Ares, Poseidón...
De la puerta del mágico gremio, salieron proyectados el par de villanos, ahora de pie frente a las hadas se encontraban dos espíritus, uno de cabellos largos y oscuros sujetos en un minucioso tocado, su piel era ligeramente tostada y sus ojos de un precioso color avellana; sus rasgos masculinos se acentuaban con la brillante armadura de color oro; el muchacho a su lado, era un poco más joven, tenía unos ojos azules muy claros, su cabello era albino y largo -se mecía libre por su espalda- vestía unas bombachas color negro y calzaba unas sandalias; en la parte superior, en su torso específicamente, usaba una polera sin mangas de malla negra casi traslucida y en sus manos se posaba un gran tridente color bronce.
-Procederemos con el plan, con su permiso.
Dijo el albino, con un tono cortés en su voz; Lucy con un movimiento afirmativo les indico que se retirasen.
-Por favor escúchenme atentamente.
Hablo con voz segura la maga de espíritus estelares.
El enemigo es fuerte y más si los dos están juntos por eso llame a dos espíritus, ellos ya saben que deben hacer, ahora necesitamos una estrategia y no tenemos mucho tiempo.
-¿Que planeas Lucy?
-Atacarlos por separado.
-Me parece bien, tú que los conoces más, ¿sabes qué tipo de magos son?
El patriarca del gremio se rascaba la blanca barba que nacía de su mentón, a la vez entrecerraba los ojos mirando a la rubia que se mantenía de pie con una expresión seria.
-Usan del tipo elemental, por lo que se.
-T-Te equivocas.
Las miradas de los espectadores se posaron en una jovencita de carente estatura, ella nerviosa jugaba con sus manos.
-¿Que dices?
Pregunto Lucy acercándose a Ran.
-Yo los conozco...
Susurro, su hermano menor la miro preocupado.
-Ellos acabaron con mi familia, la destruyeron... Miden no lo recuerda.
-Por favor dime lo que sabes.
Le pidió suplicante la Heartfilia.
-Los primeros recuerdos de un infante suelen ser los más felices ¿no?, bueno los míos no son nada parecido; desde que tengo uso de razón viajábamos de un lugar a otro, en un principio creía que era normal tener una vida nómade hasta que mi madre me saco de ese tonto sueño, la situación era diferente, horrorosa; era simple dos sujetos nos perseguían buscando algo que era suyo y nos asesinarían si fuera necesario para obtenerlo, pero mi progenitora postergo su vida y la de nosotros, para salvar a los demás humanos que ignoraban que al día siguiente quizás, no despertarían... Ella predijo, que en mi camino me encontraría con alguien que sabría que hacer con esto, ese alguien eres tú Lucy.
La castaña le entrego un par de llaves, eran de obsidiana, una de ellas con incrustaciones de amatista y la otra con detalles en ópalo; al tomarlas la maga estelar se percato de que no contenían ni un solo rastro de poder mágico, las miro un momento y supo quién sería el indicado para decirle que significaba eso.
-Crux.
En medio del gremio, el espíritu de la cruz del sur se hizo presente, con su expresión adormilada y su postura encorvada, miro a su dueña y le hablo.
-¿Que necesita señorita Lucy?
Ella le acerco al viejo el par de objetos y le preguntó.
-¿Sabes qué son?
El, cerró sus ojos en busca de conocimiento, después de unos minutos los abrió sorprendido.
-Pertenecen a un par de espíritus, los llamados Ying y Yang, ellos desaparecieron hace muchos años pero eso ya es asunto clasificado.
-Muy bien, gracias, puedes retirarte.
Ella medito unos minutos, respiro hondo y siguió hablando.
-Nos dividiremos en dos grupos, el primero estará compuesto por Natsu, Erza, Ares y Hades; en el otro serán; Gray, Wendy, Juvia, Miden y Poseidón; con eso será suficiente.
-¿Por qué yo no?
Pregunto Ran sorprendida, ella los conocía mas que nadie.
-Atenea me lo dijo.
Lucy se acerco al oído de la castaña y a un volumen inaudible hasta para los Dragon slayer le dijo.
-Tú lo amas no es así...
Hasta aquí lectores, espero que les guste, nos leemos no tan pronto ya que la escuela se pone cada vez más difícil :C
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Fairy tail, el corazón de pandora.
FanfictionFAIRY TAIL Doce llaves que abren diferentes dimensiones, realidades; que contienen un poder inimaginable, con distintos nombres y espacios, pero ¿solo tienen diferencias entre si?, no; ellas tienen algo en común, ellas tienen la misma historia. (pau...