Conquistando a un Nerd

Capítulo 20

Lo único que mi mente pensaba es, ups, creo que me he metido en un lío. En este momento me sentía, como cuando era pequeña y tirabas la leche por la mesa y aunque tu madre estaba al lado y te había visto tu decías que no habías sido tú. Pues yo hice eso mismo en ese momento, me fui lentamente, como si no fuese conmigo la cosa.

Pero no duro mucho mi gran estrategia, ya que sentí una mano en mi brazo.

- ¿Pero tu que te crees que soy tonto?-dijo Jonathan enfadado- Porque te des la vuelta y hagas que eso no va contigo, no va a hacer que se me pase el enfado.

- ¿Yo? Hacer como si no fuese conmigo, eso es una ¡Falacia!

-Venga, vuelve a clase- dijo serio

- Y ¿tu?, si estás aquí buscándome tu también te estás saltando las clases- le mire con una ceja alzada.

-eh, bueno...- se rascó la nuca en señal de nerviosismo

A lo que yo aproveché para salir corriendo, malditas sandalias, lo único que hacen es resbalarse, a este paso voy a caer.

Pero mi carrera duró pocos instantes, porque aunque estaba en buena forma por el equipo de animadoras, Jonathan era mucho más rápido que yo, Por lo que en menos de un segundo me encontraba encima de su hombro.

-Maldito neandertal, ¿pero quieres que se me rompan las sandalias¿, o peor ¿Una uña? A una señorita se la coge con sutiliza, normal que estés soltero.- dije a gritos

Pero él hizo caso omiso a mis plegarias, por lo que me dediqué a tocarle su perfecto culo. La verdad es que lo tiene casi mejor que el mio, casi.

Al poco rato, ya estábamos en de nuevo en el instituto. Cuando al fin me bajó yo me quede de brazos cruzados y le miré mal, ¿sabéis esas miradas que parece que matan? pues esa es la que yo le estaba dedicando a Jonathan.

- ¿Dónde tienes clase?- me dijo

- No se- la verdad es que no me acordaba de mi horario.

- No me intentes provocar Laila

- Que no me acuerdo- grité.

- No te preocupes me enteraré de que tienes- dijo tranquilamente a la vez que sacaba el móvil del bolsillo.

¿A quién demonios estaría llamando?, ahora todos debería estar en clase, creo. Yo también saqué mi móvil y vi que era la hora del almuerzo.

Además tenía un par de mensajes, que no respondí, uno era de mi hermana recordando que me vendría buscar después, uno de Laura, uno de un chico que quería ''conocerme'', ¿pero alguien no me conoce aún?

- Ya se que tienes ahora, pequeña- me dijo Jonathan- Tienes horas libres

Lo miré con cara de interrogante.

- Tus tres últimas horas son libres, ya que tus profesores faltan hoy.

- Osea- puse una mano en mi cadera- ¿Qué has venido a buscarme a la cafetería, perdiendo tu clase, para buscarme a mí? y yo, ¿ahora no tengo clase?

- Exactamente- se rascó detrás del cuello

Siempre que está nervioso hace eso.

No le respondí solo me dí la vuelta, me iría a casa, así mi hermana no me obligaría a ir a ballet, ya que le diría que se me olvidó decirle que al final no tuve clase las últimas horas del día.

- ¿Me vas a dejar aquí solo? ¿Cuándo me he saltado mis clases, para venir a buscarte?- dijo Jonathan

- Sí, es tu culpa si decidiste saltarte las clases, no es mi problema.

Me fui caminando hasta casa. En el camino pensé mi estupendo plan, contestaría al chico que quiere ''conocerme'' y le invitaría a casa. A estas horas, en teoría no habría nadie.

Luego lo echaría a patadas, y me dormiría tras haber ejercitado...

Creo que lo que pasó las siguientes horas no os interesa, o ¿sí? pequeños morbosos. Solo diré ay madre mía, era muy grande. Creo que lo conoceré más veces.

Aunque también debía acercarme al Nerd, hoy no había avanzado mucho. Incluso creo que ahora me odia un poco más. Aunque creo que ya es imposible.

Pero ahora mismo, solo quiero dormir, estoy muy cansada. Aunque, de repente, sonó mi móvil.

-¿Sí?

- ¿Dónde estás enana?- dijo mi hermana por la otra línea

- Ay lo siento vieja asquerosa, estoy en casa, se me olvidó decirte que no tenía clase las últimas horas- sonreí con malicia- siento no poder ir a ballet.

- Por esta vez te salvas- dijo- Pero mañana no te libras, pequeña enana. Tienes suerte de que vaya tarde, por estar esperándote aquí como una tonta

- Es que lo eres hermanita, que te lo pases bien.

Podía volver a mi plan de dormir un siesta.