TRECE

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— Creo que... estabas poseído.

Isaac me miró con esos grandes ojos de confusión.

— ¿Poseído, dices? — dijo totalmente atónito. — Ay Dios mío... Ana... fue... fue el fantasma de...

— ¿De nuestros sueños?- le interrumpí sabiendo de lo que hablaba — Si, él... o ella... o eso. No sé que sea pero... Isaac, tenemos que descubrirlo.

De repente, su expresión de miedo se marcó aún más. Y yo que pensaba que eso no era posible...

— Ana... ¡¿Estás loca?! ¡Yo no pienso volver a tener un encuentro con esa cosa!

Supuse que diría eso...

— ¡Tenemos que hacerlo! O jamás nos va a dejar tranquilos. Nuestras noches tendrán el mismo sueño una y otra vez a menos que descubramos algo y...

En eso me acuerdo...

El archivero. Ahí deben de haber respuestas.

Me dirigí al lugar del sótano donde estaba el archivero. Caminé lo más apresurada posible. Me incliné en cuclillas buscando en cada cajón metálico. Rápidamente, me dispongo encontrar el archivo indicado. Seguía buscando pero no lo encontraba...

Escucho pasos aproximandose hacia mí.

— Ana, ¿Qué es lo que estás ha...?

— Busco un archivo importante... — le dije lo más seria que pude ser. — Cuando vine a buscarte, encontré este archivero y, al checarlo, encontré un folder de la mujer... — mi voz se acortó al recordarlo — la mujer que atropellaron. ¿Lo recuerdas?

— Si — me respondió.

— Esta mujer se me ha aparecido desde que llegué al hospital... y no creo que sea sólo una coincidencia que este archivo se encuentre aquí.

Isaac dirige su mirada hacia mí y hacia al archivero, una y otra vez. Su cara era la de un niño pequeño que acaba de presenciar su más grande miedo... y creo que tal vez es lo que está pasando.

Dirigí mi mirada hacia arriba y me puse a analizar su rostro desde el suelo...

El chico que me gusta tiene miedo. Mucho. Como yo...

Decido levantarme dejando de lado lo que estaba haciendo. Agarré sus manos e inmediatamente sus hermosos ojos oscuros me miran.

— Yo también tengo miedo, Isaac. Tengo miedo de perder a mis amigos, de perder a mi padres. Tengo miedo de que todo mi mundo se derrumbe al enfrentar esto. Tengo miedo... tengo miedo de que te lastimen... yo... yo necesito terminar ésta pesadilla y finalmente encuentro a alguien con quien puedo pasar por esto. Necesito de tu ayuda... no, mejor dicho, te necesito a ti. A ti, aquí conmigo.

Isaac sólo me miraba. Sonrió y sólo me seguía escuchando.

— Necesito que me apoyes... yo...

— Te ayudaré, Ana. Yo también necesito terminar con esto... esto que me ha atormentado desde que era un niño y ésta... es mi oportunidad.

La que estaba sonriendo ahora, era yo. En un momento de impulso, mis brazos rodearon su cuello envolviéndonos en un cálido abrazo. Un abrazo que me era suficiente para no sentirme sola.

— Gracias...

Después de unos hermosos segundos, me aparté poco a poco de su cuerpo pero sin quitar mis brazos de su cintura.

Isaac era considerablemente más alto que yo así que, miré hacía arriba en busca de esos ojos marrón que me volvían loca. Sonreí y planté un beso en su cachete.

— Pequeña... — me dijo sin dejar de mirarme tan dulcemente — no quiero arruinar esto pero... es hora de buscar ese archivo. Terminemos con esto.

— Me parece buena idea — mis brazos se desprendieron de su cintura y me reí sabiendo que él estaba en lo cierto.

Además, este tipo de momentos lindos no es algo que me gustaría vivir en un sótano abandonado de hospital...

Nos alejamos y nos dispusimos a buscar.

Después de un rato, descubrimos que había más archiveros.

Decidimos dividirnos para trabajar más hábilmente.

Yo me dirigí a uno que estaba más reciente, menos maltratado... Al parecer era de archivos que no tienen tanto tiempo aquí abajo...

Lo revisé detenidamente y... Aquí hay algo...

Un folder con varias hojas. Lo abrí.

La comencé a leer y...

CARTA DE DEFUNCIÓN

NOMBRE: James Carter
EDAD: 13
PADRE: Desconocido
MADRE: Desconocido
CAUSA DE MUERTE: El cuerpo tiene diversas cortadas en el pecho similares a rasguños. Presentaba marcas en el cuello revelando estrangulamiento. Finalmente, presenta múltiples golpes por todo el cuerpo.

Mientras más leía, más curiosidad me daba. Pasé a la siguiente hoja...

REPORTE

El cuerpo desapareció en la morgue.

Miré hacía atrás para checar que Isaac no viniera.

DÍA DE DESAPARICIÓN: Martes 21 de Mayo, 2009

Este caso... Era extraño y escalofriante. La curiosidad me ganaba y decidí continuar...

Di vuelta la página y mi sangre se heló.

Era un foto de un niño, uno que conozco...

ISAAC.

Cuando La Luz Se Vuelve OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora