Divina tentación (sasusaku)

Revelación.

— Querida ¿te apetece comer? - hablo Karin.

— No gracias Madrina, comeré cuando mi Padrino lo haga.

Sasuke le guiño un ojo — En un momento bajamos Karin, debo recompensar el tiempo perdido con Sakura.

La pelirrosa sonrió y movió la cabeza, al retirarse Karin los dos desesperados se volvieron a besar irrefrenables con un beso se decían y comunicaban lo que las palabras no podían decir, se detuvieron y Sakura miro con los ojos brillantes al Uchiha.

— Te amo. - las palabras de Sakura resonaron en los oídos de Sasuke.

Su impresión lo descolocó y en sus entrañas un profundo vacío sintió. — Sakura, mi preciosa Sakura. Será mejor no hacer esperar a tu Madrina.

La tristeza se cernió sobre Sakura, el brillo de los ojos de la joven pelirrosa se apago en un instante. El Uchiha no supo que contestar, jamás le dijo a alguna mujer que la amara nunca lo sintió así y la confusión de no saber si lo que el sentía por la joven era pasión o amor.

— ¿Te gustaron las flores que te traje? - Sasuke quiso cambiar de tema.

— Si.

Después de un día entero en la posada cada uno se dispuso a dormir en sus respectivas habitaciones.

No puedo conciliar el sueño, que puedo hacer respecto a la declaración de Sakura, mi linda y preciosa Sakura, lo cierto es que nunca nadie me hizo sentir lo ella a logrado, me desmorona, me apasiona, me inquieta, no puedo pensar en nadie más, es una verdadero ángel quiero cuidar siempre de ella. ¡Si! ella, es ella a la que amo, por supuesto, mi niña benevolente, la quiero con locura, es mía, mía, siempre mía y la necesito con urgencia, mi más preciosa Joya.

El Uchiha salió de su habitación y de incógnito entró a la de su ahijada, miro sus pies descalzos se acerco a ellos y los empezó a besar, esos limpios, pequeños, suaves y delicados pies, con la lengua acaricio loo dedos de sus pies, se los metió a la boca con sensualidad, el miembro de Sasuke se puso rígido, los pies de una mujer lo excitaba demasiado, la joven pelirrosa se movió y la respiración
se aceleraba, Sasuke fue subiendo poco a poco besando cada rincón de todo su cuerpo hasta llegar a la redondez de sus senos, los devoró ágilmente, Sakura despertó poco a poco, se impresionó pero la excitación se hizo presente, empezó a penetrarla, lo rodeo del cuello y siguió el ritmo de su amado, ahogando jadeo y reprimiendo gemidos los dos amantes disfrutaban del candente sexo y pasión, sobre todo sabiendo que Karin estaba al lado de su habitación, la adrenalina los inundó de placer el éxtasis de sus cuerpos los hizo contraerse, cuando terminaron se abrazaron se dijeron cosas tiernas y divinas.

Al siguiente día en Nebraska, se dispusieron a disfrutar del hermoso paisaje de ese lugar.

— Sakura ven quiero que nos tomemos una foto, para recordar este preciso momento, - Sasuke pidió a un fotógrafo que los retratara.

Se tomaron la foto una ellos dos y la otra con Karin, disfrutaron de los lugares más concurridos de Nebraska, compraron algunas prendas, calzado y un hermoso brazalete para Sakura. Todos los días salían los tres a correr cada lugar, y por las noches Sasuke se escabullía a la habitación de Sakura para saciar sus deseos pasionales, hasta entonces Karin no había notado algo extraño, lo único diferente era que Sasuke no salía para ver a su amante, a Karin le pareció algo raro pero no quiso pensar mucho en eso. El comportamiento de Sakura dejaba mucho que desear, cada vez se volvía mucho más caprichosa, insolente, exigente y manipuladora a la pelirroja no le pareció bueno que Sasuke mal criará a su ahijada sobre todo que se dejara manipular por esta pero no podía hacer nada al respecto.