Capítulo 4

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CAPÍTULO 4

SEVERUS SNAPE

De nuevo en la pocilga de mi padre, y hasta la maldita Hilandera tenía decoraciones de Hermione, frustrado de estar en el laboratorio me fui a tomar una copa a mi despacho, llevaba semanas en la maldita poción, creí que podía lograrlo pero quizás Cindy tenía razón, y no había nada que arreglar, la botella fue disminuyendo poco a poco, hasta estar completamente ebrio, la extrañaba, la necesitaba tanto, ¿cuántas noches no estuve a punto de ir a la casa y rogarle que me dejara quedar? ¿Suplicarle una segunda oportunidad? Pero me detenía su dolor, sus sueños, y todo lo que yo significaba para ella: frustración.

Su padre me lo dijo, me exigió que me alejara de ella, que podía ser su padre, pero no, tuve que insistir en no dejarla, me aferré a lo único bueno que había tenido en la vida, no quise renunciar a ella y no me arrepiento, la amaba, y mucho...

...

- Hermione ¿qué haces aquí? – había llegado corriendo con sus zapatos de tacón en la mano, un vestido largo color rojo ceñido a su cuerpo, el peinado había quedado deshecho hacia un lado.

Después de la graduación nos mostramos como pareja frente a todos, maestros, padres, amigos, Potter sonrió puesto que ya nos había visto en una ocasión besándonos en el aula, sus padres estallaron, Jack me golpeó y dijeron demasiadas verdades, los docentes de Hogwarts no se metieron, solo era su familia contra lo nuestro pero con eso bastaba. Sus ojos tristes me mataron pero no quería darle a elegir.

- Lo que dijo mi padre es...

- Es verdad – la interrumpí –. Te doblo la edad y...

- Ya habíamos hablado de eso... te amo... y tu a mí... sabíamos que algo así pasaría pero prometiste no rendirte, juraste que lucharías por mí, por nuestros sueños... ¿cumplirás esa promesa? – en su mirada se veía el llanto que estaba guardando, no me moví... y ella se acercó tanto a mí, que temía lo que fuera a pasar – ¿Severus?

- ¿Estás segura de lo que me estas pidiendo?

- Si... entre ellos y tu, te elijo a ti – me dijo aferrándose a mi pecho.

- No digas eso, no quiero separarte de tu familia.

- Ellos me están dando a elegir... quiero estar contigo, llévame a tu casa – era la petición mas tentadora, y sabía que no iba a poder negarme.

- Una vez que te lleve... no pienso dejarte ir nunca.

- Eso es lo que quiero – la besé y la dejé en mi despacho, para encontrarme con su padre que la esperaba en el vestíbulo.

- Hermione se viene conmigo – mis palabras fueron cortas, precisas y sin pedirle permiso, puesto que solo les estaba avisando.

- ¿No le quedó claro lo que le dije señor Snape?

- Si señor Granger, pero ella también dijo lo que quiere, y ha ido a recordármelo, no pienso renunciar a ella, ni ella a mí, la cuidaré bien, se viene conmigo y no hay nada más de que hablar.

- No va a llevarse a mi hermana – me gritó Jack que era ocho años mayor que Hermione.

- Ella quiere irse conmigo, ustedes no van a impedir que seamos felices – terminé el dialogo largándome de ahí, al llegar Hermione estaba temblando en el sillón de mi despacho, corrió a abrazarme mientras intentaba consolarla – Tranquila, nadie va a separarnos, te lo prometí aquel día y así será... siempre seremos tu y yo, créeme.

Por una vez (Sevmione)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora