20.10.2019
SAMANTHA
Esta oscuro, sólo se escucha mi respiración, y unos gruñidos demasiado cerca.
De repente veo una de esas cosas acercarse y hago lo primero que se me ocurre: esconderme. Es de cobarde, sí, pero ya se me han acabado las balas, a demás, no es que sepa disparar muy bien, por no decir que no sé.
Los siento muy cerca, hasta que oigo unos disparos y todo vuelve a la " tranquilidad ".
- Venga, ya puedes salir- me dice una voz un tanto grave- venga, sé que estas ahí.
Cuando salgo, lo que la oscuridad de la noche me deja ver es un chico de metro 80 más o menos, con el pelo marrón medio oscuro y unos ojos azul intensos que me atraviesan. Es la primera vez que veo a una persona normal en meses.
-Por favor no me hagas daño- digo casi en un susurro.
- Si me he cargado a estos cuatro, creo que no es para hacerte daño- me explica con tono sárcastico- soy Blake, ella es Emily, mi novia y el es Brian.
-H-hola yo soy Samantha, pero pueden llamarme Sam- la verdad es que no me había percatado de que estaban ellos dos.
- Y tú que pasa ¿ no tienes una pistola en medio de un apocalipsis Zombie? ¿o qué?
- S-si, sólo que no me queda munición, y a demás no se disparar- bajo la cabeza.
- Bueno tranquila, si quieres te podemos enseñar a disparar- dice mirándome con ojos de infarto.
-V-vale- le sonrió, espero que no note lo nerviosa que estoy, la verdad es que no se porque lo estoy, lo acabo de conocer, aunque siempre me ha dado vergüenza hablar con gente que no esta en mi entorno.
- Venga vamos, te llevaremos a donde nos alojamos y mañana temprano uno de nosotros te enseñará a disparar- me indica ese tal Blake- pero como intentes hacer algo contra nosotros, yo mismo acabaré contigo- me advirtio dandose la vuelta.
Asiento, cojo mi mochila y voy tras ellos.