No puede ser un error: Pt. 6

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Abrí la puerta del apartamento y entré, no me había dado cuenta que iba escurriendo agua por los pantalones y mi chaqueta, tanto como para inundar el recibidor. No me había dado cuenta que hasta había entrado sin quitarme las botas, que también estaban empapadas por la torrencial lluvia que había empezado a caer después de terminar de dar mis declaraciones en la policía. No me había dado cuenta que ya eran pasada las 12 de la noche cuando por fin había llegado a casa. No me había dado cuenta de nada por lo que había pasado, hasta que cerré la puerta y lance la bolsa llena de cebollín hacia un lado de la sala.

¿Qué rayos había ocurrido? En un momento estaba por fin confesando mis sentimientos a aquella chica de la cual estaba guindado desde hace un año, hasta logre por fin probar esos labios por los que tenía tanta curiosidad... y de un instante a otro estaba sentado en la jefatura, dando declaraciones, jurándole a un detective que yo no era un ladrón o asesino que aprovechaba la lluvia para acechar a las personas en el río Han.

Me dejé caer sobre el mueble con la vista clavada en el techo, a un lado de mi descansaba la bolsa. Dirigí mi mirada del techo hacia las ramas de cebollín que sobre salían de esta. Acerque mi mano y tome una de las Hojas.

—¿Qué ocurrió contigo... Lee Ma Rin?—     Susurre para mí mismo. 

La frustración apretaba mi pecho, no entendía nada y lo peor es que sentía como si yo tuviera la culpa ¿Tiene algún sentido esta situación?

Me incorporé y empecé a deshacerme de algunas prendas empapadas; Chaqueta, botas y medias, dejándolas caer al lado de la esquina del mueble. Me levanté y me dirigí directo al baño para intentar aclarar mis pensamientos con una ducha caliente, pero no sirvió de nada, los recuerdos de Ma Rin, su sonrisa durante el día, su risa, su alegría al estar conmigo, pasaban por mi mente a cada momento, pero todo fue ahogado por el amargo instante en que le confesé mis sentimientos o más bien, cuando comenzó a gritar que nuestro encuentro había sido un error.

¿A qué se refería? Si un poco antes de eso ella había aceptado que la tomara entre mis brazos... No le encontraba ni pies y cabeza a su reacción.

Salí del baño ya vestido con una franela negra y pantalón corto, removí mi cabello con una mano para disminuir su humedad, mientras la otra buscaba en la nevera algo de tomar, opte por el agua, no tenía ganas de nada más. Me serví y me senté con el bazo en el mesón de la cocina, tratando de reflexionar bien lo que había ocurrido.

— Oh ¿Hyung? Me asustaste, pensé que YoonGi Hyung andaba de sonámbulo de nuevo— Me sorprendí ante la voz de mi compañero de equipo, nuestro pequeño maknae Jeon Jungkook.

—Hey Jk... — Lo saludé sin mucho ánimo de responder el "por qué" me encontraba despierto a esa hora de la madrugada.

Vi como el menor abría la nevera y se servía un vaso de jugo, sin invitación previa se terminó sentando al frente de mí.

—¿Dónde estabas? V andaba como loco buscando su chaqueta, dijo que la había dejado en tu closet— Dijo este mientras sorbía un poco de jugo de su vaso.

—Ah, esta mañana la tome por accidente. No es mi culpa que deje sus cosas mezcladas entre las mías— Tomé un poco más de agua.

Así era V, otro compañero de mi grupo, dos años más grande que nuestro maknae, a pesar de eso JungKook parecía estar mejor ubicado en este planeta que él.

—La Ajumma (Señora) lo va a despedir si se sigue saltando el trabajo—Comente sin mucho interés. JungKook rió ligeramente y dejo mostrar su blanca hilera de dientes.

Wings Chronicles [BTS/방탄소년단]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora