Hoy

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Hoy es un día como otro cualquiera, en el que aparece tu nombre y le hago muecas de indiferencia.

"Quieres verle y lo sabes", me grita mi conciencia, "no puedes, te destruye", me repite mi mente siendo de ello consciente.

"Se consecuente o te pasará factura", pero al llegar no pude evitar mirarle, es algo irrefrenable, sé que siento algo por él, pero no sé que es, estuve a centímetros de ese hombre, tan excitantemente interesante, tan cálidamente distante, porque sabe que si nos acercamos demasiado nos descontrolaremos y eso no nos conviene a ninguno de los dos.

Nuestros gentiles besos desenfocados sin significados pero con sentimientos, distraídamente acabaron enlazados para verse frustrados y con fuerza superados.

Trato de no recordar momentos del pasado que me invaden y me hacen esclava, donde nada empieza, donde todo acaba, donde me he quedado clavada y no sé como salir.

Quisiera huir, pero no sabría a donde, quisiera dejar de sentir pero estaría sola entonces, quisiera dejar de fingir que todo está bien, cuando solo se me da bien hundirme y refugiarme entre sábanas, y dormirme pensándole, sonándole, admirándole y desesperándome por no conseguir olvidarle.

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