LA SUMA DE TODOS LOS MIEDOS

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Un destello de luz deslumbro mi visión, al despertarme, me veía encadenado a una pared, mis ataduras eran de acero y no seria fácil romperlas, en eso, enfrente de mi, del otro lado de los barrotes se encontraba un guardia el cual me vigilaba de que no hiciese ningún intento de fuga.

No entendía que estaba pasando, que había hecho para estar en ese lugar, las preguntas me invadieron de nuevo.

-¿Podrías quedarte quieto?, -me dijo prepotente mente.

-¿Quien eres tu para darme ordenes?- le respondí desafiante  

-Soy Flash, Flash Sentry y he salvado a Equestria docenas de veces- respondió.

Sinceramente este sujeto no era mas que un fanfarrón debilucho que aparentaba ser una suerte de guardia, sea quien sea, de cierta manera tenia autoridad sobre mi, ademas mi cuerno tenia una armadura protectora que me impedía usar la magia, estaba desarmado e indefenso, pero eso no hizo que cambiara de carácter, me mostré serio y frió ante el por el largo rato que estuvimos intercambiando un desprecio mutuo.

En eso llego el momento de que me liberaran, pero o fue así, solo abrieron la puerta y me hicieron caminar encadenado hasta el salón real, al llegar me trague una horrible sorpresa, estaban Twilight y las demás junto a las princesas y un semental que tenia pinta de general del ejercito, de crin azul y pelaje blanco, me postraron ante ellos.

-Twilight ¿que significa esto?- pregunte confundido

-Cállate, no tienes derecho a hablarle a mi hermana- me respondió el pony de crin azul 

Estaba sin duda alguna fuera de si, no comprendía lo que pasaba y no sabia quienes eran muchos de los ponis que se encontraban presentes.

-¿Quien eres tu?- pregunto Celestia con una prepotencia enorme; yo me mantuve en silencio, sin decir ni una palabra.

-¿Por que no respondes?- me dijo el presunto hermano de Twilight.

 -Acaso debería- dije fríamente

-Si, así es, necesitamos que nos digas quien eres.

-¿Para que, para encerrarme de nuevo?

-Para saber que secretos escondes, tu mas que nadie sabes que fue la cosa que ataco Ponyville hace unas horas atrás

-Necesitamos que nos digas apara así poder parar a esa cosa- dijo Twilight con su peculiar y amable voz 

Al escuchar tal estupidez, me reí, era una risa de histeria absoluta, no sabia si llorar o gritar, solo reí como un maldito demente, la gracia de ese comentario me causo pena, los demás se me quedaron viendo petrificados, a excepción de las princesas quienes se mantenían firmes como siempre.

-Ya hemos lidiado con locos, tu no eres la excepción- me dijo Celestia 

-¿Tu crees que estoy loco?- le respondí aun dando risitas

-No creemos que lo estés, oficialmente lo estas- respondió su hermana Luna

-Es pasajero.

-Dinos por que viniste aquí- dijo Twilight enfadada

-Wow, yo creí que eras mas carismática Twilight, supongo que eso es normal en los nerds.

Al escuchar eso, ella se casi se me abalanza encima, su mirada reflejaba una ira intensa hacia mi, yo solo la veía sonriendo y confiado.

-No lo volveremos a repetir, quien eres- dijo el pony de crin azul.

-Aiden Fireblood, 17 de agosto del 1025, tengo 992 años de edad- todos al oír se quedaron mudos y dudosos.

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