BLAKE
Emily aparece por la puerta, y parece que está furiosa, pero no es lo que parece, por Dios, nunca lo es.
- Hijo de p***, c*br*n de m**rd*, sabia que era por ella!!!!!-nunca había visto a Emily tan enfadada, parece que va a echar espumarajos por la boca.
- No es lo que parece Emily, salgamos fuera a hablar por favor- aunque que intenta parecer tranquila, sé que esta muerta de miedo, yo soy lo único que le queda, y sé que no soportaría perder a la única persona que le queda, y la única que sigue atandola en cierto modo a su antigua vida.
- Si, necesito aire- que exajerada es, me pregunto si algun día dejara de ser tan melotramática. Cuando salimos se queda con los brazos cruzados mirandome.
-Te escucho.
- Lo que te dije ayer, no es que quiera dejarte, lo que quería decirte era sólo que no estuvieras siempre encima de mí.
- No lo estas mejorando.
- Emily, llevamos dos años juntos, te quiero, y eso no va a cambiar de un día a otro porque aparezca un chica nueva en nuestras vidas.
-¿De verdad?- se destensa un poco.
- De verdad. Ven aquí- digo poniendo las manos en sus mejillas y besandola.
(...)
Voy a salir para afuera, necesito aire y estirar las piernas.
Cuando voy a abrir la puerta Sam lo hace desde fuera, y nos quedamos MUY cerca.
- Ehhh hola, ya estas mejor!, ¿sí? vale, me alegro, adiós- rompe ella el silencio nerviosa, se pone tan linda cuando está así, me recuerda a mí hermana cuando era pequeña, vaalee momento cursi desactivadoo.
Antes de que se pueda ir le agarro la mano y ella me mira.
- Espera, quiero enseñarte algo, tú solo cierra los ojos.
Después de un rato andando llegamos.
- Ya puedes abrir los ojos- ella los abre y yo suelto su mano.
- Oh madre mia, pense que nunca iba a ver nada parecido otra vez.
- Es mi lugar especial, sé que suena cursi pero cuando encontramos esa casa, un día vine aquí y lo arregle todo- siento que me sonrojo y ella sonrie.
- Es precioso, parece salido de un cuento de hadas- sonrio y le pongo una flor en la trenza que lleva hoy.
Nos sentamos debajo de un árbol grande, verde y frondoso y yo la miro mientras está observandolo todo hasta que aterriza su mirada en mí.
- ¿Qué?- me pregunta sonriendo.
- Nada- sonrio cuando se sonroja.
Llegamos a casa, cuando entramos no hay nadie, llamamos a Emily y la buscamos por todas partes, pero nadie responde a nuestra llamada.
-Yo miro arriba y tú busca por aquí- me indica Sam mirando extrañada por todas partes y subiendo las escaleras de dos en dos gritando su nombre. Yo miro en la cocina, el salón, el baño y ni rastro. De pronto Sam me llama gritando mi nombre.
- ¡¡¡Blakeeeee!!! ¡¡¡¡ BLAKE !!! SUBE CORRE
- ¿ Qué pasa ?- pregunto haciendo el mismo recorrido que ella por las escaleras- ¿dónde demonios estas?
- Aquí, en su habitación.
Me dirijo hacia allí y veo a Sam con un papel en la mano.
Empieza a leerlo:
HOLA, CUANDO ESTÉIS LEYENDO ESTO SUPONGO QUE ESTARÉ
MUY LEJOS, ESPERO QUE VIVAIS FELICES, Y QUE QUEDE CLARO ME VOY POR QUE YO QUIERO NO PARA DEJAROS ENROLLAROS PAZ.
EMILY
- No me lo puedo creer, otra vez no.
- ¿ Otra vez ?- me pregunta Sam confudida.
- Si, hace tres años se fugo y dejo una carta.
- ¿¡ Qué !? ¿ y que quiere decir eso?
- La última vez que se quería suicidar.
Me llevo una mano a la cabeza y salgo corriendo, Sam viene pisandome los talone. Otra vez no. Creí que ya había quedado todo claro.
