Capítulo 2: Vamos de excursión

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Estando todos en clase platicando sobre lo que habían hecho ayer, chismes y rumores que constantemente aparecían y entre todo, bromas y chistes que se decían unos a los otros. Al momento en el que entro la maestra se creó un silencio bastante profundo haciendo que la maestra sonriese al ver que sus alumnos si eran educados y ordenados, o simplemente pensó que le tenían miedo lo cual para ella sería mucho mejor, sin decir "buenos días" ni nada, comenzó a escribir en el pizarrón lentamente mientras todos los alumnos iban diciendo igual de lento lo que la maestra escribía.
–Excursión–. Alzo la voz la maestra y luego se dio la vuelta hacia sus alumnos para continuar. –Como saben siempre al final del año escolar se hace una excursión a algún lado como festejo a los pasaron año –. Comenzaron algunas risas en el salón ya que uno de los alumnos molesto a otro porque él lo más probable es que tuviera que repetir año, la maestra hizo caso omiso a esa interrupción. –Y como tradición de la escuela, a ustedes que ya van a salir y entrar a alguna universidad o a trabajar, se les hace un viaje especial a un bosque cercano donde acamparemos tres días y dos noches, ya que para muchos ese día será la última vez que estén juntos y es una buena oportunidad para pasar tiempo con aquellas personas que casi no trataron a lo largo de este año escolar –.
Hubo gran emoción por la mayoría de los jóvenes, sin contar a unos cuantos los cuales no les llamaba la atención ir, sin embargo era obligatorio asistir a esa excusión. Entre las personas que no les emocionaba la idea de ir a ese lugar se encontraba Alice, pues al escuchar la noticia sus ánimos bajaron y estuvo todo el día escolar con la cabeza baja y sin platicar mucho, ni siquiera con su novio.

Al salir de clases, Alice agarro su mochila y sin decir nada y tomó camino hacia su casa, Chris al verla triste no pudo evitar ir tras ella, gritándole para que volteara, sin embargo, ella seguía su camino sin detenerse o bajar su velocidad.
–Alice por favor, "eso" paso hace ya tiempo, sé que es difícil para ti pero...–. La tomo del brazo para conseguir detenerla, pero no hacerla que voltee, para él eso ya era gran avance. –Pero, no puedes vivir en el pasado.
–Yo no estoy viviendo en el pasado, son puras ideas tuyas.
–Si fueran puras ideas mías entonces explícame solo una cosa.
– ¿Qué quieres que te explique?
La sujetó ligeramente más fuerte del brazo y con una voz entre cortada le pregunto: – ¿Por qué estas llorando?
Efectivamente, ella se encontraba llorando y se veía claramente como le corrían las lágrimas a través de todo el rostro, aun así, desistía en voltear.
–Esto, solo es...
–No saques excusas, yo sé bien porque es, no trates de ocultarlo más, para eso estoy aquí ¿No?
Alice soltó en un llanto más fuerte y se volteó para abrazar a Chris y sollozar en el hombro de él. –Christopher, perdón...
–No hay nada por lo que debas pedir disculpas–. Correspondió al abrazo intentando consolarla. –Si quieres, no vamos a ese viaje, todo sea por verte mejor.
–La verdad, si quiero ir, sin embargo...
–No crees poder con tanto sentimiento encontrado de aquel lugar.
–Así es–. Se acomodó de tal modo en que se vieran a los ojos, los de Alice se encontraban rojos por su llanto, pero los de Chris mostraban mucho cariño.
–Pero aun así quiero ir.
– ¿Estas segura?
–Ya ha pasado mucho tiempo desde que aquello paso y sería bueno ir al lugar donde estuvo mi hermano por última vez, y talvez dejar algo así como algunas flores o chocolates, a él le encantaban mucho.
–Bien, yo estaré ahí para lo que necesites.
–Gracias, me alegra mucho haberte conocido –. Alice se acercó a Chris para darle un beso y luego ambos se fueron a sus respectivas casas a descansar y terminar los deberes que tenían pendientes para mañana comenzar un nuevo día.

Esa noche Alice no podía dormir por los recuerdos que habían llegado de aquel día. El hermano mayor de Alice, Axel, acudía a la misma escuela a la que va Alice, sin embargo él iba de salida cuando ella apenas iba a entrar, se hizo también la excursión al mismo bosque, era una experiencia única el convivir así con la naturaleza y con todos sus amigos, fue toda una aventura para él, escalar barrancos y hacer rapel, nadar en un lago y usar un kayak, el sin fin de risas con platicas con los amigos y bromas que les hacían a sus demás compañeros cuando se quedaban dormidos por la noche.
El último día de la excursión, Axel y sus amigos se encontraban sentados a la orilla de una barranca muy alta, cuya altura iba casi a los 50 metros, ni uno de los que se encontraba ahí sentado le tenía miedo a las alturas, pero su suerte iba a cambiar en ese momento. Un lobo de aspecto poco amigable los comenzó a gruñir al aparecerse detrás de ellos, cuando los jóvenes se dieron vuelta no sabían a donde ir, ni que hacer, no había nada cerca para defenderse y si retrocedían caerían desde una altura mortal. El lobo comenzó a correr rápido hacia ellos, intentaron huir de la bestia pero solo uno corrió con mala suerte. El lobo brinco sobre Axel, y la fuerza del brinco fue lo suficiente para hacer que aquel joven diera unos pasos para atrás y cayera desde aquella gran altura junto con aquel lobo, los amigos solo escucharon un golpe muy fuerte y al asomarse por la orilla del barranco solo veían el cuerpo inmóvil de Axel y el lobo. Bajaron hasta donde se debería encontrar el cuerpo, con médicos que había por el lugar, los profesores a cargo y todo el resto de compañeros que habían acudido al viaje también, sin embargo, el cuerpo ya no se encontraba en ese lugar solo una gran manche de sangre.
Comenzaron a buscar todos por toda la zona buscando a ver si algún animal salvaje se había llevado el cuerpo, pero no se encontró ni un solo rastro de donde había quedado el cuerpo de Axel. Alice comenzó a llorar al recordar el momento en el que el director de la escuela acudió a la casa de ella y le contaron todo a su madre mientras ella escuchaba escondida sobre todo lo que le había pasado a su hermano en ese lugar, fueron días muy duros para toda su familia y más para ella que aun teniendo a su novio a su lado apoyándola tomo mucho tiempo para poder recuperarse, y ahora, al ir a aquel lugar le dolía mucho, pero aun así quería ir para poder "despedirse" de su hermano y así poder tener un lugar donde pudiera dejar un ramo de flores o algún adorno como memoria y adoración que le tenía a su hermano, ya que es lo único que ella podía hacer.

A la semana siguiente todos los alumnos se encontraban haciendo fila para acceder a los autobuses que los llevarían a aquel bosque, algunas llevaban maletas muy grandes, otros simplemente una mochila pequeña. Chris llevaba una maleta grande porque en ella, aparte de sus cosas, llevaba también las de Alice. Y al estar ya todos en los camiones, incluyendo a la maestra, tomaron rumbo hacia aquel lugar donde muchas aventuras les esperaban.

La Cámara de los CondenadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora