Capítulo 4: En tus recuerdos viviré

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El sol ya había salido cuando todo mundo comenzó a despertarse a excepción de dos personas, Chris desde temprano se encontraba calentando y haciendo diferentes ejercicios como trotar, correr, brincar la cuerda y demás. Alice se encontraba a su lado animándolo nada más, pues ella en verdad quería que él ganara la competencia.

Estando todos en el comedor Mike no dejaba de ver a Chris con una mirada muy fría y profunda, Mike quería vencer también y no dejaría en ni un solo momento darle ventaja a Chris para ganar, él iba con todo al igual que su rival.

Estando la clase afuera y ya dividida en equipos de cinco integrantes cada equipo, se fueron señalando las seis fracciones que tiene la competencia, cinco de ellas son individuales y la última todo el equipo debía participar.
El señor Alan Ruiz comenzó a señalar cada fracción de la competencia.
–Elijan bien que integrante de su equipo participara en cada una de estas competencias, recuerden bien que en las primeras cinco partes de la competencia deberán participar todos los integrantes, en otras palabras, nadie podrá participar en dos o más partes de esta, solo una en las individuales y de nuevo en la grupal. Comenzaremos de la siguiente manera...–. Tomo un gran trago de aire y en un pizarrón que tenía fue señalando cada uno de los dibujos conforme decía la actividad. –Natación, carrera en bicicleta, escalación, carrera de obstáculos y por último, busca el tesoro–.

Los equipos comenzaron a planear estratégicamente a quien le correspondía mejor cada rol. En el equipo de Chris, lo eligieron a él para la carrera de obstáculos por su increíble velocidad, y los demás se repartieron las actividades que quedaran. Al silbatazo del guardabosque, se dirigieron al lago para la primera actividad, carrera de natación, y dar comienzo a la gran competencia.

Dependiendo en el lugar que quedaran sacaban puntos que se irían sumando mientras continuaba la competencia, en las actividades que más de destaco el equipo de Chris fueron en la de escalación, donde la amiga de Chris, Danna, logro llegar a la cima demasiado rápido, ella tenía experiencia en eso porque desde que era joven la llevaban a montañas y escalar es más que una afición para ella. La segunda en la que destaco el equipo fue en la de búsqueda del tesoro gracias al gran intelecto de George, el cual pudo descifrar el mensaje final para encontrar el tesoro, el cual estaba codificado con el código A1Z26, el cual él conocía a la perfección. La desilusión estuvo en la carrera de obstáculos, Chris dio un patético espectáculo ahí, quedando forzosamente en tercer lugar, parecía que las expectativas que se esperaban del chico más rápido de la escuela eran falsas o simplemente, su momento de brillo se había acabado, hubo abucheos para él, pero su equipo y su novia aún seguían con él apoyándolo.

Al hacer la suma de puntuación los resultados marcaron a dos equipos empatados en primer lugar, el de Mike y el de Chris. El dueño del lugar tomando la palabra frente a todos los participantes, les explico en qué consistía la última etapa de la competencia.
–Para todos aquellos que aún siguen abajo, no se preocupen, quien gane esta última etapa puede duplicar sus puntos al doble, lo siguiente es fácil, una carrera de relevo. Cada participante se acomoda en los puntos marcados en el mapa, deberán llevar un llavero con diez llaves diferentes durante todo el camino, primero se iniciara una carrera de natación por el lago, al salir, el siguiente deberá tomar su bicicleta y llegar al siguiente punto, al llegar con el tercer compañero, este deberá escalar un pequeño risco, con medidas de seguridad que el guardabosques les dará al llegar a ese lugar, ahí arriba estará el cuarto el cual deberá hacer una carrera hasta un cabaña que se encontrara más adelante donde estará el quinto jugador, el cual mientras sucede todo lo anterior deberá descifrar unos códigos ocultos para saber cuál es la llave de uno de los diez cofres que mantiene en su interior una copa que será del equipo ganador, que deben tener cuidado cual cofre escogen pues solo será uno por equipo–. El señor Alan estaba casi desmayándose por tener que hablar tanto.
–Es todo lo que hicimos anteriormente, pero ahora seguido, no tiene mucho sentido, es como si no se les ocurrieran otros eventos para participar–. Comento uno de los participantes.
–Ese es nuestro secreto pequeño campista–. Se a cerco al campista y continúo: –Un escritor muy flojo–. Guiño el ojo.

La Cámara de los CondenadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora