaba hacia mí.
(N/A: * RT: retweet / **TT: twitter trending-tendencia en twitter)
Espera, ¿¡Tendencia en Twitter!?
Busqué las tendencias y encontré #HalumIsReal en Tendencias a nivel mundial. Oh mierda. El Fandom verdaderamente estaba loco (me pregunto cuantas veces he dicho esto antes).
Mi teléfono vibró con la respuesta de Calum, y yo sonreí como idiota al ver el mensaje.
NUEVO MENSAJE DE: CALUM.
11: 28p.m.
Déjame pensar en ello. Pero dalo por hecho, preciosa.
Llegamos al hotel y nos fuimos a nuestras habitaciones. Las cinco teníamos que tomar algo para la voz porque habíamos gritado a más no poder, y teníamos un concierto dentro de dos días. Jayne nos iba a borrar de la faz de la Tierra si volvíamos a Londres y habíamos perdido la voz.
Me puse un short y una camiseta sin mangas, y me lancé a la cama, con la esperanza de pegar ojo. Pero eso no pasó. En mi cabeza no dejaba de dar vueltas el hecho de que había besado a Calum ¡dos veces!, mi corazón acelerado y dividido entre estar roto o enamorarse completamente de él.
No quería enamorarme. Tenía miedo. Había descubierto que mi suerte en el amor era una mierda y no quería exponerme a eso de nuevo. Era más feliz cuando no estaba en eso del amor. Sabía que no había vuelta atrás una vez que me enamorara de él, si aceptaba el hecho de que me gustaba, tarde o temprano sería desilusionada de nuevo.
Dios, vaya eres una cabeza dura. “¿Vive el momento y a la mierda lo demás?”, mi cabeza continuó reprochándome. Era un lío, con todos esos ‘¿Qué pasa si...?’ dando vueltas en mi mente.
NUEVO MENSAJE DE: CALUM.
2:13a.m
Sigues en el Crowne?
Vaya. Hablando de.
PARA: CALUM. 
2:14a.m.
Nos vamos mañana.
NUEVO MENSAJE DE: CALUM. 
2:15a.m.
Creí que estarías durmiendo
Tenía razón. Debería de estarlo. Eran las 2:15 de la madrugada.
PARA: CALUM. 
2:15a.m.
¿Qué clase de persona envía un mensaje a las 2 de la madrugada si cree que la otra está durmiendo?
Idiota.
NUEVO MENSAJE DE: CALUM.
2:17a.m.
Tenía la esperanza ;)
-
PARA: CALUM.
2:17a.m.
Traté de dormir, pero a estas horas ya lo descarté.
-
DOS NUEVOS MENSAJE DE: CALUM.   
2:18a.m.
» Todos los demás duermen y muero de aburrimiento. ¿Quieres venir?
» ¿Sabes qué?  Mejor yo iré a dónde estás tú
Oh dios mío. Tragué saliva, nerviosa, y le envié mi número de habitación.
NUEVO MENSAJE DE: CALUM.  
2:20a.m. 
Genial. He sido invitado a la habitación de una chica ;)
-
PARA: CALUM.
2:20a.m.
Idiota.
Cinco minutos después alguien tocaba mi puerta. Rodé por la cama y me puse de pie para ir a abrir. Allí estaba Calum, con un pantalón de chándal, una camiseta blanca y medias, sin zapatos a la vista.
Me abrazó y sonreí.
Lee: Hola, Cal
Calum: Hola— Cerró la puerta tras de sí con el pie y se lanzó a mi cama, hundiéndose en el colchón con un suspiro. Tranquilo y relajado como si estuviese en su propia habitación, puso sus brazos detrás de su cabeza.
Lee: ¡Calum!
Calum: ¿Qué?— preguntó, inocente. Negué con la cabeza, y me senté junto a él en la cama—. ¿Vas a quedarte ahí sentada?
Lo miré.
Lee: No, creo que te usaré a ti de almohada— me dejé caer hacia un lado y puse mi cabeza en su estómago. Hizo un fingido sonido de dolor, y luego puso una mano en mi pelo, peinándolo con sus dedos.
Calum: ¿Te gustó el show?
Giré mi cabeza hacia él, su pecho bajaba y subía con su respiración, y su mirada estaba en el techo.
Lee: Claro que sí, fue genial. One Direction brilló como siempre—Cal me miró haciendo un puchero enfurruñado. —Y, luego están estos chicos, sus teloneros...—hice un pequeño mohín, pensando. —no sé...pero tengo que decir que su baterista es realmente lindo.
Calum: ¿¡Qué!? —exclamó en un fingido tono de de sorpresa e indignación.
Me reí.
Lee: Sus ojos, ¿de qué color son? ¿Avellana? ¿Verde? ¿Dorado? Oh dios, y su cabello desordenado y...—suspiré como una fan enamorada.
Calum: Oh, cállate—me interrumpió, y yo reí de nuevo.
Lee: Ash es lindo, todos son lindos en realidad pero...eh, deja mi cabello—Cal continuó jugando con un rizo, dándole vueltas y luego soltándolo para ver como rebotaba. —como decía, ugh, olvidé lo que iba diciendo...
Calum: Decías que todos somos lindos- lo sé, me despierto todos los días y me miro en el espejo y no lo puedo creer...
Lee: “Jesus, ¿¡QUÉ ES ESO!?”—dije imitando su voz, y poniendo cara de espanto.
Calum rodó debajo de mí y dejó que mi cabeza cayera en el colchón, sin él como soporte.
Lee: ¿Qué...—Calum se había puesto sobre mí, solo que estaba al revés. Sus ojos a diez centímetros de distancia, fijos en los míos. Esos ojos cafés brillaban y no podía dejar de verlos, eran hermosos—...haces?
Calum: Tus ojos son preciosos. Tú eres preciosa. —No podía ver su boca, pero sabía que sonreía. — La vista es hermosa, pero creo que debo aprovechar ahora que estoy aquí.
Me sonrojé y le pregunté:
Lee: ¿Aprovechar q-?—se movió y puso su boca sobre la mía, cortando mi frase. No tenía experiencia con besos al revés, bueno, a decir verdad, no tenía experiencia con el tema de los besos, mi primer novio había sido Shelley, y la verdad es que no éramos del tipo de pareja que se besaba constantemente. Y mi segundo novio...bueno, el mundo ni siquiera sabía que había “un segundo”. Ni siquiera había durado más que un mes. 
Era extraño. Su nariz hacía cosquillas en mi barbilla, y lo único que mis ojos veían era su cuello. Se alejó al siguiente segundo y me miró. Me senté y quedé frente a él.
Lee: Eso no es justo.
Calum: ¿Qué no es justo?
Lee: No puedes ir por ahí besando a la gente. —me acerqué a él, ignorando el hecho de que mis mejillas ardían y uní mi boca a la suya. Lo sentí sonreír, porque él sabía a lo que me refería, me había besado todas esas veces, y yo quería tener la iniciativa al menos una vez.
Ah, qué demonios. Me encantaba Calum. Era demasiado tarde para pensar en si enamorarse o no.
Cuando nos alejamos, ambos sonreíamos como idiotas. Estábamos perdidos.
En algún momento de la noche, ambos habíamos caído en las garras del sueño, porque, lo siguiente que recordaba era despertar  con mi cabeza acurrucada en el hueco de su hombro, con su brazo rodeándome y un insistente golpe en la puerta.
Lee: Mierda—farfullé, mi voz ronca por el sueño.
Calum abrió los ojos, despertado también por los furiosos azotes que alguien le estaba dando a la puerta.
Calum: ¿Qué hora es?
Lee: Hora de irme—le dije. —Demonios, Karin, ¿piensas arrancar la puerta?—grité, y me puse de pie, y sin pensar en el hecho de que Calum estaba acostado en mi cama y la impresión que eso podía dar, fui hasta la puerta y la abrí.
Karin: Gracias al cielo, creí que no despertarías. —al pelirroja se quejó, con un dejo de molestia en su voz.
Calum: El hotel entero despertó con esos golpes—El chico gruñó, apareciendo a mi lado mientras se frotaba los ojos.
Karin levantó una ceja, su discreta expresión de “¿¡Pero qué demonios!?”, cuando vió al chico.
Calum: Buenos días Karin. Adioós Karin—canturreó. — Nos vemos, Lily— dejó un beso en mi mejilla y se fue deambulando por el pasillo en dirección al ascensor.
Karin: No voy a preguntar. NO.VOY.A.PREGUNTAR
Lee: Por supuesto que si lo harás—dejé salir una carcajada, consciente de que me iba a ahogar en preguntas. — Pero será más tarde porque, si mal no recuerdo, llegaste aquí a despertarme como un furioso tornado, lo que significa que es tarde.
