Por una vez (Sevmione)

Capítulo 5

CAPÍTULO 5

HERMIONE

¿Cómo pudo atreverse a tanto? ¿Cómo lastimarme y jugar con mis sentimientos de esa manera? Se supone que era su mujer, su esposa, compañera, su amiga, no era una baratija que se consiguió en cualquier lado, lo apoye en todo y lo seguí hasta el final, no merecía tanto desprecio y tantas mentiras, sino quería hijos lo hubiera comprendido y aceptado, como la vil idiota que siempre fui a su lado, pero no, él decidió mejor jugar un poco más conmigo, sé que ahora todo ha muerto para mí, todo lo que sentí ahora no es más que parte de un pasado, uno del que ahora estoy más que dispuesta a olvidar.

Aunque él se arrepintiera y me pidiera perdón, nada volvería a ser lo mismo, Severus ha roto todo lo que nos llevó años formar como pareja, rompió sueños, y esa confianza inmensa que le tuve desde siempre, ahora no queda más que este enorme resentimiento y deseo inmenso de olvidar quien fue en mi vida, quiero olvidarlo todo.

Mi primera misión definitivamente es conseguir un empleo, algo que me impida verlo, ahora si va en serio Severus, nunca me volverás a ver en tu vida.

Llegué al departamento que compré y arroje mi bolso con furia, mientras mi querido hermano salía de la cocina comiéndose no se qué cosa, leía en su mirada la cara de interrogación y lo fulminé con mi obvia respuesta.

—No sé porque creo que algo tuvo que ver el inútil de tu ex marido en esa mirada llena de odio.

—Pues fíjate que sí hermanito, – respondí desplomándome en el sillón mientras él me acompañaba –. Pero es la última vez que planeo hablar de ese... ponle el calificativo que desees, simplemente no pienso detener mi vida por él... ¿y tú que carajos haces aquí aún?

—Mi papá quiere verte... dice que deberías regresar a casa.

—No Jack... necesito estar a solas un tiempo, estaré bien, lo prometo. – Sus brazos me estrecharon y por primera vez no deseaba soltarme en llanto, sino que ese dolor me hizo aún más fuerte, y supe que no volvería a caer.

SS&HG

—¿Algo diferente cómo? – me preguntaba Ginny en la cafetería que estaba cerca de mi departamento, removía mi café hasta el punto de enfriarlo sin haberlo probado.

—Algo diferente Ginny, quiero un empleo que me distraiga, no me importa si no está bien pagado, o no es para lo que me he preparado, quiero algo nuevo y sí algo que no esté en el Ministerio, estoy enojada pero muy herida, necesito olvidarlo, realmente es lo que necesito en este momento.

—No puedo creer que él haya actuado así... debe existir algo Hermione.

—Si claro que existe y se llama ser un completo hijo de puta... ahora que te parece si evitamos los detalles, y me ayudas a conseguir un empleo, me estoy quedando en ceros.

—Por supuesto que si... supongo que tampoco quieres un empleo en San Mungo – mi mirada fue más que clara para que ella se pusiera a pensar en lo que realmente necesitaba y deseaba. – ¿Has considerado irte al extranjero? Hay muchas opciones ahí.

—¿Y que el idiota crea que estoy huyendo?, no gracias.

—Vale... en el Callejón Diagon... no creo que ahí no, él va a surtir los ingredientes – caí rendida frente a la mesa, derrotada en que tendría que verlo y correr el riesgo de que me encerraran por practicar una maldición imperdonable, aún me quedaba la opción de extranjero...