Siempre a mi lado Cielito

capitulo 77. ni siquiera yo

andrea sentia como sus piernas temblaban, de repente aquella habitación le pareció mas peuqñea de lo que en realidad era, a pesar de estar sentada sentia como si el mundo estuviera dando vueltas, su garganta se cerro impidiendole soltar una palabra mas, su corazon empezó a latir con mas fuerza. aquello ya era demasaido, una aberración, definitivamente la vida se habia ensañado contra ella para que nunca fuera feliz. el hombre que mas amaba en la vida, el que le dio las esperanzas de amar... era el mismo cobarde que se la habia quitado, el mismo hombre que acabo con sus iluciones, el culpable de haber perdido todo en cuestion de segundo, pero tambien el culpable de haberle dado mas de lo que habia imaginado. no, aquello era demasiado

samuel: perdóname andrea -dijo en un susurro al ver a andrea palida que no decia ni una palabra- se que no lo merezco, se que soy un maldito infeliz por haber hecho tal atrocidad, no hay nada que me justifique, pero no he pasado ni un solo dia despues de esa noche que no me arrepienta de todo lo que cause. te amo andrea, te amo y por ti y por mi hijo...

andrea: ¡cállate! -grito al fin- ¡cállate! ¡callate! ¡cállate! no manches su nombre, no manches algo tan puro

samuel: se que no merezco ni siquiera que me comprendas -se acerco para tocarla, pero andrea se lo impidio apartando su mano-

andrea se negaba a seguir escuchándolo, nunca habia sentido tanto asco, tanta verguenza, tanta indigancion, preocupacion y tanto dolor al mismo tiempo, habia confiado en el, habia entregado su cuerpo al mismo hombre que le quito su pureza. se puso de pie dispuesta a salir de ahí, a correr hasta que el cansancio la hiciera olvidar lo que samuel le acaba de confesar. pero su dolor era tan grande que no la dejo abanzar, de repente sintio un frio recorrer toda su columna, instintivamente puso una mano sobre su vientre sintiendo la pruva viva de una canallada mas, a diferencia de que esa fue concebida con mucho amoor

sus manos temblaban y una pequeña capa de sudor cubrio su cara, intento avanzar, pero ya no supo mas, todo se volvio negro a su alrededor

samuel grito por ayuda, de inmediato el medico entro y la mirada que le dio fue suficiente para sentirse morir, lo miro con tanta pena, el sabia todo lo que habia pasado, Samuel tuvo que confesarselo para que todo el proceso de donar medula empezara sin ninguna complicación, el señor no lo justificaba, pero si lo entendia, de cierta forma sintio que su intención nunca fue hacerlo apropósito, que no fue mas que un momento de inconsciencia que le estaba costando el amor de su vidad

el medico llamo a unos enfermeros y le pidio que la llevaran a una habiatacion, de inmediato el ginecólogo de andrea fue a la habitacion, la reviso y dedujo que lo mejor era inyectarle un tranquilizante para que descansara, su presion estaba muy alta y una ecografia dedujo que estaba empezando a tener contracciones que de inmediato el doctor se encargo de controlar, aun era muy pronto y tener un bebe con tal solo 25 semanas de gestacion y con la presion tan elevada podria ser una desgracia para ambos

Samuel Pov

sabia que todo esto iba a pasar, que iba a odiarme, pero no queria causar todo esto, pero tampoco podia callar mas.. ¡DIOS! ¿que es todo esto? ¿que clase de prueba era esta? ¿de verdad no puedo ser feliz? ¿a eso estoy destinado? ¿solo a causar daño?, no quiero que le pase nada a ella, ni a mis hijos... señor yo te juro que si los salvas a los tres dejare de insistir, me alejare de ellos aunque eso me mantenga sumergido en el dolor para siempre, ya no quiero causar tanto daño, ya no quiero que mas personas sufran por mi culpa, ya no puedo mas

samuel se dejo caer al suelo y abrazo sus piernas mientras lloraba en la puerta de aquella habitación, si la tranquilidad de Andrea y la vidad de sus hijos dependia de que el este lejos, asi lo haría, aunque prometio que lucharia por su perdón, ya no lo haria si eso le causaba tanto daño a su andrea, ya habia sufrido mucho por su culpa