Love Me | 𝗖𝗗𝗠

17.

El peliblanco da media vuelta y nos mira, Castiel me observa confundido.

-Lys yo... quiero hablar contigo.- dije por fin, él no contestó.

-¿Hey qué te ocurre Lysandro?- Castiel se acerca a él con intenciones de darle un abrazo amistoso pero este lo esquiva.

-Estoy bien, no tengo por qué hablar contigo.- no me esperaba esa respuesta de su parte.

Disimuladamente le hice una seña al pelirrojo para que se vaya y me dejará sola con el victoriano, antes de que él pudiera decir algo lo agarré del brazo y salimos afuera por la puerta de emergencia.

-Lys escucha, se que no quieres hablar pero yo si. Quiero que me digas todo lo que tengas que decirme.- él respira intranquilo y tomó su mano.

-No t-tengo nada que decir.- escucho que su voz esta temblorosa y me preocupo.

-¿Lys estás llorando?- él negó con la cabeza rápidamente y me dio la espalda, estoy impactada nunca lo habia visto así. Sin pensar lo abrazó por detrás y apoyó mi mejilla en su espalda.

-Déjame solo, estoy bien.- lo apreté más fuerte, no iba a soltarlo.

-¿Estás enojado conmigo? ¿O con Castiel?- no hubo respuesta, ya estoy harta iré al grano.- ¿Yo te gustó?

Él separa mi brazos y se da vuelta para mirarme a los ojos.

-Se que suena loco pero haz estado actuando extraño y siempre que estoy con Castiel parece que te molesta y.- soy interrumpida.

-¡Castiel siempre es Castiel! ¡¿Sabes que me molesta?! Me molesta que yo no sea suficiente para ti que lo elijas a él y no a mi. Y si, ¡estoy enamorado de ti por el amor de Dios!- recuerdos de Lysandro junto con conmigo pasan por mi cabeza, me quedé helada no podía hablar.- ¡Quiero que me ames pero no puedes, porque mi mejor amigo es tu maldito novio! Nunca senti tantos celos de alguien en toda mi vida.

-Entonces perdóname por hacerte enojar, por hacerte sentir celos, por hacerte sufrir, perdóname por todo.- me abrazo a mi misma, creí que él me iba rodear con sus brazos y que todo iba a estar bien pero abrió la puerta y se fue.- Lys no te vayas.- dije más para mi misma.

Arrastre los pies hasta volver a la fiesta, no sé que hora era pero ya quería volver a casa. Siento mis ojos húmedos y los limpio rápidamente al ver a Rosalya correr hacia mi.

-Valerine ¿dónde estabas?- siento como toma mis mejillas entre sus manos para verme mejor, frunce el ceño y me lleva hasta donde la estaban maquillando horas atrás.

-¿Qué ocurrió?- me senté en una silla y ella se puso de rodillas frente a mi.

-Tenías razón.- logre decir.

-¿De qué?- acarició mi mano.

-Lysandro está enamorado de mi, y tú lo sabías.- ella suspira.

-¿Te lo dijo él? Si no te conté nada es porque él debía decírtelo no yo.

-Si, me lo acaba de decir, tenía mis sospechas y le pregunté.- comencé a contarle lo que había ocurrido.

-Todo se solucionará no te preocupes.- me abrazo y le correspondi.

-Estoy confundida Rosa no se que hacer.- ella acaricia mi cabello.

[...]

Apenas son las 2:00 pm y estoy aburrida y deprimida. Estaba sentada observando como los demás se divertían bailando, tomé una copa de vaya saber que era y la bebí.

Ponerme un poco ebria no hará daño a nadie ¿no?

Narra Lysandro.

Acabó de confesarme a Valerine un poco a la fuerza, no se como sentirme, en ese momento sólo dejé salir lo que nunca me atreví a decirle en la cara.
Ella es tan bonita, amable y tan inteligente acaba de darse cuenta ella sola lo mucho que la amo.