Diario de Ana Rivera

Temblando

Subia las escaleras cuando el suelo empezo a moverse con fuerza.

Me sujete como pude e intente llegar al taller para ver que ocurria pero no lo logre.

No podia moverme.

Y a la vez todo se movia.

Me paralize.

Cerre lo ojos y espere a que cesara el temblor.

Estaba aterrada.

Mis piernas comenzaron a temblar con el suelo.

Me cai sobre un peldaño y me rendi.

Solo me quedaba esperar

No se cuanto tiempo estuve ahi tirada pero poco a poco...

Paró.

Abri los ojos.

Me levanté con dificultad, pero lo conseguí.

Me dirigi despacio al taller, en busca de información, y por suerte estaban todos bien, igual de consternados que yo.

Paula se acercó a la radio, la encendió y a los pocos minutos recibimos noticias:

"Acabamos de presenciar un  terrible suceso en la ciudad de Madrid, el suelo a comenzado a temblar en diversos puntos del centro, conectamos con Don Mateo Ruiz, director de la famosa revista de Ecos de Sociedad para que nos informe, Don Mateo adelante.

-Nuestros contactos de la central sismica de la ciudad nos han confirmado que ha sido un leve terremoto pero que no tenemos nada de que preocuparnos, no hay indicios de que vaya a volver a producirse.

-Muchas gracias Don Mateo, aqui Fernando Ulloa desde Radio Intercontinental"

-No es posible, ¿un terremoto aqui?

-Manten la calma Paula ya han dicho que no va a volver a ocurrir por el momento.

-Fiate tu de lo que dicen en la radio, Maria.

-Pues yo no me fio de la radio pero si de mi padre, y se que sus contactos son fiables.-mi padre era pesado pero no tonto.

-Estoy de acuerdo con Laura, Don Mateo no mentiria en un tema asi.

- Miguel ¿estas bien?

-Perfectamente Maria ¿y tu?

- Bien, ¿Ha habido algún daño?

- No que yo sepa.

- ¿Que ha pasado?-la señorita Otegui, pronto señora de Márquez entro en el taller.

- No se preocupe señorita Cristina han informado en la radio de que solo ha sido un leve terremoto y...

- ¿Y usted es...?

- Miguel Infantes, dependiente y amigo de su prometido.

- No se preocupe han informado de que no volvera a ocurrir ¿esta usted bien?

- Si, muchas gracias. Tomense la tarde libre, con lo que ha pasado les vendra bien airearse.

- Gracias señorita Cristina.-dijimos a coro como si estuviera planeado.

- ¿Y Jorge?¿Donde esta mi hermano?