Cautivo

695 33 3
                                    


Te quiero, y me condeno. Soy cautivo, soy preso. Preso de este amor insoportable, preso de este sentimiento terco. De mi maldita costumbre de amarte, de mi histeria al recordarte. De la estúpida idea que mis versos puedan ser importantes, de la insensata forma de quererte sin importarme. De mi absurdo, de mis poemas dulces e impotentes que he escrito por amarte. De mis noches de insomnios, de mis inocentes esperanzas de que algún día puedas valorarme. 

Te quiero y me condeno en esta cautividad. A esta cadena de jamás poder dejar de amar. Encadenado esta mi corazón a ti, preso de tus ojos, de tus sonrisas, de mis insoportables ganas de cuidarte.

Y si el destino lo quiso así, yo me conformo con quererte, con amarte, porque para mí verte feliz es la única manera de ser feliz.

Fuiste poesíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora