Amor entre Libros (Editando)

Capítulo 14

Al parecer a mi cerebro le gustaba torturarme, porque la imagen de Nicolas besándose con esa chica no se quitaba de mi mente. 

Después de ver eso había quedado algo aturdida, pero aun así continué buscando a Rita. 

Ya había pasado por la cocina, la sala principal, el porche y la terraza. Sólo me faltaban el segundo piso y el jardín por registrar.  

-Hola preciosa- dijo un desconocido acercándose a mí. Se había pasado con los tragos, porque apestaba a vodka- Linda fiesta ¿verdad?

Retrocedí unos pasos. Logré murmurar un "voy al baño" y salí corriendo lo más lejos que pude de él. Entre menos contacto tuviera con esa gente, mejor. 

Me abrí paso a empujones, hasta que llegué al jardín. Los árboles tenían faroles chinos colgados, de hecho, la decoración del lugar no estaba nada mal. Las aguas de la piscina en el centro del lugar, cambiaban de color cada cierto tiempo. El lugar se veía hermoso, lástima las personas.

Recorrí el lugar con una mirada, fijándome en cada persona. No puse mucha atención a la gente que nadaba por las aguas de colores, porque me parecía muy improbable que Rita estuviera metida ahí. 

"Rita odia las piscinas, pero sólo por si acaso echaré un vistazo".

Di una mirada rápida. De repente. mis ojos se fijaron en una melena negra que estaba en la esquina izquierda de la piscina. Y en efecto, era Rita... en un bikini, besándose con un chico. Tony. 

"Si vuelvo a ver a otra pareja besándose voy a vomitar".

Mientras me acercaba hacía ellos pensaba:

"Bien Erin, concéntrate. Vas a sacar sea como sea a tu amiga de ahí. Nada de contemplaciones. Rita ya tuvo suficiente diversión por hoy".

Mi corazón palpitaba mas fuerte con cada paso que daba.No sabía por qué estaba tan nerviosa.

Llegué a la orilla de la piscina y me paré justo en frente de ellos. Al parecer no se dieron cuenta, porque se seguían besando. 

-Ejem- tocí.

Nada. No pararon. 

-EJEM- repetí. 

Al fin Rita apartó su mirada de Tony y me miró un poco disgustada. Creo que no le había gustado que yo los hubiera  interrumpido. 

-Rita, nos  vamos a casa. 

Ésta se limitó a mantener sus ojos clavados en los míos. No estaba segura si Rita había captado lo que acababa de decir, así que dije con voz firme:

-Nos vamos, sal de ahí.

-No molestes rara. La estábamos pasando bien- dijo Tony, al cual no le había dirigido la mirada desde que había comenzado la conversación- Es mas ¿por qué no te nos unes? Tranquila, haremos como si no estuvieras. 

Ni le respondí. En cambio, volteé a ver a Rita y moví la cabeza, diciéndole que saliera de una buena vez. La gente comenzaba a dirigir sus miradas hacía nosotros. La sensación de las miradas había vuelto... la había olvidado con la llegada de Nicolas, pero ahora él... 

Centré mis pensamientos, estaba ahí para sacar a mi amiga. 

-Hey miren-dijo una voz a mis espaldas- ¿Esa no es la chica rara que va a la otra clase? ¿Qué está haciendo aquí?

--Deberían de poner un cartel en la entrada que diga: "prohibida la entrada a escoria." 

Yo no les prestaba atención, estaba pensando en formas de sacar a una adolescente borracha de una piscina. 

Le extendí la mano a Rita, no sé por qué pensaba que la tomaría, pero tenía que hacer algo. Era mejor  que quedarse parada esperando a que hiciera algo. Rita apartó sus ojos de mí y los posó en mi mano. Un brillo en sus ojos me decía que quería tomarla y salir de ahí. Pero no tuvo tiempo de hacerlo, porque la mano de Tony había sujetado mi muñeca y había tirado de ella. 

Caí al agua, por poco y aplasto a Rita. Oía las risas de todos amortiguadas por el agua. Salí a la superficie inhalando grandes bocanadas de agua. 

-¿Sabes qué Rita? Que la pases bien con estos cretinos. Yo me largo- grité.

-¡Bien!- respondió- No te necesito. 

Al salir de la piscina me sorprendió una ráfaga de viento frío. Mis dientes empezaron a castañear.  Todos se reían a mi alrededor, con las miradas fijas en mi. Sacaron sus teléfonos y me empezaron a tomar fotos. Vi que mi camisa y  jeans estaban empapados. 

No traté de bajar la mirada en las fotos, sabía que si lo hacía iba a ser peor. Caminé con la cabeza en alto, como lo hacían los héroes de mis novelas. No me fijé en los rostros de la gente, ademas los flashs no me lo permitían. 

Pensé en Nicolas un segundo. 

"¿Y si me está viendo en este momento?"

Pero aparté ese pensamiento. Ya no me iba a torturar mas. Estaba a punto de salir por la puerta principal, cuando alguien se puso en frente de mí, obstruyendome el paso. 

-¿Y a ti quién te invitó rara? No recuerdo haberlo hecho- dijo Laura cruzándose de brazos.

-Tranquila, ya me iba- dije tratando de apartarla y salir de ese lugar, pero dos pares de brazos me sujetaron por los codos. 

-Oh no querida, no creas que vas a salir. Aun no ha comenzado la diversión, quédate un poco más con nosotros. 

-¡Suéltenme!

Forcejeé, pero los chicos que me sujetaban ni se movieron. 

-Laura, detén esto- oí que alguien decía. 

"Nicolas" pensé en lo mas profundo de mi ser.

Pero no era él. Era otro chico. Vestía una camiseta verde con bermudas caquis, era  alto, con el pelo castaño y pecas. Se paró en frente de Laura. 

-Ya suéltenla- le dijo a los chicos que me tenían cautiva. 

Éstos dudaron un segundo, pero liberaron mis brazos. 

-Buuu- empezaban a abuchear las voces. 

-Mike vino a arruinar la fiesta. 

El chico les arrojó una mirada que silenció a todos, luego me tomó por los hombros y me acompañó hasta la salida, dejando a toda esa gente atrás. 

Ya afuera, lejos de la vista de todos, me aparté bruscamente de ese tipo. 

-¿Cómo te llamas? ¿Te conozco?- pregunté mientras lo devoraba con miradas desconfiadas. 

-De nada, si, también fue un placer conocerte- dijo riéndose. 

Cuando vio que no estaba con humor para bromas se apresuró a decir:

-Soy Mike, el hermano mayor de Laura. Gusto en conocerte, chica rara- dijo esto último con un brillo de curiosidad en los ojos.  

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He vueltoooooo

No sé ustedes, pero yo ya amo a Mike.

Me había tomado unas vacaciones... PERO HE VUELTO *risa malévola*

¿Qué creen que pasará con Nicolas? ¿Lo odian ya?

Nos vemos hasta el otro fin de semana.