Karin: ¡Oh mierda!—exclamó, como si lo acabara de recordar— ¡Es tarde! ¡Apresúrate! —salió corriendo por el pasillo y entró a su habitación, azotando la puerta tras ella.
Corrí a la ducha, y salí cinco minutos después, para meterme en lo primero que había encontrado en mi desordenada maleta. Un pantalón de chándal gris con una línea negra a los costados, una camiseta blanca, un beanie negro y tenis de un tono dorado opaco.
Me preguntó a quién me parezco, pensé irónica.
Lancé todo en mi maleta y salí de la habitación.
Afuera estaban Layla (vestida como futbolista: con short y medias altas, un abrigo negro que decía ·Sorry Not Sorry· y converse) y Skye (llevaba puesto un short blanco, una camiseta gris que decía ·Get Lost·, un beanie, tenis y una camiseta a cuadros amarrada a la cadera). Realmente íbamos a pasar todo el día viajando, no teníamos que vestirnos muy bien, o al menos los tacones estaban FUERA de la cuestión.
Lee: ¿Qué hay con esta maleta?—gruñí, tirando de la pesada valija.
Tal vez me había emocionado demasiado comprando el día antes del concierto.  De acuerdo, me había llevado un poco demasiado de todo: zapatos, ropa, y, ejem, una colección de discos de vinil de 5 Seconds of Summer; pero, bueno, teníamos una tarde libre el día anterior al concierto, y Karin había insistido.
Layla me miró divertida y me ayudó a sacar el pesado equipaje, empujando mientras yo tiraba.
Entonces Calum llegó corriendo -mientras Layla y yo aún estábamos en posiciones extrañas  tratando de sacar la maleta de la habitación- con los otros chicos tras él.
Nos pusimos de pie, disimuladamente, justo cuando ellos llegaron junto a nosotras, Layla discretamente cerrando la puerta tras ella. Todos andaban en ropas extrañas, no, tachen eso: pantalonetas, y...
Skye: ¿Calzoncillos de tucanes?— Soltó una risita, dándole una mirada descarada a los calzoncillos verdes con estampados de tucanes que andaba Luke.
Calum: Cállate—graznó.
Skye alzó las cejas.
Skye: Pero si el que tiene los calzoncillos es Luke, ¿porqué tú...?
Michael: Porque esos calzoncillos son de Calum—reveló, estallando en carcajadas, ante la mueca de Skye.
Skye: Oh dios. Exceso de información— alzó las manos, en señal de “deténganse por favor”.  
Lee: ¿Qué...?—pregunté, señalando los calzoncillos.
Calum: Cleptómano de ropa interior—dijo, como si eso lo explicase todo.
Michael: Solo cleptómano y ya, en realidad usa lo que encuentre, no importa de quién sea—. Los cuatro se echaron a reír al ver las expresiones de asco de las tres.
Diez minutos después, cuando Karin y Mar salieron de sus habitaciones, nos despedimos oficialmente de los chicos y Cal se ofreció a llevar mi maleta hasta el ascensor. Agradecí la ayuda, porque yo ni siquiera podía mover la maleta dos metros sin detenerme a descansar, y él la llevaba como si no pesara nada.
Ashton se ofreció a ayudar a Karin (quien llevaba dos maletas) y los demás sólo vinieron tras nosotras, ayudando a Skye y a Mar (Layla se negó rotundamente a que un chico cargara su maleta).
Calum: La próxima vez que nos veamos tendremos esa cita, ¿está bien?
Sonreí. El tomó mi mano y entrelazó nuestros dedos, sin importarle que los demás- que venían detrás de nosotros- lo vieran.
Lee: Tú sabes que...—empecé—que yo acaba de romper con...
Calum: ¿Con Nathan Sykes?— bufó—Lo sé. Que le den. No sabe lo que dejó ir. —Mi corazón se aceleró, este chico era...increíble. — Espera, ¿Te molesta que...?—hizo el intento por soltar mi mano. No lo dejé. Sus dedos atrapados en los míos era una de las mejores sensaciones del mundo, iba a disfrutarla tanto como durara. El sonrió, divertido por mi reacción y sin decir nada, simplemente caminó a mi lado.
Lee: Sabes, ahora que lo pienso, el bajista de la banda telonera era mi favorito, él sí que era el más guapo. —Calum sonrió, esa sonrisa suya que lo hacía ver como un niño, todo ternura e inocencia, pero con ese brillo en sus ojos que lo hacía ser algo más. No era un niño, después de todo, incluso aunque actuara como si lo fuese la mayor parte del tiempo.
Calum: Me alegra escuchar eso—Me entregó mi maleta cuando entré al ascensor, junto con las chicas, y ellos se quedaron allí, esperando al siguiente ascensor que los llevara de vuelta a su piso. —Oh, no creas que no lo noté—se jaló la camiseta, viéndome con una media sonrisa. Metió la mano en el ascensor y me quitó mi beanie—Me quedo con esto, hasta la próxima
Lee: ¡Oye!—me quejé, pero las puertas estaban a punto de chocar y él ya se había puesto mi gorro. Me acomodé el cabello y resoplé.
Karin: Ese chico me mata, te lo juro—suspiró, una vez que las puertas se cerraron y comenzamos a bajar.
Mar: Lo sé, a mí también.
Layla: Halum is real.
Me llevé una mano a mi rostro sonrojado.
Skye: #HalumIsReal fue TT toda la noche
Lee: ¿Tú también lo viste?—gemí.
Skye: Como todo el resto del planeta—rodó los ojos.
Layla: ¿Cómo están tus menciones, cariño? ¿Alguna amenaza de muerte?—bromeó, y ambas dejamos salir una carcajada.
Aquella era nuestra manera de preguntar por la reacción de los fans. Algunas veces eran tan protectoras, tan decididas a mantener a las “posibles novias” lejos de su ídolo que llegaban al punto de enviarte miles de mensajes que decían “Perra, deja a (inserte el nombre del chico en cuestión) en paz, es mío. Te mataré si no lo haces”. Era increíble. Esas masas de chicas que eran los fandom son quienes, secretamente, movían el mundo según sus deseos.
Lee: Ninguna, todavía. —le contesté, incluso sorprendiéndome a mí misma de que así fuera.
Mar: Vaya, eso es un progreso ¿no?
Layla: Todo es progreso, las relaciones entre “ídolos” normalmente no son aceptadas. Pero si ésta es TT, y por toda una noche, estamos hablando de millones de personas twitteando. Está más que claro que están de acuerdo. La suerte por fin está de tu lado, Lily— me dió un codazo.
Lee: Pero yo acaba de romper con...
Layla: Lo sé, lo sé, ¿cómo olvidarlo? —rodó los ojos. —Pero, linda, él está con la barbie miniatura, ¿por qué no puedes estar con alguien tú también?
Karin había resoplado divertida, cuando Layla había dicho “barbie-miniatura”, en lugar del nombre de la actual novia de Nathan en cuestión.
Skye: Si dices que no te gusta ese chico, tendré que golpearte— me apuntó con su dedo, amenazadora.
Karin: Nah. Yo diría que si le gusta. Y bastante. Hasta durmió con él, ¿Cuándo ha pasado eso antes?
XXX: ¿¡Dormiste con él!? —las otras tres chicas exclamaron al mismo tiempo, y clavaron sus ojos en mí, acusadoras.
Lee: En mi defensa, sólo dormí con él, no hice nada de lo que están pensando que hice
Layla: ¿Usaste condón?
Enrojecí.
Lee: ¡Layla!
Layla: Okay, okay, nada pasó, lo tengo. Pero, ¿Cómo demonios terminó Calum en tu habitación, quiero, decir, como terminó acostándose contigo? Oh mi dios, lo mires por donde lo mires, suena demasiado a sexo para mí
Lee: Layla—repetí. Ella alzó las manos en un gesto de rendición.
El ascensor llegó a la primera planta justo en ese momento, y allí nos esperaban nuestros guardaespaldas, y una masa gigantesca de fans.
Mar: Oh, vaya— exclamó, concordando con los pensamientos de todas.
Karin sacó su teléfono y comenzó a grabar. Esta chica debía de tener una colección de 1000 videos en su teléfono, cada vez que podía grababa uno. Se le estaba volviendo una adicción.
Las fans, detenidas por la seguridad del hotel, gritaban nuestros nombres y los flashes llovían sobre nosotras. Seppe nos autorizó quince minutos para ir con las fans. Salimos corriendo hacia la multitud de fans.
Lee: Hola, ¿cómo va todo?—les pregunté.
Fan 1: Todo bien, ¿cómo va todo para ti?—una chica rubia, bajita y un poquitín gruesa dijo. Sus ojos eran dos jades impresionantes en el rostro más tierno que había visto en toda mi vida.  
Fan 2: ¿Cómo está Calum?—otra fan saltó. Era una chica desaliñada y con unos anteojos que le daban un cierto aire de nerd. Me gustaba. Parecía ser del tipo de chica que no se preocupa por maquillaje y tacones y estaba bien con sus lentes.
Lee: ¿Eres de la 5sosfam?
Fan 2: Todas lo somos—la misma chica contestó, haciendo señas a otras tres chicas junto a ella.
Lee: ¿Quieres preguntárselo tú misma?—Saqué mi teléfono y marqué el número de Calum. Puse el altavoz.
Fan 1: Oh dios mío. —la fan rubia se cubrió la boca, sorprendida.
Calum: ¿Hola?— la voz ronca de Calum preguntó en el teléfono. Las fans gritaron.
Lee: Hola Cal— saludé—. Encontré a un grupo de chicas que querían hablar contigo
Calum: ¿Estoy en altavoz? Pude haber dicho algo ridículo, ¿estás consciente de eso, verdad?— gruñó.
Lee: Sip
Las fans rieron.
Calum: Vaya. Gracias por preocuparte por la reputación que tengo que mantener —resopló, sarcástico.
Lee: ¿Reputación? ¿Tú tienes de eso?
Calum: ¡Oye! ¡Por supuesto que la tengo!—se defendió él, y las chicas rieron.
Lee: ¿Reputación de qué?
Fan 3: Manly man (Hombre muy masculino, varonil.) —la tercera chica intervino. Su tez era del color del chocolate y su cabello era negro y rizado. Las facciones de su rostro eran realmente aniñadas para una chica que vestía como alguien de mi edad.
Calum: ¿Lo ves?—el chico se regodeó. —Gracias, a quien sea que me haya ayudado
Lee: Como sea, Manly-Man. —rodé los ojos. —Estas chicas querían hablar contigo
Fan 3: Hola, Cal—la morena saludó.
Calum: Hola, ¿qué tal todo?—dijo con voz galante. — ¿Eres tú la que me ayudó?
Lee: ¿“Ayudó”?— escupí con burla. — Perdóname, princesa rescatada de un castillo con dragones.
Fan 4: No puedo creer que esté hablando con Calum—otra chica farfulló, y yo le sonreí.
Fan 3: Si, fui yo— la morena sonrió.
Calum: ¿Cuál es tu nombre, mi chica salvadora?
La fan dió un grito ahogado, con una enorme sonrisa en su rostro y contestó:
Fan 3: Soy Charlim
Calum: Charlim, gracias, bebé— Sabía que sonreía, incluso aunque no lo estuviese viendo, y Charlim casi tuvo un colapso cuando Calum pronunció “bebé”. —Dame a segundo. ¡Luke, Mike! ¡Ashton, sal del maldito baño!
Charlim: ¿Está llamando a...?—inquirió con voz queda.
Escuchamos unas charlas apresuradas (mi ingles era avanzado, pero me era imposible entender conversaciones en susurros y a toda velocidad en el teléfono) y luego otra voz distinta habló.
Michael: ¿Hola? —la voz alta y con un tono encantador de Michael, se introdujo a la charla.
Las fans gritaron.
Lee: Shhh— las calmé haciendo un gesto con la mano. —No podremos escuchar el teléfono —las chicas se calmaron, y más y más comenzaron a apiñarse para escuchar.
Fan 2: Hola— la chica de las gafas dijo, lagrimas de emoción formándose en sus ojos.
Luke: ¿Están en Crowne?— Luke también apareció en la conversación.
Lee: ¿Tú qué crees?— resoplé.
Luke: Vaya. Hola, todo el mundo.
Las fans tuvieron unos minutos para hablar con los chicos, en los que ellos rieron y bromearon con ellas, y luego, hicieron una lista con todos sus nombres que yo  tendría que subir a twitter. Le tomé una foto al papel que tenía la lista, una foto con el montón de fans (que obligué a Carlos a sacar) y escribí rápidamente:
@HaileyUnKlassic: “Toda esta gente vino hasta Crowne Plaza a decir hola :) Gran lista debo decir @5SOS”
Las chicas agradecieron mi tweet, emocionadas, y luego Seppe me sacó de allí. Mientras, los demás guardias sacaban a las otras chicas.
Subimos a una camioneta negra, que nos llevaría hasta un aeropuerto en Sydney y las cuatro chicas continuaron con el interrogatorio sobre Calum. Este iba a ser un largo viaje.

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