_tn_ picó flojito a la puerta. Lo suficiente para que el que estuviera despierto a estas horas, la pudiera abrir. Tenía los ojos rojos de tanto llorar.
-¿Qué dices? – le volvió a preguntar Lucia. - ¿Pero como que Jasmine volvió?
-Pues… eso. Que no estaba muerta… - _tn_ sonó los mocos en ese pañuelo ya tan húmedo, tanto de sus lagrimas como por lo otro. – Y la quiere a ella… la sigue amando… lo sé… - Su amiga la abrazó. No podía creer todo lo que le estaba pasando a _tn_ en poco tiempo. Y es que ella, no se merecía todo eso. – Se va a olvidar de mi, o peor, me va a echar de su casa y me va a mandar a la mier.da…
-Justin no hará eso… tampoco se olvidará de ti, tonta… él te quiere, pero ahora ha vuelto la mala puta esta y él aun está más paranoico que tú… dale tiempo.
-Tiempo es el que me doy a mí… a que no duro una semana más en esa casa, junto con Jasmine… - Apretó fuerte el cuerpo de Lucia contra el de ella, y apoyó su frente en el hombro de su amiga. – Vamos… la peli ya a empezado, y tu novio y los demás nos esperan…
Los ojos se le volvieron a humedecer. En ese momento la puerta se abrió. Ryan estaba frente a suyo, con una cara de las más largas. Con un pantalón de pijama y sin camisa. Y _tn_ debía admitir que era uno de los hombres más sexys que había visto en toda su vida. Y eso que está recién levantado… porque lo habré despertado yo ¿no?. Ryan se hizo a un lado dejándola pasar, cuando se fijó en sus ojos
-_tn_......– murmuró cerrando la puerta - ¿Has estado llorando? -Y ella estaba demasiado sensible para que le preguntaran. Porque a la mínima que abriera la boca, se pondría a llorar. Ryan se acercó a ella y la abrazó. -Ven aquí… - y no pudo contenerse, abrazó a Ryan. Él apoyó su barbilla en la cabeza de _tn_, y pronto se la beso. Ella temblaba. – Shht… ya… tranquila…
_tn_ se separó de él, y cogió un pañuelo de su bolso.
-No entiendo como Justin te está haciendo todo esto… - dijo acariciándole una de las mejillas.
-Da igual… si él es feliz, yo también lo… - en ese momento se escuchó un gemido. Más que eso, un grito. Gutural. Estaban haciendo el amor. Justin le estaba haciendo el amor a otra mujer.
Las lágrimas volvieron a sus ojos. Y ya no sabia donde meterse. Y si cerraba los parpados, la imagen de ellos dos, juntos, desnudos, aparecía, allí, permanente. Y lo odiaba. Odiaba a Jasmine. Odiaba a Justin, por haber llegado a un sitio donde ningún hombre había llegado antes.
-¡Joder! – maldijo entre sollozos, dando un puñetazo en la pared – me voy… no aguanto esto, Ryan… - dijo negando con la cabeza, mirando a el hermano de ese sueño andante, entre lágrimas.
-No… no te puedes ir… - dijo acercándose de nuevo a ella - ¿Dónde iras? En tu casa está tu padre… y seguro que están preguntando a todas tus amigas donde te encuentras… este es el mejor…
-No Ryan… este es el peor sitio. Prefiero estar con mi padre antes que escuchar como Justin se fo.lla a esa zorra. – se sentó en el parque, cogiéndose de las piernas.
-No te vayas, por favor… deja que esto pase… - alzó la cara de _tn_ por el mentón –Justin no se merece a una persona como tú. – y al fin, juntó sus labios con los de _tn_.
Y a ella le costó admitirlo, pero ese beso… era el más dulce y sincero que había probado nunca. Y lo siguió. Pasó sus dedos entre el pelo corto de Ryan. Él la agarró por la cintura, y hizo que se levantaran del suelo. La agarró por los muslos, y la subió a su cuerpo. _tn_ lo sentía, sentía el cuerpo de Ryan empegado a ella. Empezó a mojar, con una facilidad extrema. Se inclinó hacia el cuello de él. Quería probarlo, quería probarlo todo. Y se prometió a ella misma, que no pensaría en Justin. Al menos ahora.
-Ese niñato no sabe lo que se pierde – dijo Ryan acariciando el labio inferior de _tn_. – ven… voy a hacer de esta noche, la mayor que hayas disfrutado. – La cargó hasta su habitación.
-Va a ser algo imposible superar a Justin… te lo aviso – se rió ella. – lo tengo en un pedestal, des de luego…
-No me lo creo… - dijo bajándole la falda – si quisiera podría hacer que te corrieras con solo escucharme. – le susurró al oído. Y fue sorprendente, pero hizo que se estremeciera, de pies a cabeza - ¿ves? Espera a ver lo demás…
_tn_ se mordió el labio inferior, dejando que Ryan la desnudara. Se escucharon más gemidos en la habitación de al lado.
-No hagas caso… - le dijo Ryan quitándole el jersey – vas a superar en gritos a esa puta.
-¿No te cae, cierto?
-Para nada… ya te contaré… - le dijo mordiéndole el cuello – no ha venido aquí por el amor de Justin.
_tn_ estaba en sujetador y bragas. ¿Y para que mentir? Ryan había hecho que las empapara en tan solo un par de minutos.
-Jasmine se fue, sin decir nada… durante tres años. El mismo tiempo que Justin ha estado trabajándose su carrera como artista.
-¿Artista?
-Toca el piano en audiciones importantes. – Ryan se pasó la mano por el pelo – Y ahora que Justin está a punto de ganar uno de los premios más grandes de todo estados unidos, ella vuelve. ¿Algo extraño, no? Jasmine solo ha venido por el dinero… el cheque que te regalan al ganar la competición.
Ahora a _tn_ le subieron los ánimos. La que se liaría cuando Justin se enterara de todo aquello. Aun que le daba coraje que Justin no le hubiera dicho que tocaba el piano en audiciones… ¿Por qué?
-¿Y por qué no se lo has dicho?
-Porque no me va a creer. Justin es el hermano más testarudo que tengo, y cuando está ciego, está ciego. Y no hay nada que hacer.
-¿Y si se lo digo yo?
-Nena, con palabras no lo vas a convencer. Hacen falta hechos, para convencer a Justin.
_tn_ suspiró. Miró a Ryan. El pobre estaba excitado, y estaban allí, con el mismo tema de conversación: Justin. Se sentó a horcajadas encima de Ryan.
-Ya hablaremos de esto mañana… - dijo volviéndolo a besar – Ahora solo quiero saber, que tan bueno es el hermano de mi profesor. – Y Ryan le dedicó una última sonrisa, de las más picaronas.
-¿Entonces? – Ryan se separó y la miró.
-¿Estás segura de que quieres que te lo cuente?---------------------
Estoy feliz ^^ llegamos a los 200 leídos
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Voy a ser tu maestro |HOT| {Terminada}
Fiksi PenggemarA la señorita Carmen se le había enfermado el marido. Por lo que _tn_ sabía, era bastante grave. Cáncer de hígado... la gente decía que se podía morir de eso. Lo peor no era que el marido de Carmen, la aburrida profesora de música, se estuviera a pu...